Marques de Murrieta reserva 1960
Marques de Murrieta reserva 1960
FICHA TÉCNICA
D.O./Zona
Pais:
España
Tipo de Vino:
Tinto
Crianza:
Con crianza
Graduación (vol):
13,00%
Varietales:
60% tempranillo, 30% garnacha, 10% mazuelo y otras
Precio aproximado
Precio Aprox:
Más de 100 €
PUNTUACIÓN
Nota de cata NOTA MEDIA:
9.66
/
98
Nota de cata CALIDAD-PRECIO:
10,0
ELABORACIÓN
Vendimia manual y segunda selección de uva en mesa a su llegada a la bodega. Despalillado y prensado con la máxima celeridad. Permanece entre 12 y 18 meses en grandes tinos de madera de la época fundacional y, una pequeña parte, en depósitos de cemento vidriado, dónde completa la fermentación maloláctica y se estabiliza. El vino madura en barricas usadas de roble americano de 225 litros entre 200 y 210 meses, casi 18 años. Sometido a diversas trasiegas periódicas durante este tiempo. La edad media de las barricas es de 30 años, llegando incluso a 45 en algunos casos. Filtrado con membrana antes de ser embotellado directamente de la barrica según demanda. Comercializado a finales de la década de los 70.
MARIDAJE
Carnes rojas a la parrilla, jamón de bellota, quesos de oveja semi curados, pescados al horno, bacalao, estofados de carne de caza y legumbres.
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OPINIONES
3

Hoy vamos con una auténtica joya viejuna riojana. Ojo con este dato: "Permanece entre 12 y 18 meses en grandes tinos de madera de la época fundacional... El vino madura en barricas usadas de roble americano de 225 litros entre 200 y 210 meses, casi 18 años". Una auténtica barbaridad, impensable e inexistente crianza a día de hoy, así que a disfrutarlo. Botella accidentada, salió de España perfecta tras cuatro años en mi bodeguita, pero al llegar a Ecuador vimos que el tapón había caído al líquido (imagino que por los cambios de presión y demás) y que por ello había perdido algo de nivel, por lo que decantamos, sacamos el tapón y volvimos a introducir el vino en la botella. Curioso que en la etiqueta frontal aparece como reserva y en la contraetiqueta como gran reserva (que es lo que es y mucho más). Abrimos la botella y la dejamos respirar por espacio de dos horas y media antes de proceder con su valoración a 17°C.

VISUAL: Impactante color rojo casi negruzco, 63 años, de capa alta no... lo siguiente. Ribete muy estrecho con tonalidades atejadas y de lágrima escasa, densa, gruesa y transparente. Colorazo!! (98).

OLFATIVA: Menuda pegada, con notas de uva pasificada, fúngicos de trufa negra e intensos tostados y ahumados. Y ojo, de intensidad alta, con 63 años y dos horas y media abierto. Ahora se perciben aromas de compota de ciruela negra junto con unos especiados potentes de clavo, fenogreco y pimienta negra. También asoman herbáceos de té negro y de infusiones, aderezado con fragancias más viejunas, a betún, alcanfor, polvorilla, desván, armario cerrado... Agitamos de nuevo y nos vienen apuntes más clasicotes, de cuero curtido y chocolate negro, mientras que de la madera apreciamos los matices tostados procedentes de esas increíble y longeva crianza en barrica. Por último percibimos un puntito de avellanas tostadas y de endrinas en licor... Horas estaríamos hablando de su nariz, es un no parar. Fantástico, algo increíble de verdad (98).

