Nos agenciamos este viejuno riojano, un Monte Real de la cosecha de 1.968 que como mínimo tuvo 24 meses de crianza entre los viejos toneles de 20.000 ls y barricas de 225 ls. En la etiqueta aparece como COSECHA, pero equivaldría a un reserva actual por su crianza. Abrimos la botella (con excelente nivel de líquido) y la dejamos respirar por espacio de cinco horas y media. El tapón nos dio algún problemilla pues se nos partió en dos con el abridor de lamas. No obstante lo pudimos sacar sin más. Servimos a 17°C para su valoración.

VISUAL: Precioso color rojo picota de capa media alta con un amplio ribete en tonalidades rubí atejadas. Muy brillante y luminoso. Su lágrima es escasa, gruesa, lenta y transparente (92).

OLFATIVA: A copa parada asoman aromas dulzones de fruta confitada. Al agitar aparecen fragancias de montebajo, herbáceos de romero, fúngicos de níscalos silvestres y un toquecito especiado marca de la casa (Rioja), a canela y vainilla con algo de fenogreco y nuez moscada. Seguimos olfateando y encontramos terciarios de cacao en polvo, tabaco inglés y un fondo amaderado muy sutil, de ebanistería fina. De intensidad media y bastante complejo. Nariz muy delicada y equilibrada, de gran elegancia que se mantiene en todo lo alto pese a esas cinco horas y media de espera, brutal!! (94).

GUSTATIVA: Atesora una buena pegada, de alta acidez todavía y con esos taninos del tipo ave fénix que nos enamoran. Paso por boca frutoso con notas de orejones, pan de higo y ciruelas pasas. En retronasal encontramos fragancias de flor marchita y algunos toques fúngicos. Post-gusto maravilloso, lácteo, sedoso, totalmente redondeado, con unas fantásticas notas frutosas inundando el paladar. Nos deleita también con un fondo tostadito de la barrica y con apuntes terciarios de chocolate negro y café torrefacto. Al final es la madera en forma de duelas envinadas la que aparece aportándole un plus licoroso. Su persistencia es de dos minutos y 40 segundos de auténtico disfrute. De nuevo una añada par de los años 60 que no falla, mostrando cómo se las gastaban por aquellos entonces los maestros riojanos. Otra joyita más para recordar (94).

La RCP fue excelente pues conseguí la botella por 20 euritos.

MARIDAJE: El primer día acompañó nuestro surtido de embutidos ibéricos de los lunes. Después fue pareja de baile de unos muslitos de pollo y nos lo terminamos con unos jugosos bistecs en masala con salsa de frutos rojos y papaya. Destacaremos este último maridaje con esos apuntes cárnicos y sanguíneos en perfecta armonía con los sabores frutosos de la salsa y de nuestro maravilloso viejuno. Maravilloso amigos!! 

VIDEOCATA:  https://www.youtube.com/watch?v=38A6gdsMPxQ

Salud-os!!