En mi post anterior di a entender erróneamente que nuestra primera visita al XIII Salón de los Mejores Vinos de España había terminado tras catar los vinos de Marqués de Murrieta y me temo que no fue así.

Tras ese memorable momento recalamos por una de las bodegas que mayor descubrimiento nos ha supuesto a lo largo del 2012, la D.O. Riberio llevada a lo más alto de la mano de

Coto de Gomáriz

De los vinos que ofrecían probamos

• The Flower and the Bee B. Treixadura 2011
• Colleita Seleccionada B. 2010
• VX Cuvée Caco 2007

Quedando nuevamente maravillados por la delicia blanca del Colleita Seleccionada en este caso en la añada 2010, la sedosidad e imponente cuerpo del tinto VX Cuvée Caco (ambos extremos confirmados por una exigente compañera de cata que lo probaba por primera vez) y disfrutando de la desenvoltura y desfachatez frutal y floral de The Flower and the Bee.

De aquí pasamos a una mesa interesantísima y casi adyacente:

Clos del Portal

Una de las bodegas más punteras del Priorato actualmente, y que Guía Peñín confirma con la puntuación de tres de sus vinos. Además, traían la versión magnum de tres de ellos que fueron los que probamos:

• Tros de Clos Magnum 2009: Fresco y con una ligera y sutil mineralidad.
• Negre de Negre Magnum 2009: Potente, con gran cuerpo y mucha fruta negra
• Somni Magnum 2009: Más complejo en mi opinión que los otros dos

Otro de las mesas imprescindibles y a la que no quisimos renunciar a visitar en ése primer día era la de

Bodegas Roda

Esta gran bodega riojana es un excelente ejemplo de innovación y renovación incorporando toda la sabiduría de la viña de la tierra que la acoge y de la tradición de la gente que desde siempre la ha cultivado con mimo.

Probamos

• Roda 2007
• Roda I 2007
• Cirsion 2009 y 2010

Ambos vinos eran un regalo para los sentidos pero he de reconocer que la hermosamente engalanada potencia del Roda I le robó mi corazón a la elegancia y majestuosidad del Cirsion.

Ahora sí que ya plegábamos alas y recogíamos equipo, mañana por la mañana sería otro gran día de cata.

***

El día siguiente amaneció despejado en cuanto lo climatológico pero negro negrísimo en cuanto al tráfico. Era viernes y desde hace ya unas semanas las protestas en forma de paros en el transporte público convierten en un verdadero infierno las vías de acceso a Madrid. Desde el municipio de El Escorial al Salón Neptuno donde se ubicaba el salón tardamos dos horas de reloj.

No era la mejor manera de afrontar la cata pues soy de la opinión que la energía negativa afecta y mucho a la hora de presentarse fresco y limpio ante un vino, por ello ya pesar de que ya llegábamos con retraso, decidimos tomarnos un pequeño almuerzo consistente en sendos bocadillos de jamón ibérico acompañados de botellas de agua.

Sentados a una mesa, degustando tan sencillo como sublime manjar, pudimos descargar la energía negativa y enfrentarnos de nuevo la cata con una sonrisa.

Empezamos más suavemente que el día anterior con la mesa de

Ca N’Estruc

Esta bodega se ubica muy cerca de Barcelona y es parte del magno proyecto que Vila Viniteca ha desplegado a lo largo y ancho de la península.

Presentaban y probamos:

• Idoia Blanc 2010 FB: Un blanco fermentado en barrica en el que la madera sólo se siente por la labor que ejerce al compensar su fresca acidez y el cuerpo del que le dota. Muy, muy agradable.
• L’Equilibrista 2011 Blanco: Curioso y recomendable blanco con crianza elaborado únicamente con la uva xarel.lo
• L’Equilibrista Garnatxa 2010: Un fresco y floral tinto elaborado con garnacha de la zona, suave y con esa fabulosa acidez frutal de la uva.

