La Rioja Alta 904 Gran Reserva 1997
La Rioja Alta 904 Gran Reserva 1997
FICHA TÉCNICA
D.O./Zona
Pais:
España
Tipo de Vino:
Tinto
Crianza:
Con crianza
Graduación (vol):
13,00%
Varietales:
Tempranillo 90%, Graciano 10%
Precio aproximado
Precio Aprox:
De 30 a 49,9 €
PUNTUACIÓN
Nota de cata NOTA MEDIA:
8.81
/
94
Nota de cata CALIDAD-PRECIO:
7,7
¿Buscas este vino?
Ahora puedes comprarlo en la tienda de la bodega
ELABORACIÓN
La Rioja Alta Gran Reserva 904 debe su nombre a un hecho concreto de la historia de esta bodega. Uno de los fundadores, D. Alfredo Ardanza, propone en 1904 a La Rioja Alta la fusión con su Bodega Ardanza. Para conmemorar esa importante decisión y coincidiendo con una de las mejores cosechas de Haro, se elabora el Reserva 1904 que, como el Reserva 1890, perdió posteriormente el 1 inicial. La añada 1997, a pesar de ser una añada complicada y poco afamada, entregó en este vino una enorme capacidad de envejecimiento que superó todas las expectativas. La Tempranillo es de las zonas de Briñas, Labastida y Villalba. La Graciano de sus fincas Melchorón I y II de Briones y Rodezno. Suelo: Arcilloso-calcáreo. Clima: Continental - atlántico. Vinificación: La fermentación alcohólica se desarrolló en 12 días, descubándose cinco días después. La fermentación maloláctica se desarrolló en depósitos de acero inoxidable en 35 días, de forma natural. Envejecimiento: En marzo de 1998, los vinos pasaron a barrica, siendo trasegados por el método tradicional de barrica a barrica durante 4 años, cada 6 meses. Embotellado: El vino se embotelló en abril de 2002. Con el fin de preservar al máximo los componentes organolépticos, este vino fue sometido a una filtración muy suave, por lo que puede producir sedimentos con la edad. 94 Puntos Parker. 94 Puntos Peñín.
OTROS VINOS CATADOS DE ESTA BODEGA
VER MÁS
Opiniones de La Rioja Alta 904 Gran Reserva
OPINIONES
31

Botella bordelesa típica de este vino, con el sello de la bodega en relieve en el vidrio.

Etiquetado clásico, cápsula de color rojo burdeos y corcho de gran calidad, muy buena longitud y anchura extraido con sacacorchos de láminas. 

El corcho está casi nuevo, bañado en vino granate-picota oscuro por el interior hasta 1 cm máximo por algunas zonas (por otras sólo un par de milímetros). Con casi 19 años embotellado, da la impresión de que podría haberse mantenido en perfectas condiciones otros 19 años más (o más).

Abierto 3 horas antes de tomarlo el día de Nochevieja de 2020. Sin decantación pero sí sirviendo un par de copas para que el vino se oxigene poco a poco en éstas y en la botella. Sin prisas (no las había).

Sacado de vinoteca a unos 14-15ºC pero atemperado a unos 18ºC (teníamos calefacción muy floja).

Servido en buenas copas burdeos de notable amplitud.

Visual

Picota oscuro-granate con reflejos rubí y pardos (ya más cerca del ribete), capa entre media y media-baja, ribete atejado-transparente, lágrima abundante, fina, densa y muy bonita que cae lentamente por el cáliz de la copa.

Packaging clásico de buena calidad, corcho excelente y el vino con gran aspecto con más de 23 años. (9,4)

Nariz

De inicio algo cerrado. 

A las 3 horas, de gran intensidad, con frutillos rojos y, en mayor medida, negros maduros, poderosos balsámico-mentolados, especias dulces, regaliz, vainilla, coco, laurel, tostados finos del roble, café torrefacto, chocolate negro, cacao, tabaco rubio, poderosos ahumados, notas levemente cárnicas y sanguinolentas así como un buen fondo de cuero y pieles animales.  Con más tiempo en copa aparecen toques de pan tostado, buena mineralidad y recuerdos de piel de cítricos maduros.

Es una pasada si se le da el tiempo necesario: complejidad, intensidad, equilibrio, integración, definición y variedad de aromas y, sobre todo, elegancia. (9,5)

Boca

Ya con el vino a 18-20ºC.

