Color dorado brillante, recuerda a la cerveza, y podria decirse capa media dado el elevado tono ambarino. Lágrima rápida y transparente.
En nariz necesita mínimo una hora decantado para desplegar su abanico aromático... frutos secos, orejones, ceniza, pétalos marchítos, algo de mandarina, pomelo, y membrillo.
Entrada en boca muy ácida, deja los laterales y punta de la lengua obstruidos durante cierto tiempo, pero resulta ser agradable, dejando un sabor desconocido por mi en vino blanco.
Retro largo y espeso, con un deje amargo pronunciado a piel de naranja muy, muy elegante y durardero.
En resumen, muchísima clase tanto en nariz como en boca, podria vivir mucho tiempo en botella en el mismo estado actual, gran vino de guarda!
!Gracias LDH!

Very brilliant gold. Very elegant nose, big but subtle: withered flowers, very fine wood, vanilla, honey and dried apricots. The mouth shows a balance of everything: it is fleshy, replete, with a big structure, perfectly integrated acidity, elegant, with a simply perfect bitter finish.

Sin ser decantado no tarda en mostrarse complejo y pletórico de sensaciones, miel, orejones, tonos especiados, corteza de limón y suaves tostados para una boca memorable, con entidad y requilibrio. Acidez marcada y notable persistencia. La temperatura de servicio -casi la de un tinto joven- sobre los 13/14º y una leve oxigenación son recomendables.

Decantado durante 2 horas. Nariz de buena intensidad, franca y compleja, predominado: miel, pera, melón muy maduro, manzana, anís estrellado, especias, tostados... La boca no está a la altura de su excelente nariz y, a pesar de tener una buena estructura, resulta algo amargo y con una acidez un poco desequilibrada que no termina de integrarse.

Amarillo dorado de aspecto límpido y brillante. En nariz presenta aromas de flores secas, hinojo y notas dulzonas de albaricoque y melocotón sobremadurado, en copa va ganando en complejidad y aparecen frutos secos. En boca va de menos a más, tiene una entrada fácil seguida de una explosión de sensaciones, es todo un bebe, se presenta con gran acidez, estructura y enorme persistencia repitiendo notas florales y de hinojo. Da la sensación de q esta algo salvaje todavía. Habrá q dar unos añitos a este blanco del 81para ser todavía mejor si cabe. Sin duda, el mejor blanco de España (no generoso) q he catado hasta el momento, sobre todo en nariz.

Amarillo limón maduro tirando ligeramente anaranjado aún muy brillante. Aromas de buena intesidad fino y complejo, de avellana (al estilo del Punt Gastronòmic) y nuez, miel, azucar quemado y un toque mineral, tonos ligeramente amontillados... Cuerpo medio, estructura y buen equilibrio, algo glicérico, con potente acidez y gran frescura, incluso cítrico pero con final complejo aunque débil (casi anulado por la acidez) con notas similares a la nariz, de magnífica persistencia, largo y ligeramente amargo (más bien rancio). Desde luego está vivísimo... Vino interesante, complejo y fino.

De bonito color oro con mucho brillo y densa lágrima, con aromas a pulpa de melón maduro que va dejando paso a maderas, chocolate blanco y uva muy madura, mosto. En boca de entrada aparece piña con destellos amargos que finalizan en dulces. Me recuerda el final al vino de Montilla.

Rezuma por el lacre.
Amarillo oro glicérico y brillante. Nariz intensa con melón maduro, chocolate, tostados y madera. Potente en boca pero muy ácido, me recuerda a un vino amontillado, no me gusta. Tras leer el comentario del resto, es probable que el corcho a pesar de tener muy buena pinta, nos haya jugado una mala pasada. Habrá que beberse otra y comprobar los resultados.

Decantado una hora antes. Color cerveza pilsen. Brillantísimo y muy glicérico. A15º presenta sólo discretos aromas anisados. Al oxigenarse y tomar la temperatura a la que lo he bebido (18º) aparecen notas de membrillo, algarrobo, pastelería y un toque mineral por debajo de los anisados. El aroma es muy agradable pero de mediana intensidad. En boca es muy seco, áspero y ligeramente untuoso. Presenta finas notas de madera y sensaciones cítricas, aunque poca fruta. La estructura es tremenda, con una gran acidez. La sensación en boca es de gran presencia y elegancia. Final agradablemente amargo, con delicados tostados. Muy persistente. Buen vino, se bebe con sumo placer. Posiblemente no sea su vocación, pero encuentro a faltar algo de fruta para acabar de redondear esa magnífica estructura. Un vino profundo, que posiblemente sea un jovenzuelo, aunque no puedo valorarlo por lo que ha vivido ni por lo que promete, sinó por lo que había en esa botella. Hemos disfrutado con él pero esperabamos algo más.

Dorado muy brillante. Nariz elegantísima, con fuerza pero sutil: hay flores marchitas, maderas muy finas, vainilla, miel y orejones de albaricoque. En boca la balanza está equilibrada en todos los parámetros evaluables: es carnoso, pletórico, con una estructura poderosa, acidez perfectamente integrada, elegante, con un amargor final sencillamente perfecto.