Vega Sicilia Único 1994
Vega Sicilia Único 1994
FICHA TÉCNICA
Bodega
D.O./Zona
Pais:
España
Tipo de Vino:
Tinto
Graduación (vol):
13,50%
Varietales:
80 % Tinto Fino, 15 % Cabernet Sauvigon y 5 % Merlot
Precio aproximado
Precio Aprox:
Más de 100 €
PUNTUACIÓN
Nota de cata NOTA MEDIA:
9.64
/
98
Nota de cata CALIDAD-PRECIO:
8,1
ELABORACIÓN
Acabada la fermentación permaneció 24 meses en tino de madera, 22 meses en barrica nueva, 30 meses en barrica envinada y 30 meses en tino de madera de gran capacidad, resto en botella hasta su comercialización a partir del año 2005.
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Opiniones de Vega Sicilia Único
OPINIONES
30

Excelente vino.Color cubierto de capa media con ribete anaranjado.Nariz agradable con fruta madura,especies,
pimienta negra,barrica vieja.Boca muy elegante,fresca y con la caracteristica acidez,ocasionalmente licoroso.Medianamente largo.Vino muy agradable para beber ahora.Durara años.

Color impresionante que denota una cuidadísima crianza. La nariz tiene muchísimo carácter y va evolucioando en una gama de matices magnífica. En boca, ¡qué maavilla de elegancia y estructura! Es cierto que tiene un caracter "clásico" y que, para ciertos gustos, puede haber demasiado dominio de la madera o de los caracteres terciarios pero, admitidos estos axiomas, cuesta imaginar algo más perfecto. Nada en el vino es excesivo, pero la secuencia de sensaciones a que da lugar parece no tener final. ¡Qué distinto del Valbuena! Buscando referentes, pienso en el Real de Asua de esta misma cosecha, pero el Ünico le supera. Catado junto a un Malaveïna i un L’Ermita.

(En cata con Château Pichon-Longueville Comtesse de Lalande 2000, Trasnocho 2002, Remirez de Ganuza Rva 2000)Lo primero que desprende el vino es una nariz potente, barroca, con buquet de crianza, elegante, muy abiertos sus aromas, cafe y tabaco en unas dosis carnosas, muy matizadas, parecen unos schmeding que se deshacen al paso por boca. Amplio y con una vitalidad de cachorro, es alegre, con mucha fruta, mucho recorrido; lo pulido y equilibrado es todavia algo inmaduro, precoz; hay fruta negra en sazón, está todavia
algunas especias en tronco y casi vivas, y la madera, esa pizca de sensacion de vainilla cruda, casi en natillas, con paso a hierbas, regaliz y trozitos de naranja de navidad, son un resultado de la estructura compacta, compleja y exquisita que el vino desde el fondo de la botella está bombeando, un vino con pasion en la botella, más equilibrado al final de la cata, esa capacidad de sorprenderte a cada sorbo que das, con ese coupage que parece casi lo ideal, la tarea de un domingo, notas de lapiz otra vez, si es que no estuvieron antes, impresionante... bueno, y dejarlo algunos años todavia que habrá ocasión.

Lo que le distingue entre los miembros del club de los más grandes es ese aire barroco, "único" que siempre tuvo debido a su peculiar elaboración y crianza. En esta memorable añada ha perdido un poco de ese barroquismo para ganar en caracter telúrico, mineral, y en la expresión del terruño. Su perfumada nariz es tan compleja como intrigante, y honda y, sobre todo, elegante: trufas, especias, fruta negra, habano, cedro, sotobosque... Su boca es una obra maestra a la hora de manejarse con unos taninos envolventes, sedosos, carnosos. Pura armonía y profundidad. Su pujante acidez le llevará mucho más lejos. Es un grande ya delicioso que acaba de nacer.

Rubí de capa alta, muy vivo para su edad. Nariz de buena intensidad, elegante y compleja, que se va abriendo y evolucionado en la copa durante más de dos horas en las que se combinan y suceden las notas de fruta roja madura, cerezas en licor, maderas finas, tinta china, ahumados, caramelo, lácteos, anisados, tostados, café con leche, recuerdos vegetales, heno seco, flores marchitas... En boca tiene un excelente ataque, buena amplitud y final de seda. Equilibrado y bastante redondo, con taninos aterciopelados que aún conservan alguna pequeña arista. Grandísimo vino que con seguridad evolucionará a mejor en los próximos años. Quizá le perjudicó un poco encontrarse frente a un inmenso Lafite-Rothschild del 90.

Un vino con mucha vida por delante. A ciegas, que es como se realizó la primera parte de la cata, parecía el vino “control”, ya que por el color podías estimar que tenía algunos años menos: picota cubierto de colores muy vivos. Nariz intensa, donde la fruta se muestra fresca, fruta negra sobre todo, abundantes notas lácteas y ligeras notas de cedro. Muy sabroso y equilibrado en boca, con un fondo de madera muy sutil y muy bien integrada. Lo dicho, mucha vida por delante.

Nariz intensa, compleja, profunda, mostrándose llena de sensaciones y de matices -flores, frutas, balsámicos, leves notas minerales, trufas...-, pero que forman parte de un todo, están conjuntadas y amalgamadas, ninguna va por su lado, ninguna resulta discordante.
En boca nos encontramos con un vino super-estructurado. Todos los argumentos habituales de un buen vino -materia, acidez, equilibrio, elegancia...-, se encuentran aquí multiplicados, ampliados. Y lo mejor es que todo se presenta de manera natural, fluída, nada parece buscado o forzado. La boca se inunda de sensaciones plenas pero ajustadas para ser disfrutadas. Su persistencia parece eterna. Y lo mejor está por venir.

Realmente llegará a ser uno de los grandes, se le nota Alma comprimida y estructura, necesita de años ( quizás 20 ó 30 ) para poder desarrollar todo lo que lleva dentro. Desde mí punto de vista es la mejor versión actual de vino de guarda. Nariz muy balsámica, con notas de ciprés y pino, cortezas, maderas resinosas y aromaticas, tabaco y regaliz verde. Fondo de hojarasca y puntitas que recuerdan a la calidez del pegamento. En boca denota una excelente acidez que domina a modo de columna vertebral todos los sabores, precisamente será lo que le de esa cualidad de adentrarse en los años, con una evolución firme, secante y fría ( como un trozo minimalista de aluminio perfecto ). Posgusto de sensaciones amargosas nobles ( cacao verde ). Muy impresionante, es como ver pasar un tren de lujo cuyo destino deparará grandes sensaciones.

Color picota de capa alta con ribetes violáceos, acreditando en nariz estupendos aromas a la fruta negra y roja del bosque muy madura, sobre un no menos rico fondo de ragaliz, higo, pasta de cacao amargoso, vainilla y cuero todo en conjunción, excelente y largo paso por boca dejando impronta a la vainilla y a yerbabuena y a la fina madera, en el retronasal tambien sensación de que ha pasado una enorme carcasa gustativa compleja y sabrosa, un estupendo y buenisimo producto leve astringencia y adecuada acidez que no desagrada ni mucho menos, y ello por su elegante equilibrio tanto euqilibrio que tiene, enorme este será uno de la marca de los que harán época amigos

(Muestra de barrica) Es una añada excepcional y será -en opinión de Xavier Ausàs- un Vega Sicilia mítico. En nariz se muestra actualmente muy exhuberante, con notas de fruta en licor y suaves toques de crianza. Elegancia y presencia. En boca se muestra con cuerpo, estructurado, con buena acidez y excelente recorrido.

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