Repasando viejas notas gracias especiales a Pedro Olivares). Marrón muy oscuro con ribetes caoba. Impresionante nariz con notas de higos secos, orejones, café, pasas sultanas y yodo. En la boca se muestra ampuloso, pura untuosidad, elegancia, delicadeza y a la vez intensidad. Es muy largo. Probamos un pedazo de historia y nos hechizó.

Color ambar amarronado muy oscuro, casi opaco. Aromas de torrefacto, café, ahumados, aldehidos, datiles, higos pajareros, pasas, orejones, regaliz, paja humeda, yodo, bergamota y humo. En boca es casi solido, denso, graso, forrado, glicerico, untuoso. Por su intensa via retronasal resaltan toda clase de compotas de frutas y un recuerdo marino misterioso. Amplisimo y largo final de boca. Imposible maridarlo y menos todavía medir las caudalías.Muy buena persistencia. Excelente en su genero.

Recupero esta nota de cata porque creo que vale la pena. Color opaco, casi negro, con ribetes caoba. Saboreas un trozo de historia. Presencia en nariz de pasificados, higo, dátiles, café, notas yodadas. La boca es elegancia y sabiduría de haber vivido mucho: amplio, untuoso, persistente, muy largo. Un viaje en el tiempo sin billete de retorno.
Algo que no me gusta del vino es su etiqueta de madera pirograbada, pero ¿a quién le importa la etiqueta? (350-450€;)