Sin salirnos de la región pero viajando hacia el Penedés, nos acercamos a la mesa de una de las bodegas que con mayor acierto y maestría ha sabido ondear la bandera de los vinos ecológicos y biodinámicos con respeto total hacia la expresión de la tierra y la uva

Aunque la excusa para su presencia en el salón era el Indígena Blanco 2011, cuando nos propusieron catar sus cavas inmediatamente aceptamos puesto que el Indígena ya lo habíamos probado y sus espumosos no, y viniendo de quien venían el nivel de calidad estaba garantizado.

Además nos sorprendieron:

• Blanca Cusiné: Elaborado con uva chardonnay y pinot noir, recuerdo claramente sus tostados y sus frutos secos y un punto dulzón l final, pero muy sutil.
• Rosa Cusiné: Muy interesante espumoso elaborado con uva garnacha 100%. No aparenta ser un rosado realmente, su color es el de la harina tostada tirando a anaranjado y sus aromas intensos pero ligeros, con mucha fruta y crema proveniente de su crianza sobre lías. Tengo ganas de catarlo a solas y con tiempo

Cambiamos radicalmente de zona y denominación de origen para dirigir nuestros pasos hacia, posiblemente, algunos de los mejores blancos del Salón.

Nos encaminamos a Valdeorras, región del interior gallego más cercana al Bierzo que al mar y allí dejamos que nos guíe:

Valdesil

Hogar de blancos de aroma y cuerpo, de elegancia y clase, de fruta y carne. Catamos los tres que presentaban en el Salón:

• Valdesil Godello sobre Lías 2011
• Pezas de Portela 2010 FB
• Pedrouzos Magnum 2010 B

Los tres son absolutamente fantásticos, desde el supuestamente más humilde Valdesil 2011, que me sigue engatusando sin remedio a las palabras mayores del Pedrouzos, pero como casi siempre, encuentro el equilibrio donde reposar mi sentimiento en el grande, grande Pezas de Portela, portento de complejidad aromática y frescura, de cuerpo cálido y envolvente, de largo y lento paso.

Probamos suerte en una mesa que habíamos visitado el día anterior pero que en aquel momento no contaba con el vino que buscábamos, me refiero a

Contador

Éste fue uno de los casos que se repitió durante el evento según varias crónicas y comentarios ya vertidos, vinos que siempre parecen haberse agotado o que está previsto que se abran a otra hora.

Así es como tras intentarlo dos veces nos quedamos sin catar el Contador.

A modo de compensación, el representante de la bodega nos dio a probar otros dos vinos de gran calidad y uno de ellos no estaba en listado, el blanco:

• Qué Bonito Cacareaba: Para mí uno de los blancos de Rioja de referencia actuales. Tiene todo lo que se le puede pedir a un gran vino, independientemente de su color, aroma, cuerpo, sabor, fruta, persistencia…
• La Cueva del Contador 2010: Es uno de esos vinos que yo llamo oscuros sin que resulte peyorativo en absoluto. Es un vino con fruta negra madura, claros toques especiados y finas pinceladas de balsámicos. Un vino fino y potente a la vez.

Proseguimos nuestro camino y divisamos al final del pasillo la atractiva mesa de

Abadal

Aunque la razón de su presencia en este salón era la promoción de sus conocidos:

• Abadal 3.9 en su añada 2008: Afrutado y potente
• Abadal Selecció y en su añada 2007: Muy, muy rico, redondo y equilibrado.

Esta bodega de Pla de Bagés aprovechó la oportunidad para dar a conocer sus blancos

• Abadal Picapoll 2010: Vino blanco diferente y con carácter, elaborado con únicamente la uva autóctona picapoll
• Nuat 2009: La uva picapoll elevada a lo más alto de su expresividad, con fermentación y crianza sobre sus lías durante y con un ligerísimo toque de barrica. Muy disfrutable, me trajo recuerdos a grandes cavas a pesar de no ser un espumoso.

