No me ha acabado de convencer este vino excesivamente dulce y faltándole un poco de acidez. La botella es interesante y bonita. Color amarillo dorado brillante. En nariz aromas de flores y uva recién cortada. En boca mucho dulzor y poca acidez, pero tiene un buen recorrido. No es mi tipo de vino.

Buena presentación, mejor marketing, un vino de los que según donde leas, te induce a conseguir alguna botella.

El resultado ante estas expectativas, en mi caso, no han sido excesivamente satisfactorias. Un vino correcto en nariz, donde la Riesling aporta su toque más cítrico y la muscat compensa con tintes maduros. Aunque al final uno no termina por saber que está tomando.
En boca resulta agradable, no empalaga, aunque falto de recorrido.
El problema el precio, RCP baja.

Visual: Amarillo transparente, limpio brillante con tonos acerados
Olfativa: Intensidad media-baja, con notas achampanadas de levadura, manzana verde.
Gustativa: Ataque de intensidad medio-alta, bien de acidez, no empalaga, buena armonía entre acidez y dulzor, bien compensado

La botella como siempre preciosa, esbelta y espigada.
Dorado brillante con presencia de cristales en el fondo de la copa, supongo que bitartratos.
Nariz de buena intensidad con aromas de latex e hidrocarburos, miel, néctar de azahar y uva de mesa.
En boca tiene buen equilibrio entre la acidez y el dulzor, pero para mi gusto le falta un poco de acidez, tacto parafinado y buen recorrido.

Es la primera vez que veo esa aportación de la muscat a estos vinos y el resultado no me ha acabado de convencer, creo que ha perdido elegancia de la Riesling. Aun así es un vino resultón, fácil de beber y más que correcto.
RCP baja, ya que ronda los 15-16€, botella de 375ml.