Color amarillo pajizo, reflejos oro brillante, trasparente, limpio. Buena y fina burbuja.
En nariz hay sensación de frescor de fruta blanca, hierbas aromaticas del campo, musgo, frutos secos, tofffe, orejones vainilla, crema pastelera; es complejo, profundo.
En boca es fresco, fina burbuja persistente, bue cuerpo, buena acidez, presencia frutal (manzana, cítricos dulces), pan tostado, cierta mineralidad, todo bien estructurado y persistente.

De lo mejor que he probado en cavas.

Tres años más tarde (justo 39 meses), y magnífico momento para poder comprobar la evolución de este excelente Cava.

Color amarillo con suaves irisaciones doradas, elegante burbuja bien constante que consigue formar una ligera corona interior. En nariz muestra un marcado toque de cdrianza con sensaciones tostadas bien intensas, recuerdos de pan tostado y recién horneado, crostra de croissant de mantequilla recién hecho, bollería fina y mantequilla que nos recuerdan las galletas “sablés” de mantequilla, toques de fruta cítrica madura (limón escarchado), ligero toque dulzón, frutos secos algo tostados (avellanas, almendras y pipas de calabaza), algún pequeño toque de hierbas secas y flores marchitas, marcado fondo mineral bien refrescante. En boca tiene una magnífica entrada, notable densidad en todo su gran recorrido con una buena estructura e intensa cremosidad, finas notas tostadas bien integradas y aligeradas por un fino carbónico que va fluyendo en todo momento lo que resulta en puro placer y armonía, fruta madura, muy buena acidez, elegante, equilibrado, frutos secos, amplio y colosal persistencia. Final largo, postgusto de fruta madura y retronasal ahumado y ligeros frutos secos.

Sigue mostrándose grande pero aún puede ir a más, una añada con un enorme potencial de evolución. Espero poder volver a tener ocasión de disfrutarlo de nuevo.

Más información en: http://www.elvi.net/2013/06/20/gramona-celler-batlle-brut-gran-reserva-2001/

Color amarillo dorado brillante.
Aromas de buenos tostados, ligeros aromas de pera blanca acompañados de bollería fina. Entrada en boca muy viva, pica algo en la lengua y se podría domar más. Síntoma de que le queda mucha vida por delante.

ANÁLISIS & CATA. Un cava sutíl, complejo, lleno de sabiduría, una fantástica apuesta por las largas crianza de Cavas Gramona. Su principal virtud la complejidad, su seña de identidad. Aromas de pan grillé nos recuerdan a grandísimos champagnes de históricas añadas, su versatilidad en boca, sus texturas vínicas ausente prácticamente de burbuja, fundente en el paladar. Un vino emotivo poque aún conserva atisbo de su fruta, dominando las notas tostadas, de frutos secos, toques anisados y un maravilloso terruño a través de apuntes de tiza. En boca soberbio, eXtremedamente placentero. Admiración su textura.

Celler Batlle nos ofrece el puro y pleno placer con más de una década de burbujas, llenas de historia.

CREAMOS Momentos. CREAMOS Emociones

El maridaje propuesto es un plato del restaurante Dom Vinos de Málaga. Pulpo con hebras de chili y patatitas en su salsa de Dom Vinos, momentos de placer, momentos Gramona.

96.5 puntos en La Guía de Vinos Xtreme 2013 by akatavino.es
Galería Fotográfica en http://www.akatavino.es/portfolio-items/gramona-celler-batlle-2001-96-puntos

Dorado brillante. Tiene una nariz intensa, compleja, con perfil maduro pero a su vez con notable frescura, hay cereal tostado, también levaduras, algo de crema inglesa, manzana madura y toques florales. En boca tiene una excelente acidez, el paso es cremoso, encontramos ligeros amargos, tiene muy buena presencia, y es largo y armonioso. El cava que más me gustó de la vertical/comparativa...