Pero esta bodega ha hecho recientemente otra fuerte apuesta en una región cercana: la Terra Alta con la creación de una nueva bodega Lafou:

• Lafou Els Amelers 2011: Blanco casi recién embotellado, elaborado al 100% con garnacha blanca (¡qué cosas más buenas se están haciendo con esta variedad!) y con permanencia en lías. Buena combinación de fruta fresca blanca y frutos secos. En boca es voluminoso, cítrico y casi potente.
• Lafou de Batea 2008: Tinto elaborado fundamentalmente con garnacha ensamblada con algo de syrah y cabernet sauvignon. Sorprende su combinación de frescura y dulzura. Es de paso largo y con un agradable postgusto. Muy interesante y merecedor de una cata más tranquila.

Proyecto a seguir.

Alguien nos chiva que en la mesa de los Eguren han abierto el Amancio y hacia allá vamos de cabeza.

Sierra de Cantabria

Complicado, muy complicado pasar por esta mesa y no probar absolutamente todos sus vinos porque los Hermanos Eguren tienen una varita mágica para hacer vinos soberbios con toda vid que tocan.

Presentaban Sierra Cantabria Gran Reserva 2004, Sierra Cantabria Colección Privada, Puntido, San Vicente, El Bosque...en añadas 2008, 2009 y 2010 pero allí estaba el gran Amancio, no lo habíamos probado nunca…

Razonamos que si probábamos toda la gama ya no podríamos catar ningún vino más esa mañana por lo que nos enfrentamos al gran Amancio.

Necesitaría todo un día para poder hacer justicia a su gran complejidad y finura aromática, para buscar los adjetivos que ese terciopelo en boca se merece. Los sustantivos más manidos se suceden: elegancia, potencia, nobleza, volumen, suavidad… un vino para soñar.

Me lo voy a pedir para Reyes.

Casi a punto de abandonar esta mesa, por el rabillo del ojo se me cuela un color anaranjado perteneciente a al único blanco presentado: Sierra de Cantabria Organza 2010

Pregunto a Enrique Alonso, el representante que nos estaba atendiendo, si sería una burrada probar este blanco después del Amancio. Hace tiempo ya que quería hacerlo pero por una cosa u otra no lo había hecho. Enrique me animó a hacerlo, me dijo que tenía la fuerza suficiente para que pudiera degustarlo y que su agradable grasa nos limpiaría paladar y garganta. No pudo tener más razón y quedé encantada con este excelente blanco que es capaz de imponer su personalidad tras un gran tinto como el que acabábamos de tomar.

Justo pegada a esta mesa descubrimos a una entrañable, para nosotros, bodega valenciana:

Bodegas Enguera

Esta bodega nos resulta entrañable porque durante este año hemos tenido numerosas oportunidades de disfrutar de su pequeño gran blanco, pequeño en precio, grande en sabor, pero la excusa que la traía a este Salón era la campanada que habían dado con su

• Paradigma 2008

De la mano de un esforzadísimo Álvaro de Nieves Toledo que se había quedado sin voz durante la tarde anterior a base de intentar explicar su vino la tarde anterior con niveles de decibelios equivalentes a los de una discoteca, con apenas un hilo de voz nos propone el acertijo de adivinar la uva con la que se elabora.

Lo olfateo y observo claras notas florales (violeta) y delicada fruta roja (cereza) con un elegante punto de acidez (frambuesa) y arbustos bajos. Sin dudarlo me lanzo al ruedo y propago:

-  Pinot noir- Se ríe negando con la cabeza

-  Merlot, entonces- más sonrisas y más negaciones

Al final resulta que era una monastrell ¡Sí señores! ¡Monastrell cultivada a una altura de 650m sobre el nivel del mar y utilizando métodos de elaboración borgoñeses!

Vino sutil y delicado, al que hay que dedicar tiempo y atención pero merecidos.

Antes de irnos no podemos evitar hacer un saludo al Blanc d’Enguera,excelente exponente de la autóctona uva verdil con trazas de chardonnay, viognier y sauvignon blanc. Maravilla de RCP ¡menos de 7€!.

Pegados a Enguera, otros grandes valencianos, una de ese puñado de bodegas que ha conseguido que se hable de Valencia con respeto y se la considere no sólo como suelo productor de uva de calidad sino como suelo de calidad para acoger uvas foráneas y de cómo manipularlas para que no produzcan vinos clonados a sus vecinos del norte sino que expresen la sangre y el carácter absorbidos por sus raíces.

