Castaño oscuro, con ribete amarillo/yodado. Muy glicérico. Aroma potente, pasificado, frutos secos, higos, orejones, algo de arrope, algarrobas, ahumado. En boca es muy dulce, denso y untuoso. Caramelizado, con sabor intenso que recuerda a todo tipo de frutos y frutas secas. Sabroso, cálido, fresco y vibrante. Muy serio y sobretodo, con una extraordinaria acidez que compensa todo su dulzor y lo convierte en un vino super-adictivo y vicioso. Final afortunadamente previsible. Dulce, con todo tipo de frutos secos, ahumados y algo de regaliz. Muy persistente. Buenísimo. 14€.

Marrón acoñacado o madera muy tostada; ribete blanco y lagrima gruesa.
Aroma complejo de buena intensidad, uva pasa madura, miel, tostados, confitura de ciruelas, buena madera, almendras tostadas, azucares y humo.
Llena la boca, glicérico, bastante equilibrado, mucha presencia de azúcar, largo, y persistente, salida de boca ligeramente amargante.

Caoba con reflejos pajizos. Notas cítricas y leves recuerdos a moscatel aunque predominan los aromas a caramelo, ceniza y uva pasa. En boca madera muy bien integrada, azúcar quemado y arrope, pero sobre todo mucho azúcar quemado. Potente y persistente, elegante y diferente.

Vino de Color ámbar oscuro, caoba, casi amarronado, brillante, con ribete verdoso. Lagrima lenta, gruesa y persistente. En nariz destacan los aromas de uva pasa, orejón de albaricoque, aromas florales de la moscatel, algo de acetaldehído, recuerdo marino, maderas nobles, canela, desván, caramelo tostado, el alcohol resalta ligeramente en nariz. En boca es Graso, glicérico, carnoso, largo, volviendo con mucha tenacidad el recuerdo de compota de orejones de albaricoque y algo empalagoso al final, siendo notable su falta de acidez. Parece que lleve arrope añadido. En definitiva es un vino para guiris, (con vocación de exportación) que aunque bien acabado, tiene un excesivo precio para lo que ofrece, no obstante goza de una elegante presentación, imprescindible en el mercado exterior.