Hoy catamos este Viña Ardanza reserva del 2004 que esperábamos con ansia. Las guías lo han tratado muy bien. Lo abrimos 90 minutos antes de la cata y lo servimos a 18°C. El tapón en perfecto estado y muy largo.
VISUAL: Viste de rojo picota de capa alta con el ribete burdeos. De lágrima muy fina, abundante y transparente. Intenso y bonito color.
OLFATIVA: A copa parada sobresale claramente la fruta roja muy madura, de alta intensidad, con notas ahumadas y algunos mentolados de eucalipto. Al agitar se presentan los matices de la madera, mucho roble, aportando terciarios de cacao y tabaco, caja de puros, con un sugerente toque mineral pizarroso. Una nariz muy bien armonizada y de buena intensidad, me gusta.
GUSTATIVA: En boca es opulento, carnoso, de acidez media y con unos taninos bastante dulcificados. En retronasal surgen notas de chocolate, de mermelada de ciruelas y un cierto carácter especiado, algo de vainilla y un toque de pimienta rosa. El retrogusto es 'amaderado", con finas notas tostadas pero con la inmutable presencia de la fruta. De persistencia alta, más de dos minutos. En muy buen estado de forma, con vida por delante, no se si hasta el 2040, pero en un excelente momento para su consumo ahora mismo. Me ha parecido un muy buen vino, sin duda mejor que otros Ardanzas probados hasta la fecha. Creo sinceramente que han acertado con los cambios. Enhorabuena !!
La RCP es muy buena, sobre los 18 euros tenemos un vino sobresaliente.
Maridado con un fabuloso Cabrito salteado al ajillo con anacardos y mostaza a la antigua. Nos pusimos "tibios", je,je...
El Ardanza...
Color cereza, brillante y de capa media.
En nariz fruta negra y toques especiados.
En boca muy agradable, buena acidez, persistente.
Vino con muy buena relación calidad precio. Creo que en un buen momento de consumo. Me quedan unas botellas para ir siguiendo su evolución.
Color cereza picota, limpio, y muy brillante. Capa media.
La nariz es especiada, con ligeros toques de vainilla y chocolate, sobre un fondo de fruta negra madura.
Un vino estructurado, equilibrado, vivo, elegante que invita a beber una y otra vez.
Largo retrogusto.
Color rojo cereza con ribete anaranjado, limpio y brillante.
Nariz de mediana intensidad, elegante, con predominio de suaves notas de crianza pero también con presencia de fruta roja, especias dulces, notas de sotobosque y algo de tabaco.
En boca persiste su finura y elegancia, con un paso suave de taninos maduros, un cuerpo medio, con buena frescura y con predominio también de las notas de crianza. Su final es prolongado y agradable.
Siempre se agradece probar este tipo de vinos alejados de los excesos tánicos o corpóreos, demostrando la gran amplitud de estilos que se engloban dentro de este gran mundo que es el del vino.
Cereza de capa media y ribete apuntando ya a atejado.
Muestra una nariz de mediana intensidad, en la que van apareciendo aromas a cuero, fruta roja, almazara, pimienta negra, vainilla, tostados y tierra húmeda.
En boca es un vino de cuerpo medio, muy amable, redondo, con una excelente acidez riojana, que le aporta algo de frescura, y con taninos ya bastante pulidos. El postgusto es largo, formado por notas especiadas y de fruta roja.
Borde evolucionado, anaranjado, capa media, con una lágrima gruesa y densa.
En nariz es de intesidad alta, frutos rojos maduros, dulces, en licor, incluso algun toque floral, al mover, aromas frescos, bosque, tierra, tabaco, ceniza, toques dulzones, caña de azúcar.
En boca, es muy equilibrado, con una entrada sedosa y buen cuerpo, pero no especialmente voluptuoso, algo envolvente, buena acidez, postgusto largo.
Yo no lo veo tan clasico, la fruta está presente tanto en nariz, como en boca.
Rojo terroso, capa media-alta. Limpio y brillante.
Completa paleta aromática desde que lo hemos abierto. Frutas rojas, higos, tonos licorosos, canela, chocolate negro, leves balsámicos, madera húmeda, un apunte terciario y piedras.
Boca carnosa (aquí se nota la garnacha) y hecha, con una gran acidez y un tratamiento del alcohol y la madera muy clásico. Tanino pulido. Paso sutil y complejo que nos deja sensaciones a fruta, campo, especias, tostados, bosque, cueros, tabaco y mineralidad. Retrogusto dulce.
Final largo y amplio.
Desde el primer sorbo a este Viña Ardanza le delata su lugar de procedencia. Sin ser un vino aún especialmente elegante, creo que evolucionará en botella y mucho. Tiene identidad y pegada.
Capa media- alta, buen brillo, granatoso y de aspecto impecable.
Las notas de la madera se expresan con mucha profusión, torrefactos, vainillas, coco, especias dulces enmascarando de una manera clara su peso frutal. A pesar de todo ello, también entra en juego la fruta roja en sazón, y confitura de ciruela.
Muestra cierta golosidad en su paso por boca, carnoso, aunque también es destacable su amplitud y volumen aunque esos dejes de madera persisten tapando una vez más el aspecto de la fruta.
No pierde nunca el porte de la elegancia
Cereza con borde ligeramente teja, espejo limpio, capa media , con lagrima muy ancha que no tinta la copa.
Nariz media con frutas rojas y negras sobre fondo especiado.
Paso por boca con cuerpo medio, muy buena acidez , redondo, fácil de beber , muy agradable y con sabor medio alto y Postgusto medio
Color rubí, capa media y ribete virando a teja.
Nariz bastante clásica, aparece fruta roja en licor, especias dulces, tabaco, fósforo, tostados, notas de bollería y terrosas. Muy agradable.
EN boca tiene un ataque medio, paso amable y bastante ligero, tanino maduro, buena acidez, final largo ligeramente amargo con recuerdos especiados y balsámicos. Muy elegante.
Utilizamos cookies propias y de terceros con finalidades analíticas y para mostrarte publicidad relacionada con tus preferencias a partir de tus hábitos de navegación y tu perfil. Puedes configurar o rechazar las cookies haciendo click en “Configuración de cookies”. También puedes aceptar todas las cookies pulsando el botón “Aceptar”. Para más información puedes visitar nuestra Ver política de cookies.