Curioso el punto de lata de mejillones que ofrece inicialmente y que sólo con la aireación se atenúa -sin llegar a desaparecer-. En nariz ofrece un caracter muy floral, con toques tostados y buena fruta negra madura que incluso en momento recuerda la compota (compota de ciruelas), las moras y las frambuesas e incluso leves recuerdos a bosque umbrio. En boca está muy rico, expresivo, buena acidez, persistencia media y notable frutosidad que trae de nuevo recuerdos a moras y frambuesas.

Vino de Toledo color rojo picota oscuro muy cubierto con ribete rojizo, capa altísima. Nariz de alta intensidad, donde se despliega un conjunto de aromas concentrados de frutas negras (ciruelas en compota), especiados (heneldo, clavo y tomillo), torrefactos de buena factura (posos de café), cacaos, balsámicos, todo un conjunto bien integrado con el alcohol, dándole complejidad. En boca es goloso, untuoso, seco, leves notas secantes en el paso en boca, gran cuerpo, la acidez parece darnos la impresión de que tiene una larga vida por delante, aunque le queda afinar ciertas aristas. El postgusto, de larga persistencia, a fruta sobremadura y tostados, dan una agradable sensación de plenitud. Precio por botella: 25 euros

Color granate intenso, brillante, limpio. Tinta la copa.
Aromas tostados, dulces, balsámico.
En boca entra denso pero fluido y sedoso, sabores dulces de frutas maduras (recuedo a jarabe de manzana) combinados con equilibrio con punta salinas. Un vino muy agradable. No cansa.

Cereza picota de capa alta y ribete violáceo.
En nariz, balsámicos y puntas de alcohol muy integradas, algo de frutas blancas, fresas y frutos negros muy maduros, vainilla, bollería y pan tostado, café, chocolate, especias. Satura la nariz al intentar buscar sus matices.
En boca muestra una gran expresión de los taninos y el alcóhol (espirituoso), con cuerpo, pero de paso fácil y nada pesado, con mucho tostado, tabaco y frutas negras. Retronasal potente a frutos negros en licor, tabaco y especiados. Posgusto no muy intenso, donde muestra algunos taninos y astringencia por pulir. Persistencia correcta. Buen vino, pero no es mi estilo. Sólo llegó a tocarme al día siguiente, con la ’alquimia’ del tapón de vacío.

Decantado desde 1 hora.Copa: RIEDEL Vinum Extrem Pinot noir.
Color negro con ribete violeta brillante,de gran lujo.
Nariz intensa con aromas de frutas negras de maduracion completa.Notas animales dulces.
Boca potenta llena de todo...Taninos dulces,sabrosos,redondos con madera perfectamente integrada.Paso de boca extraordinario como el de las grandes shyraz de Australia.Postgusto largo.
Este vino tiene hoy el mismo nivel de calidad que un Clos Mogador 2000 o un Pagos Viejos 2000.Un gran placer .

Rojo picota de mucha capa.
En nariz da tostados intensos, café, endrinas, albaricoque, pan tierno.
En boca es especiado, cunque no muy complejo, bastante superfluo para mi gusto.
Final correcto y con marcadas características de vino exótico, casi tropical.
Más que elegante, diría, según mi modesta opinión que es ";popularista";, pero es una opinión modesta de novatilla.

Color picota intenso, muy atractivo.
Arona no muy potente, pero si complejo y con expresión a frutos rojos y negros muy maduros. Anisados, pastelerias, buenos tostados y maderas finas, nobles y nuevas.
En boca es mucho más potente y atractivo que en nariz, taninos dulces y sabrosos, esta muy bien equilibrado, redondo, estructurado, tiene un paso de boca muy rico y ELEGANTE, en el retronasal vuelve a aparecer la fruta y las buenas maderas. Tiene un largo postgusto. En nariz lo califico con un 8,6, pero en boca con un 9,8. Me siguen encantando todos los Syrah y Petit Verdot del Marques de Griñón. Es un placer para las papilas gustativas. Cuesta sobre 22 Euros. El corcho un 8.

Decantado hace 1,5 horas. Color rojo picota oscuro con pequeño ribete violeta, límpido y brillante. Nariz intensa que despliega aromas concentrados de frutas negras con hollejos muy maduras ( sobremaduración ) y en maceración ( recuerdos de uvas pasas ). Aparecen sensaciones “dulces “ como cacao, balsámicos integrados y aspectos minerales – ferrosos, cafés, regalices, tostados y chocolate. Recuerdos de pan integral tostado y cereales tostados. En boca es muy rico, carácter abocado con atisbos melosos, evolución donde aparece rápidamente la fruta negra sobremadura con aspectos alicorados, torrefactos amentolados, hay calidez integrada y recuerdos de licor de “ ciruelas pasas con café y chocolate “. Muy largo y persistente. Muy rico...pero es un vino tinto y siempre te entra la duda a la hora de valorar este tipo de elaboraciones de maceraciones largas, me recuerda a algunos Priorats de 2000, es un vino muy bueno y que debe de haber sido dificil elaborarlo.