Color limpio, brillante de lágrima escasa y tonalidad rojo picota de campa alta y reflejos violáceos. Intenso en nariz, golosos, atractivo con ciertas notas terciarias, cueros. Al comenzar a agitar la copa, predomina la presencia frutal negra madura, los toffe y ahumados. Todo bien combinado en un bouquet armónico. En boca es un vino de entrada suave, se muestra en su paso sabroso con un tanino redondo con cierto punto por pulir (hay que darle un poquito más de tiempo en botella), acidez correcta y se reproduce el bouquet fruta-ahumados bien combinados.

Todas las sensaciones son las mismas que las indicadas en las valoraciones anteriores.

En esta ocasión, parece ser que el vino se encuentra más tranquilo y con mucha "dignidad", muy fácil de beber, pero con un extraordinario caparazón, hecho para un vino que lo vale y lo especifica-

Estaba enamorado del Torre Muga y sigo todavia y lo que me queda, pero tengo que reconocer que este vino, aun siendo mucho más barato que el primero, tiene un desarrollo y una capacidad de estructura y categoria, que ya quisieran muchas bodegas, que vinos un poco más caro que este, estuviese cerca de su calidad.

Fnatástico y digno de beberse con tranquilidad.

Estamos ante un vinito al que le teníamos ganas, lo confieso. Muga es todo un clásico pero además, una selección especial, puede ser algo grande. Lo abrimos y dejamos que se oxigenara durante una hora y media aproximadamente. Aunque lo bajamos hasta los 16, al servir se quedó a 17°C para su valoración. Corcho fantástico, ligeramente tronco-cónico, muy compacto y tintado un par de mms desde su base.

VISUAL: De color rojo picota de capa muy alta, con el ribete en tonalidades rubí-amoratadas. Su lágrima es abundante, fina y ligeramente tintada (95).

OLFATIVA: Una auténtica delicia, con la fruta negra acompotada como protagonista, desprendiendo aromas de mermelada de arándano y ciruelas pasas. Agitamos y enseguida asoman especiados de pimienta blanca, clavo y vainilla. También hay tostados de la barrica y recuerdos de castañas asadas al carbón (las de Navidad). Con un puntito herbáceo de té negro intenso y apuntes de fenogreco. Finalmente toda una pátina terciaria, cuero viejo, tabaco habano, notas amaderadas de roble y duelas envinadas. Complejo, descriptores muy bien definidos y de intensidad alta, colosal (95).

GUSTATIVA: De esos vinos que nos hacen cerrar los ojos... Sensación muy agradable, con un ataque de menos a más, entra suave y de golpe rompe con una acidez pasmosa. En su paso por boca es intensamente frutoso, mermeladas de frambuesa y arándano negro, con una magnífica textura aterciopelada. Taninos de grandísima calidad, elegantes, espectacular cómo se han dulcificado. En retronasal encontramos aromas especiados de fenogreco, herbáceos de té negro y ese toquecito tostadito tan rico. Post-gusto aterciopelado, nos sorprende que, siendo carnoso, con un cuerpo brutal, alta extracción y elevado grado alcohólico, todo está perfectamente integrado y equilibrado, fruta, grado alcohólico y madera. Una auténtica obra de arte, exquisito, de nuevo nos hace entornar los ojos a cada sorbo, colosal... Post-gusto con notas terciarias aviejunadas (siendo tan solo un 2016), el cacao muy marcado, tabaco habano, caja de puros y por supuesto la madera como clara protagonista, con ebanistería fina y roble que le dotan de gran elegancia. Un vino que me tiene anonadado, magnífico. Habíamos leído muchos comentarios y muy buenos, y sí, suscribo que es un vinazo como la copa de un pino. Con unos taninos ave fénix espléndidos, magníficos, con mucha vida por delante sin duda. Su clímax llegará en unos 5 o 6 años calculo, pero aguantará décadas en estado mesetario, atributos los tiene todos. Gran trabajo en el campo y en la bodega que ha generado esta joyita, qué grande Muga!! (96).

La RCP pese a costarnos 28 euros la considero excelente, es una obra de arte, y sí vale ese precio, incluso más...

MARIDAJE: Abrimos la botella con un espectacular Cowboy steak de un kilo, con pimientos y patatitas al horno. El segundo día compartió mantel con nuestro delicioso surtido de queso curado, jamón y embutidos ibéricos. Nos lo terminamos con unos muslitos de pollo a la cerveza. Sin duda nos quedamos con el maridaje del primer día. La descomunal pieza de res requería de un vino con la personalidad de nuestro fabuloso Muga. Apuntes sanguíneos y cárnicos perfectamente acompañados por las notas frutosas y terciarias de nuestro increíble selección especial. Qué goce amigos, indescriptible ):

VIDEOCATA:  https://youtu.be/-T6U-XjrZjw

Salud-os!!

degustadas y disfrutadas. me siguen indicando que nos encontramos ante un vino más que sobresaliente, digno de estar mucho más arriba del escalón en el que se encuentra, es fálcil de beber, pero al mismo tiempo tiene una nariz bastante sobresaliente, pero al mismo tiempo tiene una boca extraordinaria, digna de un 9,5 o 9,6.

Todo lo indicado en la valoración anterior, sigue siendo válida para las extraordinarias dos botellas que he disfrutado durante estos últimos dias.

Lo recomiendo, no solo por la calidad, si no por el excelente orecio que tiene este vinazo, uno de los mejores, sobre todo en la extraordinaria RCP.

Sigue siendo un excelente vinazo, sobre todo teniendo en cuenta su muy buena/excelente RCP.

Todas las sensaciones indicadas en la valoración anterior, siguen siendo válidas para esta excelente botella, sigue con una nariz bastsante compleja y sobre todo notable y de muy buena calidad.

En boca es idem. de lo mismo, totalmente redondeado, los taninos suaves y amablesd, muy bueno el retronasal con muchos de los arómas de la muy buena nariz, el final es larguito y sobre todo tiene buena persistencia.

Me ha enamorado de verdad este vino.

Está excelente en este momento. Conciliando a la perfección fruta y torrefactos. En boca es sedoso y elegante. Tras Torre Muga , lo mejor de Muga (Aro , aparte, claro)

cata, realizada en el mes de Abril de este año, me ha hecho que me vuelva "casi loco". para localizar algunas botellas.

El vino una vez decantado, tiene unos arómas maravillosos ademas de diversos y con mucha elegancia, las frutas y los finos tostados, ademas de leve mineralidad, son muy notabilidad, tienen mucha calidad.

En boca es aún mejor, el paso totalmente equilibrado y redondeado, magnifico el retronasal y los arómas que se impregnan en toda la boca, los taninos vivos pero muy nobles, el retronasal, tal y como he dicho, tiene muchos de los arómas de la excelente nariz, el final es largo, largo y tiene una muy buena persistencia.

Menos mal que lo he vuelto a probar y he verificado que me encuentro ante un vino sobresaliente, ya en perfectas condiciones de consumo y disfrute. Volvere a adquirir unas cuantas de botellas, antes que "desaparezcan" en el representante de este vinazo para Badajoz.

La puntuación me ha salido entre 9,4 y 9,5, lo dejaré en la primera.

Rojo picota con ribete cardenal.
Lagrima media, medio teñida. Capa alta, no muy brillante.
A copa parada ya es bastante expresivo, con aromas a tabaco y tostados. Posteriormente se aprecia cuero, fruta en compota, nuez moscada: mas bien serio.
Poco a poco va apareciendo fruta negra en jalea, algún matiz licoroso.
En boca es potente, con cierta densidad, ataque intenso, paso amplio de astringencia algo marcada, buena acidez y final muy largo, con toques levemente amargos. Sabor a mora aun madurando, con retronasales balsamicos al irse aireando.

Deja entrever que es un vinazo que necesita más tiempo en la botella, en mi humilde opinión.
Pero esta era mi segunda y última botella y no sé si dentro de unos tres o cuatro años podré conseguir comprarlo.

Por lo pronto ya me lo he bebido, así que eso nadie me lo quita.

Complejidad, estructura, y sensación de precio justo.

Rojo picota con ribete cardenal.
Lagrima media, medio teñida. Capa media/alta, no muy brillante.
A copa parada ya es bastante expresivo, con aromas a tabaco y tostados. Posteriormente se aprecia cuero, fruta en compota, nuez moscada: mas bien serio.
Poco a poco va apareciendo fruta negra en jalea, algún matiz licoroso.
En boca es potente, con cierta densidad, ataque intenso, paso amplio de astringencia algo marcada, buena acidez y final muy largo, con toques levemente amargos. Sabor a mora aun madurando, con retronasales balsamicos al irse aireando.

Deja entrever que es un vinazo que necesita más tiempo en la botella, en mi humilde opinión.
Pero esta era mi segunda y última botella y no sé si dentro de unos tres o cuatro años podré conseguir comprarlo.

Por lo pronto ya me lo he bebido, así que eso nadie me lo quita.

Complejidad, estructura, y sensación de precio justo.

Destaca a la vista la capa alta y el color granate tan intenso de este vino. En nariz,  hay cantidad de notas terciarias, tabaco fresco, patchulí, vainillas...En boca me gustó su buena acidez, pero la fruta estaba completamente perdida en detrimento del aporte de la larga crianza que han dado a este vino...me resultó muy amaderado. Seguramente con un poco más de tiempo en botella estará más pulido y agradable.