Picota oscuro. Media capa. Lágrima abundante. Aroma de buena intensidad, mucho menos frutal que anteriores añadas, aunque la fruta roja, muy sazonada, está presente de fondo, excesivamente cubierta por aromas terciarios (demasiado evidentes, a pesar de su corto paso por barrica) y sus notas licorosas (quizás una punta algo excesiva de alcohol): especias, tabaco y ligero toque e cuero. En boca, nuevamente la fruta aparece algo oculta, en relación a otras añadas anteriores con mucha mayor extracción. Taninos firmes. Fluido. Ligeramente alcohólico, pese a que presenta una buena acidez. Buena longitud y recuerdos terciarios en retronasal.
Quizás la añada que menos me ha gustado de este vino. Un vino que antes recomendaba con cierta profusión y que esta añada ha llegado a decepcionarme un poco. Quizás ha sido esta botella... le daremos otra oportunidad.

La buena intensidad aromática, me parece casi mejor que el 2005, se agradece en este vino con notas muy finas de fruta negra en compota, especias y bollería. Toques de tabaco y minerales. Bastante carnoso, recorrido aceptable, sensaciones frescas, acidez adecuada, zarzamoras, maderas...