Cavas de Paraje: la gran apuesta

El pasado 13 de julio, Isabel García Tejerina, Ministra de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente, hizo pública una noticia muy esperada por todos, y es que, al cava a partir de este momento se le brinda la oportunidad de pertenecer a una nueva categoría: Cava de Paraje Calificado. Adoptando así una nueva posición, que lo sitúa por encima de los Reservas y los Grandes Reservas.

Gracias a una Orden MInisterial y a una publicación en el Boletín Oficial del Estado se le ha reconocido a doce cavas la condición de Cavas de Parajes Certificados. Algo inusual hasta la fecha aunque, desde hace ya tres años el Consejo Regulador D.O. Cava anunció durante una presentación de ámbito internacional y tras la publicación del Pliego de Condiciones, esta novedosa categoría que, hoy por fin, se convierte en una realidad.

Cavas de Parajes, ¿qué significa esto en realidad?

Con esta nueva categoría, se pretende dar un trato distintivo y diferenciador a aquellos cavas que estén dotados de unas características singulares. Para ello, estos vinos deben de tener su origen en unos terrenos con unas particularidades muy especiales además de tener atribuidos aspectos geológicos y climáticos diferenciales capaces de reflejar una personalidad inconfundible.

Es mucho el trabajo que han realizado las bodegas elaboradoras agraciadas para que, por fin, hayan podido llegar hasta aquí. Toda una labor realizada tanto por bodegueros, enólogos, el propio Consejo Regulador y la Administración, para que al cava se le pueda orotgar  un merecido reconocimiento que se estaba pidiendo a gritos dentro del sector desde hace ya muchos años.

Las bodegas presentaron sus cavas candidatos -como si de verdaderos terosoros se tratasen- y fueron sometidos a una meticulosa cata donde se analizó el color, la textura del carbónico y su persistencia, la complejidad, los aromas y el cuerpo del vino. Dichas propiedades hacen que un cava alcance un nivel superior y aportan distinción a un paraje determinado.

Este hecho, es tan sólo el principio de una nueva era, una nueva etapa que se abre donde lo que verdaderamente prima es la calidad del producto y su sigularidad.  Es una recompensa al trabajo bien hecho y que, tras mucho esfuerzo y dedicación, han sido distinguidos sólo doce Parajes Calificados.

Requisitos que deben cumplir los cavas de Parajes Calificados:

• Los viñedos de donde proceden las uvas para la elaboración de estos cavas deben de tener una antigüedad mínima de diez años.

• Las parcelas que forman parte del paraje deben encontrarse situadas en las proximidades de la bodega.

• La vendimia siempre ha de ser manual.

• Todos los cavas deben ser elaborados en la misma bodega.

• Entre el tiraje y el degüelle debe pasar como mínimo 36 meses.

• El rendimiento máximo por hectárea es de 8.000 Kg tanto para variedades blancas como para tintas. Y un rendimiento máximo de 0.6 Hl de mosto por cada 100 Kg de uva.

• La trazabilidad del vino base se convierte en una condición indispensable.

• Queda prohibida la acidificación, decoloración y el incremento del grado alcohólico de los mostos y de los vinos base.

• Toda etiqueta debe incluir su correspondiente añada

• Bajo ningún concepto se podrá comercializar las botellas que se encuentren en fase de rima o en punta.

Vamos al grano: ¿qué cavas han sido seleccionados? 

¿Qué pasará después?

Es todo un reto para las bodegas y una oportunidad de oro para dejar al cava español donde merece estar, o sea, en una posición alta, muy alta. Y es que jugar en primera división nunca estuvo tan cerca.

No hay duda de que esta nueva categoría se traduce como un paso hacia adelante y que trata de mostrar al mundo entero una imagen clara de calidad y excelencia. Lo que se pretende con los Cavas de Paraje es que los cavas hablen por sí solos de la zona y darle la importancia que merecen los viñedos para que el terroir se pueda expresar.

Cavas de Paraje, son vinos con complejidad, con capacidad de envejecimiento y con aromas propios del viñedo capaces de transmitir intensas emociones al evocar la zona geográfica de la que proceden.