De color rojizo brillante de buena capa, limpio, sin precipitados. Muy poco evolucionado, extremadamente brillante, refulgente, vivo. Reflejos cobrizos y anaranjados, con cierta sensación de grosor. Lágrimas gruesas.
Muy expresivo, potente, abierto. Inicialmente predominan todo tipo de notas de fruta roja confitada con un apunte licoroso a endrinas maceradas que bordea lo medicinal. Aparece el hinojo, esencia de sasafrás, anís estrellado. Esta sacudida inicial se suaviza adquiriendo un tono conocido que se sitúa muy cercano a un reserva Monte Real. Sobresalen las maderas envinadas, cuero viejo, especias dulces, algo parecido a la manteca de cacao, el toffee, y un fondo a tostados de calidad.
En boca es generoso, vivo, lleno de energía, de un estilo que para entendernos podríamos mal llamar "garnachero". Se despilega la misma fruta que ya hemos visto, picante, cremosa, reducida, conducida por una intensísima acidez cítrica que mitiga un amago ardiente y especiado. Un vino grueso ligeramente amargoso con un regusto a mermelada de naranja inglesa. Está en un momento interesante aunque no parece que vaya a acabar de integrar la barrica que sigue ahí presente hasta los restos!! Muy rico, resultón. Puso a raya unas gloriosas dal makhani punjabíes, cocinadas durante horas. Explosión de sabores!!! Estos rosados tradicionales hay que disfrutarlos siempre en la mesa. No son vinos de cata, son puro alimento.
Más información del vino: http://vinosclasicos.blogspot.com.es/2014/10/borisa-1964-rosado-reserva.html
Utilizamos cookies propias y de terceros con finalidades analíticas y para mostrarte publicidad relacionada con tus preferencias a partir de tus hábitos de navegación y tu perfil. Puedes configurar o rechazar las cookies haciendo click en “Configuración de cookies”. También puedes aceptar todas las cookies pulsando el botón “Aceptar”. Para más información puedes visitar nuestra Ver política de cookies.