GUSTATIVA: Amigos... ¡¡qué barbaridad, qué cuerpazo que tiene!!. Acidez momentánea impactante, dulcificándose de inmediato con un tanino amoroso y pétreo a la vez. Elegante y equilibrado, con un paso por boca acompotado, transmitiendo notas fúngicas de níscalo y con ese tacto maravilloso y aterciopelado. Está en ese estado mesetario que amamos, tras 18 años de crianza, adquiriendo ese nivel imperturbable y majestuoso. Ahora encontramos sensaciones cafetosas, cacao en polvo, caja de puros, una auténtica delicia... vamos a disfrutarlo de lo lindo. Inolvidable botella, es una armonía tremenda entre la fruta y la madera, matices acompotados y tostados, el roble y ese puntito pasificado... maravilloso. Como leemos en Vinosclasicos y en boca del maestro Helios (Limonero), estos reserva de los 50´s - 60´s nada tienen que envidiar a los afamados Murrietas Castillo de Ygay, superándolos en tiempo de crianza y en calidad algunas veces. Una auténtica joya, persistiendo en boca más de 4 minutos. Intenso, carnoso, sabrosote, licoroso, con la fruta y la madera perfectamente ensambladas. Casi perfecto, inolvidable y muy auténtico, para alucinar (99).

La RCP pese a costarnos 82 euros en 2019, me parece excelente. Esas crianzas de casi 20 años no pueden costar menos...

MARIDAJE: Lo inauguramos con un espectacular jamón de bellota 5 J´s y un poco de queso de oveja curado al romero. Otro día lo acompañamos de unas tostas de embutidos ibéricos, y nos lo terminamos con unas deliciosas lentejas con costilla. Maravillosas experiencias, destacando el maridaje con el colosal jamón de bellota, para el recuerdo.

VIDEOCATA:  https://youtu.be/uS0su-70KZk

Salud-os!!

Mantiene un intenso color granatoso de capa media-alta, oscuro, cerrado. Para no creerse que estamos ante un vino del 60. Qué color!! Parco en reflejos, mate, opaco, sin un solo precipitado en la base de la botella. Borde estrecho, anaranjado, contrastado respecto al menisco. Marcada sensación de grosor. Mucha lágrima, permanente.

Recuerda hasta la confusión el reserva de 1954, quizás algo más cerrado inicialmente, aunque mantiene las mismas credenciales murrietanas: expresión, claridad, orden, finura. Va de menos a más, a muchísimo más, partiendo de una impecable sobriedad inicial que le permite ir desplegándose con la mayor sutileza imaginable. Las primeras sensaciones son de fruta roja escarchada, guindas, integradas a una vaporosa envoltura de cedro y maderas finas que irán quedando soterradas al ganar en mayor expresión aromática. Elegante, maduro y lleno, bordeando el confite, repleto de sensaciones de calidad: tabaco Virginia, fúngicos, ahumados, sotobosque, especias molidas, clavo... Nivelón!!

En boca es limpio, fresco, sedoso al tiempo que concentrado y complejo. Brilla a un nivel altísimo con un empaque de acidez que lo integra todo. Compacto, elegante, dotado de taninos esponjosos. Decir que es clásico no le hace justicia. Tiene ese añorado estilo de Murrieta que buscamos en cada botella. Reducir la fama de Murrieta a los míticos Castillo de Ygay es no hacer justicia a estos grandísimo reserva que poco o nada tienen que envidiar a sus hermanos mayores.

Más información del vino: http://vinosclasicos.blogspot.com.es/2015/09/marques-de-murrieta-1960-reserva.html

Marqués de Murrieta Reserva de 1960 (aunque la contraetiqueta reflejaba Gran Reserva), nos esperaba con casi 4 horas de descorche. En las copas balón presentó color rojo cobrizo evolucionando hacia el exterior de la copa a naranjas en un estupendo abanico de matices que se difuminan en los límites entre los mismos. En nariz aromas a guindas, a tostados de la madera, ahumados y atisbos a fruta roja. En boca de nuevo los tostados de la madera, ligeras guindas, muy largo, sabroso, buenos taninos muy elegantes, posee aún buena acidez, en resumen un VINAZO, una gozada con 48 años de historia.

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