La Bota de manzanilla “Navazos” Nº 16
La Bota de manzanilla “Navazos” Nº 16
FICHA TÉCNICA
D.O./Zona
Pais:
España
Tipo de Vino:
Dulces y Generosos
Graduación (vol):
15,00%
Varietales:
100% Palomino Fino, mostos procedentes de las fincas Viña Soledad y Las Cañas, situadas en el Pago Balbaína.
Precio aproximado
Precio Aprox:
De 10 a 19,9 €
PUNTUACIÓN
Nota de cata NOTA MEDIA:
9.22
/
96
Nota de cata CALIDAD-PRECIO:
9,7
ELABORACIÓN
Criada a lo largo de una docena de escalas, con una edad media en torno a los 6 años. Saca de enero de 2009. De Sánchez Ayala
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OPINIONES
22

Profunda, intensa, larga, larga, larga. A copa vacía, al día siguiente, sigue oliendo el amargor de las almendras, aceitunas, tomillo y el mar, el mar, el mar.

Nariz limpísima de flores, mar y finos herbáceos, así como almendra amarga.
En boca es brutal, punzante, seca y con más volumen que otras manzanillas degustadas.
¿Alguien se ha fijado alguna vez en la conexión Jerez-Sanlúcar/Rías Baixas/Highlands?

Este vino sigue muy bien, aunque ya tiene ligeros toques de "manzanilla pasada", que le dan cierte aire elegante y más punzante y personal.
Sigue con buenas sensaciones en nariz y en boca, pero ha perdido parte de la gran frescura que tenía.
Me beberé las tres que me quedan lo mása rápido posible.

Amarillo dorado bastante limpio de color.

Nariz frutos secos flor blanca con ligeros toques minerales, y salados con un repunte de coccion de marisco.

Su entrada en boca es intensa y fresca, dando punzadas saladas y florales, sin duda una bomba ya que es raro el dia que no la pido cuando voy a un restaurante creo que como los champagnes...esta manzanilla tambien enamora.

Color dorado brillante. Presenta una nariz de buena intensidad, con excelente definición y mucho volumen, expresiva, con un toque punzante, alguna sensación salina, recuerdos a aceitunas picadas, algo de almendras crudas, un ligero toque de barniz y un fondo de flor amarilla. En boca entra bien, con algún recuerdo a regaliz, denso, goloso, con una mezcla de sensaciones dulces y saldas, muy buena acidez, bastante amargo y muy largo. Ríquisimo... y muy complejo.

No suelo colgar notas de cata porque, como siempre digo, en esta comunidad hay verdaderos maestros en ello.

En este caso me he decidido porque hacia tiempo que no me transportaba tanto con un vino.

A la vista se presenta un precioso dorado subido, brillante, con destellos. Sol embotellado.

La nariz te lleva de paseo por la costa, a media tarde, sin prisas, y a cada paso un rincón aromático nuevo, almendras, sal, yodo, Cádiz.

En boca es exuberante, larga, sabrosa, fresca, limpia, es la novia que todos queríamos, para pasear de la mano y decirle cositas al oído, nada de una aventura puntual de aquí te pillo aquí te mato. Para presentarla en casa, a los padres…mama, me caso.

Color dorado óxido.
Nariz de buena intensidad con aromas salinos, de flores ajadas y bajomonte seco, aromas de puerto, de madera de barco, almendras crudas y un punto de flores blancas.
En boca es finísima, llega a enamorar hasta a los que no gustan los generosos. Es de una complejidad y elegancia tal que te hace prestarle atención solo a la copa. Acidez exquisitamente balanceada con la salinidad y los aromas de frutos secos y maderas, de yodo que llega por retronasal.

Un verdadera maravilla que compartí en la cena de sobaquillo del 8º Encuentro, me gustó tanto que anoche abrí una botella más. Quedan unas cuantas, pero estaría bien hacerse con unas cuantas botellas porque es una verdadera joya enológica.

Unos 10 meses después de la saca, este vino continúa por su habitual senda de evolución en botella. La dosis extra de oxidación le otorga una complejidad en nariz potenciando su carácter mineral y salino.

En la boca se muestra más profundo y sabroso, quizá ha perdido algo de frescura y fuerza punzante pero ha ganado en prestancia y elegancia. La experiencia de otras sacas indica que desde ahora y por lo menos hasta un año más, es cuando esta soberbia manzanilla alcanza su cenit de consumo.

Esta manzanilla Navazos, antes conocida como Las Cañas es sin duda una de las cumbres de este tipo de vinos y constituye una de las sacas más brillantes, en mi opinión junto con la Nº 4. Ahora se encuentra en un momento perfecto de consumo. Y aguanta lo que sea en la mesa. Una joya.

El color es dorado claro brillante.
Aroma intenso y punzante, sobresalen almendras, flores, yodo, sal marina, toques de frutos secos, la nariz bastante compleja y potente.
En boca es potente y sabroso, paso de boca con mucha complejidad y con salinidad, recuerdos de frutos secos y flores, muy fresco y con un final casi interminable por la gran persistencia.
Otra joya del equipo Navazos.

Rica y sabrosa esta primera botella, intensa, marina, larga, algo más tranquila en la boca. Encaja bien en su mediana potencia. Habrá que guardar algo en la recámara porque apunta a desarrollos mayores y no hay que perdérselo. Gracias de nuevo.

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