Dorado intenso con presencia de posos en el final.
Nariz de media intensidad y que destaca por su gran finura y mineralidad. Complejo, aparecen toques yodados, frutos secos, especias, ebanistería, trazas herbáceas y un cierto punto balsámico. Gana poco a poco con el aire.
En boca es de corte potente pero sin perder la elegancia que los años de botella otorgan, paso redondo y armónico y final de gran longitud y prestancia, quedando los recuerdos de frutos secos amargos. Gran persistencia y fina concentración. Está en plena forma.
Ducal es un Jerez seco que ya no se produce en la actualidad, probablemente con origen de fino, hablamos de una saca del 71 y de una botella que ha llegado en perfectas condiciones siendo un vino en plenitud y con esa redondez especial que siempre da la estancia en botella. Un gran vino en todas sus fases.