Como no me convenció del todo, se compró otra botella para ver si mejoraba, y en efecto esta vez nos ha parecido más sabroso.
Con una crianza en barricas de roble francés Allier y americano Virginia.
VISUAL: Color picota borde granataso y capa media alta.
OLFATIVA: Buena intensidad, interesante ensamblaje de fruta negra muy madura, cacaos, cueros, pieles, tostados y ahumados, todos a un mismo nivel formando un agradable aroma. Al oxigenarse algo lo notamos cada vez mas elegante, destaca algo mas la fruta, fruta en compota, sin perder cacaos y chocolates con un fondo de tostados y finas pieles y cueros, el fondo te recuerda a pelota de tenis nueva! Cabe destacar que siempre notamos algo de mineralidad (tierra mojada) que no molesta y que lo hace más complejo.
GUSTATIVA: Se muestra pulido y maduro, le falta algo de cuerpo solo medio cuerpo y también algo de equilibrio, ha perdido algo de acidez, pero el paso es amable y agradable, con bastante fruta y media persistencia.
Es un vino que se separa un poco de la línea de los clásicos Riojas.
Comprado en el aeropuerto de Madrid T4
VISUAL:Granate picota muy intenso.
OLFATIVA: Aroma de buena intensidad, con fruta roja y negra (moras), notas de panal, hierba seca, cueros y una madera al fondo bastante notable.
GUSTATIVA: En boca es de cuerpo medio, con acidez marcada, fruta suficiente y un final correcto, un tanto tánico aún.
Vuelvo a catar este Rioja que tan buenas impresiones me causó en su día.
La visual, sigue siendo de un picota granate de media intensidad, con una capa baja-media, con ribete degradado. Ya no hay destellos violáceos, como era de esperar.
La nariz se ha redondeado, alcanzando una composición aromática completamente equilibrada y redonda. La fruta roja está ahora presente en primer plano (a diferencia de la cata anterior donde la madera se presentaba en avanzadilla), ahora muy madura, prácticamente confitada, con apuntes de fruta negra. Las maderas se han hecho muy "cremosas", con notas de natas y lácteos en general. Sigue siendo balsámico y fresco. Notas especiadas muy sugerentes y cierto fondo de frutos secos muy grato.
La boca está completamente integrada, con magníficos apuntes frutales, los taninos perfectamente redondeados y la acidez en su justa medida para aportar al conjunto una grata frescura. Retronasal muy especiada, balsámica y fresca.
En definitiva, magnífica evolución de este riojano de corte moderno que, quizás, esté en un momento óptimo de consumo, aunque la gratísima acidez le augura más futuro por delante.
La primera botella (compradas en todovino.com) estaba arruinada por el maldito corcho. La segunda tampoco me ha parecido la alegría de la huerta... Picota con ribete granate, y capa media-baja. Limpio y brillante.
En nariz, poco expresivo, con la madera y algunas especias por delante de las frutas rojas y algún toque balsámico.
En boca, fresco y un tanto acido, con poco cuerpo. Taninos no muy pulidos, un tanto ásperos. Final sin nada que destacar. Igual me ha pillado en un mal día, o igual me lo ha estropeado la primera botella...
Picota granatoso bastante cubierto, con borde violáceo.
Nariz de intensidad media dominada por la madera, -de calidad-, que aporta notas especiadas junto con fruta fresca en segundo plano.
De trago fácil, justa acidez y taninos muy pulidos.
Retronasal especiada y buena persistencia.
No es un rioja al uso.
Me gusta.
Buena RCP.
Picota granatoso, de media capa, con ribete ligeramente degradado y violáceo. Brillante. Lágrima, presente, sin tintar la copa.
En nariz, la primera impresión es "riojana". Elegantes y suaves aromas de reducción antes de agitar la copa, en primer plano. Ligero especiado. Tras agitar la copa, aparece el fondo, de media intensidad, de frutillos rojos, frescos. Balsámico. Retama y eucalipto. Ligerísimo fondo mineral.
En boca, el primer ataque es de acidez y frescura. Nuevamente, fruta fresca, ligeramente golosa. Intenso. Cuerpo medio. Taninos sutilmente amargosos. Buena longitud. En retronasal aparecen las maderas finas y el carácter riojano.
Un rioja moderno, con tipicidad pero, a la vez, modernidad. Con más concentración e intensidad que un "clásico", pero sin perder el carácter y la elagancia de los "clásicos" riojanos.
Un vino con una excelente RCP.
Como dice la bodega, su Enfant Terrible. Es una selección de 704 barricas. Color cubierto, de carácter joven. Buen brillo, muy bonito a la vista, grácil lágrima. Leve reducción, que da lugar a aromas florales y finos balsámicos. Frutas de bosque, fragancia de membrillo, flor blanca muy sutil, tierra. Magnífica integración de la madera, que se muestra levemente. En boca se muestra más intenso, aunque se caracteriza por su tanino sedoso. Se muestra mineral, avainillado y algo tostado en retronasal. discreto pero complejo, sabroso y redondo. Me ha hecho disfrutar!!
Color rojo picota de capa media con ribete de color rubí. Lagrima abumdante pero que cae rapidamente.
En nariz la madera puede con un fondo de frutas rojas maduras que pugna por salir a un primer plano, en mi opinión sin conseguirlo. También aprecio notas balsámicas.
En boca el vino está redondo, pulido y equilibrado, pero al ser una edición limitada quizás esperaba algo más de estructura y pienso que quizas el vino se queda un poco corto. La botella ronda los 8 €.
Color cereza picota intenso de ribete granate. En nariz se perciben aromas complejos que recuerdan a ciruelas pasas en licor, moras maduras y maderas finas. En boca es un vino elegante y voluptuoso con amplia persistencia y un grato recuerdo final mineral.Para beber y para guardar.
Utilizamos cookies propias y de terceros con finalidades analíticas y para mostrarte publicidad relacionada con tus preferencias a partir de tus hábitos de navegación y tu perfil. Puedes configurar o rechazar las cookies haciendo click en “Personalizar”. También puedes aceptar todas las cookies pulsando el botón “Aceptar”. Para más información puedes visitar nuestra Ver política de cookies.