Vino presentado en una impresionante botella bordelesa más grande y gruesa de lo habitual, con cápsula y corcho de muy buena calidad.
Etiqueta clásica y elegante, contraetiqueta con información completa de varietal, vinificación y pronóstico de conservación.
Color rojo con tonos marrones, menisco teja.
Nariz de tinta china y algún ahumado, que cambia muy poco con la aireación.
En boca esta delgadísimo, sin cuerpo ni recorrido.
La bodega hace una previsión de conservación en buenas condiciones de 20 años. Esta botella en concreto llevaba al menos 5 años en mi armario bodega y ya hace mucho tiempo que pasó su mejor momento.
No puntúo.

Color rubí oscuro con ribete ocre atejado. Lágrima delgada y rápida.
Aromas de buena intensidad a fruta negra madura encabezados con mucha vainilla. Intenso y elegante.
En boca muestra unos taninos perfectamente integrados y una redondez encomiable. Bastante complejo con fruta madura, toques especiados y fondo ligeramente balsámico. En retronasal vuelve la fruta (arándanos) y el tostado de la madera.
Un muy buen vino que está en un gran momento con una gran integración de madera y fruta. mezcla de clásico y moderno.