De color amarillo dorado, vivo, brillante, reflejos anaranjados, con cierta sensación de grosor, lágrimas gruesas.

Nariz de enorme personalidad y marcada factura de la bodega. Rebosa vida y nervio, con apuntes de fruta escarchada, orejones, confitura de naranja amarga, cítricos dulces (pomelo, citronela-lemongrass) y un componente cremoso a carne de membrillo, miel, acacia. Poco a poco se abre y van apareciendo recuerdos a ceras, vaina de vainilla y un toque de hidrocarburos y ahumados de fondo.

En boca es grueso, macizo, íntegro, sin asomos de cansancio. Sobresale una marcada acidez que lo amplifica trayendo la fruta madura y finos especiados. Sabroso, redondo, maduro y aún por hacerse. Permanece en boca de forma indefinidad con esos amargosos elegantes.

Un blanco complejo y sin complejos, expresivo, lleno, en un momento de consumo excepcional. Aún tiene que ir domándose y ganando enteros en los próximos años.

Más información del vino: http://vinosclasicos.blogspot.com.es/2013/05/vina-tondonia-1968-blanco-gran-reserva.html

Se presenta con un hermoso color amarillo muy vivo y brillante.
El aroma es extraordinario, champiñones, un poco de cuadra y heno, espárragos, cueros, madera vieja pero muy fina y elegante, fruta escarchada. Desde luego lo típico de la casa.

La boca está muy suave, vuelve a distinguirse la familia como siempre sucede en estos casos. Sin embargo lo cierto es que resultó un poco falto de acidez, y por lo tanto algo plano, hizo esfuerzos para recuperarse y hasta en ciertos momentos parecía que lo lograba, pero sin embargo no lo consiguió del todo, pero estamos hablando de un vino de 41 años, con lo cual no nos queda sino saludar sacándonos el sombrero.

Dorado intenso ligeramente evolucionado.
En nariz se muestra intenso, fragante y muy vivo. De carácter muy cítrico (cáscara de naranja), con unos curiosos toques de aceitunas, ligeros minerales y los habituales recuerdos de miel, fruta escarchada y esos elegantes terciarios que son marca de la casa y resultan inconfundibles. Complejo, vivo y elegante.
En boca se muestra redondo y ofrece una fuerza y una vivacidad sorprendente. Tiene una excelente acidez y una gran frescura. Final largo y persistente con recuerdos de frutos secos.
Sorprendente esta añada por su tremenda fuerza y expresividad en nariz y por su acidez y frescura en boca. Se encuentra en un inmejorable momento de consumo y con posibilidad de seguir evolucionando. Sorprendente.