No podemos hablar de otra bodega que

Hispano Suizas

Pero no sólo han conseguido que uvas como la pinot noir hable valenciano sino que las bondades de sus espumosos hayan conseguido una vez más que su Tantum Ergo Rosé Pinot Noir 2010 haya sido galardonado por segundo año consecutivo como el mejor cava rosado del año por la Guía Peñín.

Mientras comentamos éste y otros aspectos con Vicente Cortés, afable y bromista responsaable de ventas de la bodega, y si no que se lo pregunte al pobre Álvaro de Nieves de Enguera, vecino de al lado y a quien tenía prácticamente en estado de inanición y con el arquitecto de sus vinos Pablo Osorio, catamos los siguientes:

• Impromptu 2011 Blanco: Otro de los niños mimados de la bodega que ha sido merecedor del título “Mejor Blanco de España” en añadas anteriores, es un ejemplo de la prodigiosa adpatación de la sauvignon blanc a esta latitud resultando en un blanco elegante pero con mucha personalidad propia.
• Tantum Ergo Rosé Pinot Noir 2010: Cava en el que los aromas frutales superan a los usuales tostados y de bollería. El paso en boca es más dulce que amargo y el carbónico está exquisitamente integrado.
• Quod Superius 2008: Otro de los tesoros de la bodega, Pablo Osorio consigue con este ensamblaje de la local bobal con tres uvas extranjeras (syrah, cabernet franc y merlot) un vino que sin fisuras ni costuras aúna potencia, elegancia, terciopelo y largura de trago.

Siguiendo con nuestro improvisado guión, cambiamos de piso y nos acercamos sin muchas esperanzas a otra de las mesas estrella del evento:

Vega Sicilia y Bodegas Benjamín Rotschild & Vega Sicilia

A destacar la honestidad de ambos proyectos al llevar al Salón casi todos los vinos previamente anunciados con la excepción del Reserva Especial 94/99/00.

No quiero pasarme de lista y es posible que como nos acercamos por la mesa el segundo día del evento ya se les hubieran acabado las reservas, en cualquier caso quedamos contentos y agradecidos por tener la oportunidad de probar:

• Pintia 2009 (no anunciado en el listado)
• Macan Clásico 2009
• Macan 2009
• Valbuena 5º Año 2008
• Vega Sicilia Único 2003

El Pintia me resultó excesivamente ligero en comparación con lo que yo recordaba. Los Macan me gustaron mucho y más todavía cuando pregunté y me informaron de su PVP, les auguro un rentable futuro.

Tanto el Valbuena 5º como el Único me dejaron con cara de incredulidad; me temo que no era el lugar ni el momento ni las circunstancias más adecuadas para probar estos –de momento lo dejo en “supuestos”- grandes vinos.

Enfrentamos la recta final de esta experiencia apuntando nuestras copas hacia una bodega del Priorat que en relativamente pocos años se ha ganado una merecida fama por elaborar vinos que son vivo reflejo de las tierras de las que proceden:

Terroir al Limit

Ya el nombre en sí es toda una declaración de intenciones y los nombres de los vinos que presentaban correspondían a los de las fincas de donde provenía la uva que les dio vida:

• Torroja Vi de la Vila 2010
• Arbossar 2010
• Les Manyes 2010
• Les Tosses 2010

Los cuatro son sencillamente excelentes vinos, fruto del grandísimo respeto que le merecen tanto los terruños como sus viejas cepas y citando las propias palabras de uno de sus creadores Dominik A. Huber, la disciplina del trabajo empleado en ellos y la nula intervención humana en forma de maquillaje de ninguna clase.

Cada uno de ellos es diferente y me resulta muy difícil elegir alguno por encima de los otros pero si hubiera de hacerlo, y lamentando que no estuviera mi querido Dits del Terre (no por elección de la propia bodega) elegiría el Arbossar 2009.

Mientras nos dirigíamos a terminar nuestro recorrido en la mesa de nuestros queridos Clío y Nido, pasamos por una mesa que nos atrajo como un imán a cuyo magnetismo no supimos resitirnos: