Y tres meses después nos vuelven a sacar este criancita riojano en un restaurante, con un rico arrocito en compañía de grandes amigos, todos Químicos, compañeros de carrera. Nos lo sacan de la vinoteca atemperado a unos 16°C. esperamos 15 minutos y procedemos con su valoración.

VISUAL: De color rojo picota de capa media con un ribete en tonalidades rubí, muy luminoso. Abundante lágrima, esbelta y transparente (87).

OLFATIVA: Los primeros aromas son de frambuesas, bastante marcados. Al agitar aparecen notas especiadas, típicamente riojanas, a vainilla y canela con un toque herbáceo a tomillo y un puntito de regaliz. De fondo los aportes de la crianza, ebanistería fina, cacao y tabaco inglés. Matices muy bien definidos con una intensidad media-alta (88).

GUSTATIVA: Ataque intenso, de alta acidez y opulencia. Paso por boca sabrosote, con cuerpo y de tacto muy amable. Sensaciones frutosas de entrada con aromas retronasales especiados y herbáceos. Post-gusto rico, carnosito, con notas balsámicas marcadas de eucalipto mentolado acompañadas por un puntito amaderado muy elegante. Persistencia de dos minutos exactos. Un poco más redondito que la botella de octubre (91).

La RCP la mantendremos en muy buena.

MARIDAJE: Nos lo tomamos en compañía de un suculento arrocito de bogavante. buen maridaje, frutosidad y apuntes balsámicos armonizando exquisitamente con los apuntes salinos y especiados del delicioso arroz. Gran velada con maravillosos colegas, para repetir!!

Salud-os!!

Visual: Color rojo rubí, ribete granate claro.

Nariz: Intensidad media, destacan los especiados, pimienta, vainilla, regaliza, cacao, tabaco, con una fruta roja en segundo plano.

Boca: Bien de acidez, cuerpo medio, suave, ligero - fluido, tanino bastante pulido, buen equilibrio entre la fruta roja y la madera.

Buen rioja aunque este 2018 me ha parecido más flojo que otras añadas.

Color cereza, capa alta, lágrimas gruesas bañan la Copa.
En nariz, aromas a ciruelas,fresones, frambuesas,con la oxigenación van apareciendo notas de cacao, tabaco, pimienta blanca, eucalipto.
En boca es un vino de buena acidez, taninos domados, alcohol que no sobresale, fruta y madera bien casadas, tiene volumen y un final amplio y sabroso.
Buen vino éste muga,destaco que pese a que ha reposado 2 años en barrica,la madera no resta protagonismo a la fruta y el vino está muy equilibrado y elegante,sin astringencias, tiene margen para crecer y mejorar mucho más con el paso de los años.

Estamos de cena por Benicasim en un fantástico restaurante. Última noche y mañana a Ecuador de nuevo. Nos pedimos este vinito (junto con un Comenge reserva) para acompañar los diversos platos, un riojita y un riberita. Nos sacan la botella de su vinoteca a 15°C y esperamos unos 20 minutos antes de proceder con su valoración.

VISUAL: Su color es rojo cereza en tonalidades rubí, de capa media-alta, muy luminoso. De lágrima abundante, fina y transparente (88).

OLFATIVA: De entrada asoman notas de fruta fresca (fresas y frambuesas) y posteriormente de fruta más madura (compota de moras). Agitamos y surgen especiados de vainilla y pimienta blanca, notas balsámicas de eucalipto, algo de regaliz y también algunos apuntes terciarios a tabaco, cuero y chocolate negro. La madera muy bien integrada. Intensidad media (87).

GUSTATIVA: De entrada presenta una acidez brutal y gran amplitud. Sabroso y de cuerpo medio con los taninos bastante pulidos ya, lo que le confiere un tacto muy amable aunque sorbo tras sorbo, parecen aumentar su presencia. Retronasal que emana aromas de fruta fresca con agradables toques de regaliz. Paso por boca rico, con un puntito de menta y eucalipto muy frescos de entrada, dando paso a notas acompotadas y amaderadas que perduran en boca dos minutos y 10 segundos. Rico este Muga 2018, con mucha vida por delante, bastante más juvenil que el 2016 que probamos en este mismo restaurante hace unos días. Con mucho futuro (90). Decir que lo califican como crianza y tiene 22 meses de crianza en barricas...

La RCP atendiendo a su precio en tiendas sobre los 15-17 euros, la considero muy buena.

MARIDAJE: Pues acompañó los primeros platos: Unas almejtas de carril, un plato de jamón Joselito y unas gambas a la plancha. Exquisito con el jamón, qué delicia la armonía de sabores, cárnicos, grasos y frutosos, un espectáculo!. Gran velada en maravillosa compañía, ricas viandas y nuestro estupendo criancita riojano.

Salud-os!!