Las benditas locuras solamente se les ocurren a los benditos locos. Y los que han tenido la ocasión de conocer a Fernando Angulo y a vivir lo que es la esencia de la “famiglia” saben de qué les hablo. Veamos qué tiene que ver el champagne con los vinos de Jerez.
Echando la vista atrás, tras casi 5 años de trayectoria como blogueros en Verema, hemos visto que no habíamos dedicado hasta ahora un artículo exclusivamente al cava. Confesa es nuestra adicción al Champagne, adicción de la que no tenemos la más mínima intención de recuperarnos, pero cierto es igualmente que consumimos y defendemos al cava, al buen cava, como espumoso mediterráneo de gran calidad
Bernard Brémont crea su bodega en 1965 y está situada en uno de los paraísos de la pinot noir, el Grand Cru de Ambonnay. Trabaja con unas 12 has de esta uva además de 3 de chardonnnay, siempre en cultivo orgánico, con viñas de una edad media de 30 años. De José Dhondt disponemos de menos información y era la primera vez que oíamos hablar de este pequeño productor en Oger.
Jordi se preparó una concienzuda presentación de diapositivas con datos de todos los vinos y productores que iban a desfilar por nuestras copas. Su conocimiento de la zona, de las gentes que la trabajan y de los vinos que nacen de sus uvas resulta casi enciclopédico y su pasión se acaba contagiando. Comenzó obsequiándonos con su libro "Un sueño en la Champagne", que será nuestra primera lectura d
Históricamente, el gran vino de Champagne siempre ha sido elaborado por las casas calificadas como negociantes (NM), que compran la mayoría de la uva a viticultores de confianza y elaboran el vino bajo el credo y el estilo propio de cada casa. Las grandes cuvées de estas “maisons” fueron y siguen siendo los vinos más espectaculares de Champagne y objeto de deseo de todos los buenos aficionados.
La semana pasada les prometimos que hoy hablaríamos de champagnes ricos y afortunadamente pagables, que los hay y muchos. Un buen número de ellos están elaborados por “recoltant-manipulants” o pequeños productores que cultivan su propia uva y la convierten en pequeños hechizos burbujeantes que elevan nuestro espíritu y no vacían nuestros bolsillos.
LVMH son las siglas del mayor grupo del mundo relacionado con el lujo y la buena vida. Son numerosas la marcas de prestigio que aglutina, que responden a todo tipo de productos selectos. Y desde luego que el vino es una de las más importantes razones de ser del grupo, en especial el champagne. Encontramos casas míticas como Krug, Ruinart, Moët & Chandon o Veuve Cliquot.
Los pocos pero fieles lectores de este espacio vinícola conocen bien nuestro apego a la tierra de Cantabria, tierra que visitamos menos de lo que nos gustaría, pero que cuando lo hacemos intentamos que sea a lo grande, descansando y a la vez disfrutando de esa afición de tanto nos gusta, que no es otra que compartir buenos vinos con la gente a la que apreciamos.
Vamos a hablar del que probablemente es el rey de este tipo de productores, algo así como el más grande entre los más pequeños, Jacques Selosse. Jacques crea la bodega a finales de la segunda guerra mundial y actualmente está dirigida por su hijo Anselme.
El pasado día 19 de mayo vivimos en Madrid una de esas jornadas vinícolas que sin duda merece la pena ser reseñada por el buen nivel de muchos de los vinos catados y por supuesto, por poder juntarnos con todas esas personas que forman la familia del vino en la capital, amén de algunos conocidos procedentes de otros lugares de la geografía nacional. Dos importantes eventos coincidían en el día de
J.Ara.
¿Qué opinión tenéis sobre los champagnes de Brimoncourt