Cata realizada en el Salón de los mejores vinos de España Guía Peñín 2012. Artículo con la cata de todos los vinos en http://www.taninotanino.es/posts/partitura-iii-del-salon-de-los-mejores-vinos-de-espana-guia-penin-2012

Linda Díaz nos llevó de la mano para entregarnos a Toni donde una vez más charlamos entorno a Gramona, copa en mano. Toni vive, siente y conoce profundamente lo que se hace y se dispone en la casa Gramona. Inquietudes sobre la crianza y evolución de estos espumosos, para mostrar la diferencia considerable en notas de exquisita reducción del Celler Batle 2000 respecto al 2001, donde la composición molecular va mucho más allá de lo conocido hasta la fecha, los cambios que se producen año tras año en rima, nos hacen pensar en cavas con más de diez años, además de la ya contrastada por la misma casa, de los cambios que se producen con la crianza reductiva una vez se produce el degüelle. Nos encontramos con cavas muy largos, más bien sostenidos en boca, complejos, nada viscerales, profundos, maduros, nos muestran como el tiempo le aporta sabiduría a estos espumosos, referencias que hacen marca, referencias con identidad propia y que según el mercado de nuestro país vecino, lo sitúan en espumosos con una RCP absolutamente envidiables.

Color amarillo brillante con destellos dorados.
Burbuja muy fina de buena persistencia.
La nariz es de buena intensidad, con una amplia paleta aromática, elegante y equilibrada, fruta blanca, melocotón, albaricoque, bollería (pan recién horneado, brioche...), tofee, ligeras notas dulces, frutos secos, fruta pasa y mineralidad.
En boca tiene buena entrada, amplio, cremoso, excelente acidez, carbónico muy bien integrado que le da estructura y llena la boca de sensaciones en un "paseo" que termina en un final de buena longitud. En retrogusto notas de fruta madura y recuerdos a frutos secos.
Excelente cava, me ha encantado su boca y la manera en que el carbónico se comporta y le aporta elegancia, cremosidad y estructura.

Color de parecidas entonaciones que el anterior 2000 con una transparencia más notable.

Su nariz buena intensidad con notas amieladas, fruta escarchada o pasificada, brioche almendras tostadas, con presencia de una discreta mineralizad.

En boca hace sentir su acidez fina con un carbónico perfectamente integrado, sabroso su paso dejando un recuerdo de fruta blanca, largo recorrido aguantando perfecto durante unas cuatro horas.

Este 2001 es un vino, un gran Reserva con 8 años en de guarda en rima cuyo degüelle y salida de la cava fue en el 2009.

Un vino con una tonalidad oro viejo con destellos muy brillantes. Se aprecian hileras contínuas de finísima burbuja (el perlage) que van explotando en la superficie del vino favoreciendo la salida de los aromas.

En nariz, como comentaba antes, esa consecución rítmica de burbujas van a favorecer que sobresalgan los aromas. Una explosión de notas de fruta blanca y orejones, sobre un fondo de toffee, mucho aroma a bollo (como si estuviera delante de un horno de pastelería).

En boca es fantástico, fascinante. Una entrada fresca, percibes el carbónico de las burbujas perfectamente integrado, cómo va explotando hacia el final de boca pero de una forma delicada, nada grosera. Un paso en boca cremoso, algo glicérico, con cuerpo, gran estructura, notas la existencia de acidez pero la justa, nada agresiva. Los recuerdos son más al toffee y algo de esos orejones que olía antes. La persistencia en boca media-alta. A decir verdad, pensaba que iba a ser mayor.

Debo destacar la persistencia de la burbuja en copa, aún habiendo pasado un tiempo prudencial. Esto es importante, ya que este cava, nos aguantará en copa los tragos cortos que queramos tomar a lo largo de la comida.

Este cava me lo he tomado con toda una comida japonesa, unos nigiri de salmón y de atún, unos rollitos crujientes relleno de gamba en tempura, y unos makis, y ha sido perfecto.

El Celler Batle Gran Reserva será un gran acompañante de prácticamente todas las comidas. Eso es lo que tiene ser un cava. Desde pescados en salsa como la merluza a la vasca, hasta carnes rojas al punto.
Por cierto, que dejé una copa en botella bien conservada hasta el día siguiente y aguantó perfectamente. Y comprobé lo fantástico y agradable que está solo.

Uno de los cavas que hacen enrojecer a algun champagne.
De color amarillo pajizo, limpio y brillante, con burbuja fina y persistente.
En nariz es de gran intensidad, con aromas de manzana, melocoton, aromas de bolleria (pan tostado), frutos secos, algun aroma herbaceo, ligeros tostados y mineralidad.
En boca es amplio, tiene buena entrada, gran acidez, es fresco, las sensaciones de la nariz vuelven a encontrarse en boca, con la misma fruta y los tostados y ahumados, con final largo con un punto amargo que no cansa.