De color rubí rojizo de capa media, limpio. Reflejos anaranjados, vivos, brillantes. Borde amplio, completamente atejado.

Suave, avainillado, maduro, hiper-clásico y reconocible. Otra añada de clasicismo absoluto, de maderas envinadas, de frutos licorosos, cuadra, café aromático, manteca de cacao, cuero viejo... Todo muy bien medido y sin un solo elemento fuera de contexto.

En boca está más hecho que el Faustino del 98. Ligero, sedoso, delgado, fresco con un fino cítrico a galope de un ejercito de maderas cremosas y un apunte de dulcedumbre de calidad. Taninos redondos, elegantes.

Para los amigos del sr. Van Bambeeck, ese tipo tranquilo de sombrero negro que nos observa desde las baldas del supermercado. Si me dijeran que la bodega tiene unos tinos sin fondo de los que cada año saca el mismo vino y lo embotella me lo creería. Lo de Faustino Martínez no tiene explicación. Año tras año consiguen embotellar el mismo vino, sin apenas diferencias, sin salirse de la línea marcada hace más de 50 años. Hay que saber mucho de vino para conseguir algo así. Seguiremos bebiendo más y más y más de esto...

Más información del vino: http://vinosclasicos.blogspot.com.es/2013/12/faustino-i-1999-gran-reserva.html

Picota con ribete granate.
Aromas a pimienta, algo de cuero, y poca fruta e intensidad.
Nariz floja.
Boca suave con bastante acidez.
Poca cosa para ser un gran reserva.
Me esperaba mayor intensidad en aromas, sobretodo en los terciarios, y una boca mas elegante.
Esa acidez no creo que le de mucha vida y mejoría en botella ya que al cabo de cierto tiempo y aireación se mostraba oxidado.
Unos 18€ en el super.
Floja RCP.
No es que esté malo pero me esperaba algo mas.

Color picota intenso con ribete atejado.

En nariz fruta roja madura, fruta roja en licor, muy especiado, pimienta negra y también presencia de madera muy agradable. Licoroso y especias dulces como la vainilla.

En boca es potente, cuerpo, carnoso, elegante y bastante persistencia. Vino redondo, envolvente y elegante. Postgusto afrutado y especiado.