Ataque frutalmente maduro pero fresco a la vez, de buena acidez, seco, sabroso, de volumen medio-alto que se expande y lo hace amplio en boca, densidad media, cuerpo medio-alto y buena estructura.

El paso por boca es balsámico, equilibrado, especiado, integrado, elegante, con toques de regaliz, chocolate, herbáceos y un fondo de tostados y ahumados fantástico. Los taninos tienen todavía cierto nervio pero se notan ya bastante bien domados, pulidos y redondos (aunque tienen algunos años más de potencial evolución). 

El final es muy largo, con fruta roja y negra madura muy levemente amargosa, especiados, mentolados, ahumados, tostados en un alud de sensaciones maravillosas pero complicadas de describir, tanto en retrogusto como en retronasal.

Gran boca la de este vino a sus 23 años de vida. (9,6)

Su PVP, en su día, era relativamente asequible (unos 30-35€/botella). Incluso hubo ofertas que pudo conseguirse por 27-28€ cuando nadie se acordaba de estos vinos clásicos (época de hace unos 11-12 años cuando había predilección del mercado por los vinos concentrados, tánicos y poderosos). Sin embargo, en pasar del año 2014, los precios empezaron a subir, se metieron en los 40€ y luego ya en 50 y hasta 60€ la botella. En añadas como ésta (ya casi imposible de conseguir) y aunque no fue muy relevante en calidad, se ven precios que pueden oscilar entre 80-140€/botella. Es decir, se ha revalorizado mucho incluso en una añada no muy destacable como la de 1997.

Por el PVP al que lo conseguí (unos 30€), me parece de una excelente RCP sin paliativos (otra cuestión es pagar los precios que ahora se piden).

  • La Rioja Alta 904 Gran Reserva 1997, DO Ca Rioja

    La Rioja Alta 904 Gran Reserva 1997, DO Ca Rioja

  • La Rioja Alta 904 Gran Reserva 1997, DO Ca Rioja

    La Rioja Alta 904 Gran Reserva 1997, DO Ca Rioja

  • La Rioja Alta 904 Gran Reserva 1997, DO Ca Rioja

    La Rioja Alta 904 Gran Reserva 1997, DO Ca Rioja

Granate parduzco con reflejos rubí, capa media-baja y ribete teja. Limpio y brillante. Lágrima abundante, transparente y muy densa.
Nariz intensa, compleja, balsámica, mineral. Fruta muy madura, tabaco, laurel, chocolate negro, tostada, café, tocino, humo, regaliz y cuero, mucho cuero. Todo ello combinado sutílmente con gran elegancia.
Ataque potente y aterciopelado, con acidez todavía presente y los taninos muy maduros. Corpulento, largo y con la fruta asomándose al final.
Un gran vino.

NOTA DE CATA:

  • Vista: Limpio y brillante, de color picota y con ribete con tonos marrón/teja
  • Nariz: Media intensidad y con una constante evolución en la copa donde se aprecia una gran complejidad  de notas que abarcan recuerdos de vinos antiguos de Rioja y las notas ajerezadas producidas por su reposo en botella.
  • Boca: Sorprendentemente vivo, muy maduro, sabroso, con amable estructura y cuerpo, equilibrado en todas sus sensaciones, rico, de taninos muy pulidos, moderada acidez y final medio.  

En resumen, Un vino que el tiempo ha modelado para darle una gran personalidad y una delicadeza en su paso de boca que solo puede encontrarse en vinos de añadas relativamente antiguas. El tiempo no ha vencido al vino, se ha aliado con él para darle sutileza, para domar su arrogancia primitiva y darle otros valores más delicados.

  • Color en la copa

    Color en la copa

Última botella de este vino que tenía, una pena...
Color teja, ribete anaranjado, capa baja. Lágrima que cae muy lenta.
En nariz se abre pronto. Mucha fruta roja y negra, muy bien integrada con la madera. Cacao, café, algo de vainilla y tostados... La esencia de La Rioja clásica.
En boca muy bueno. Tanino muy limado, acidez importante, incluso para aguantar algunos años más. Muy bueno. Post gusto largo y agradable, para seguir bebiendo...

