El pasado día 19 de mayo vivimos en Madrid una de esas jornadas vinícolas que sin duda merece la pena ser reseñada por el buen nivel de muchos de los vinos catados y por supuesto, por poder juntarnos con todas esas personas que forman la familia del vino en la capital, amén de algunos conocidos procedentes de otros lugares de la geografía nacional. Dos importantes eventos coincidían en el día de
Juansanroman.
Comenzamos el segundo día con un ligero susto inicial durante el desayuno cuando nos llaman de Niepoort y nos preguntan que dónde (demonios) estamos. Resulta
Juansanroman.
Comenzamos el segundo día con un ligero susto inicial durante el desayuno cuando nos llaman de Niepoort y nos preguntan que dónde (demonios) estamos. Resulta
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Comenzamos el segundo día con un ligero susto inicial durante el desayuno cuando nos llaman de Niepoort y nos preguntan que dónde (demonios) estamos. Resulta
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Comenzamos el segundo día con un ligero susto inicial durante el desayuno cuando nos llaman de Niepoort y nos preguntan que dónde (demonios) estamos. Resulta
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Juansanroman.
Comenzamos el segundo día con un ligero susto inicial durante el desayuno cuando nos llaman de Niepoort y nos preguntan que dónde (demonios) estamos. Resulta
Juansanroman.
Comenzamos el segundo día con un ligero susto inicial durante el desayuno cuando nos llaman de Niepoort y nos preguntan que dónde (demonios) estamos. Resulta
Juansanroman.
Dicen que París bien vale una misa. Y esperamos que las bodegas del Douro portugués valgan los casi 1.200 kilómetros que se hizo uno de nosotros para llegar desde Terrassa. Otro 832 desde Valencia y yo unos más modestos 475 desde Madrid. ¿Habrá valido la pena?
Juansanroman.
Dicen que París bien vale una misa. Y esperamos que las bodegas del Douro portugués valgan los casi 1.200 kilómetros que se hizo uno de nosotros para llegar desde Terrassa. Otro 832 desde Valencia y yo unos más modestos 475 desde Madrid. ¿Habrá valido la pena?
Juansanroman.
Dicen que París bien vale una misa. Y esperamos que las bodegas del Douro portugués valgan los casi 1.200 kilómetros que se hizo uno de nosotros para llegar desde Terrassa. Otro 832 desde Valencia y yo unos más modestos 475 desde Madrid. ¿Habrá valido la pena?