     De fidelidad a toda prueba, este clásico entre los clásicos se reconoce sin vacilar por su aspecto grave y sombrío, a pesar del tiempo que pasa. Huele como de costumbre - una mezcla armoniosa de aromas de frutas rojas y de maderas especiadas a las cuales se aúnan, en el modo menor, notas levemente achocolatadas y vagamente ahumadas. En boca, es señorial, de elegancia imponente, hermosamente perfilado, de una belleza innegable : durante un par de horas, va ganando en complejidad, profundidad, sedosidad y rectitud a medida que se airea en las copas pero sin perder un ápice de finura y de amabilidad palatal. Recuerda a las moras agridulces mezcladas a los arándanos, al lápiz mordisqueado, a los posos de café, a " ¿ Qué sé yo ? " diría Montaigne.

Sería vano tratar de observar bajo lupa este vino y analizar todas sus características a más no poder, corriendo el riesgo de aburrir : no desvelemos enteramente su misterio y la cata no es una lección de anatomía. Más vale decir con aire entre satisfecho y malicioso, dando el último trago : - ¡ Si supierais ! ( PVP : 23,40 € )

Rojo teja de capa baja y ribete anaranjado.

Nariz intensa, otoñal, maderas envinadas, especiados, toques ahumados, trufa y desván.

Entrada fresca, fabulosa acidez, cierta grasa y cuerpo. Con nervio, tanino mas que sedoso. Con un toque salino que lo hace completisimo en boca. Elegante, con puntitas de fruta muy madura en esta fase, tipo goji. Muy largo.

Rojo rubí, ribete rojizo, capa media.
De media intensidad en nariz predominando los toques especiados y las frutas licorosas, con trazas de madera vieja, vainillas, piel curtida y café en grano. Con más aire aparecen humedades y notas de sotobosque. No muy expresivo pero sí complejo, con encanto clásico.
En boca se muestra austero y mineral, con buena acidez y de paso ligero, más delicado, sutil, dejando en el final recuerdos de frutas en licor y especias con una persistencia media. Tanino perfectamente integrado.
Hace un par de años realizamos una fantástica vertical de este vino y lo cierto es que el 97 fue el más flojo de la cata aun mostrando buen nivel, no fue un gran año en Rioja y con el paso del tiempo lo va notando, aunque no pierde la clase que siempre atesora. En una línea más delicada y sutil.

Color granate, con borde atejado. Capa media.
Buena intensidad en nariz, fruta roja licorosa, con predominio de vainillas, cacaos, etc.
En boca muy buena acidez aún, buen cuerpo, taninos sutiles.
Rioja clásico aún en buen estado, a pesar de no ser una añada destacable.

Abrir este vino se convierte en un ritual para mi y creo que se lo merece porque adquiere en la mesa todo el protagonismo.
Tras un par de horas de oxigenación sin decantación procedemos a catarlo.
Rubí brillante y limpio con borde teja. La nariz es intensa con recuerdos a sotobosque, hojarasca y proteina en su inicio. Evoluciona tras su decantación hacia notas ahumadas, fruta fresca, cerezas, algún recuerdo a flor marchita, arcilla húmeda y algún especiado. En boca es de frescura amplia, tanino maduro, crujiente y vivo, elegante y delicado. Muy agradable. Retronasal intenso, complejo y acorde con la fase olfativa. Final amplio y largo con frescura y mucha fruta.
Lo veo con vida por delante y sin cansancio.

Quizá el más controvertido de la cata.

Color rojo rubí claro con ribete teja y capa media.

Comenzó muy cerrado, con tonos de humedades que hicieron pensar a más de uno en un “corchazo”. Al final, con un poco de aireación y paciencia, se fue su timidez y dejó ver la fruta negra madura (mora, ciruela) junto a tonos de monte umbrío, hojarasca, especiados, café.

En boca tiene esa acidez tan característica de la marca, aunque no tan pronunciada como otras añadas paro aún con nervio, sedoso, toque de roble cremoso, cacao, con buen final.

Fue el menos bueno de la cata, ¿influencia de la añada? ¿fue nuestra botella? Por otras catas recientes, parece más esto último.

Cookies en verema.com

Utilizamos cookies propias y de terceros con finalidades analíticas y para mostrarte publicidad relacionada con tus preferencias a partir de tus hábitos de navegación y tu perfil. Puedes configurar o rechazar las cookies haciendo click en “Configuración de cookies”. También puedes aceptar todas las cookies pulsando el botón “Aceptar”. Para más información puedes visitar nuestra Ver política de cookies.

Aceptar