Desarrollando el gusto hacia los licores y cócteles amargos
Hay muchos cócteles elaborados a partir de bebidas amargas, ya sean licores, destilados o mixers. Y también hay algunos paladares algo quisquillosos o dulzones (depende de cómo se mire) que se niegan si quiera a probarlos.
Recientemente, y sobre todo con el boom del Gin Tonic, los cócteles amargos han pegado un pequeño golpe en la mesa sobre otros cócteles de corte más dulce. El Gin Tonic no sería el caso de este post, ya que vamos a hablar de los cócteles elaborados a partir de licores o destilados amargos, como por ejemplo el Campari y el Spritz, también de moda últimamente en España.
Algunos dicen:
odias al Campari hasta el momento en el que te encanta y a partir de ahí, no puedes beber otra cosa
Tengo que reconocer que desde que empecé a viajar mucho a Italia, me pasa. Pero, ¿cómo se aprende a amar al Campari o este tipo de licores amargos?
Paso 1: Desarrollar el gusto lentamente
Algunas personas tienen el gusto adaptado para sabores amargos, y otros no. Normalmente, la primera vez que se prueba Campari o cualquier otro licor amargo se produce cierto rechazo, pero una vez que el paladar se va acostumbrando muy poco a poco, la cosa cambia.
Otras personas necesitan desarrollar su gusto hacia las bebidas amargas gradualmente con el tiempo, y aun así algunos nunca llegan a apreciar positivamente estos sabores. No a todo el mundo le gusta la cerveza o un whisky Scotch muy ahumado. A mí por ejemplo no me gustaba la cerveza y ahora mira, un fan. El truco está en empezar e ir poco a poco.
De todas formas, hay cosas que son irreversibles, y las preferencias personales, después de todo, son de cada uno.
Paso 2: Empieza con el Vermut
Una buena manera de empezar a desarrollar el gusto hacia los amargos es probar Vermut y otros vinos aromatizados como el Glühwein (muy típico en los Weihnachtsmarkt, mercados de Navidad alemanes).
El Vermut es un vino macerado en hierbas y sustancias amargas y suele tener una amargo bastante disimulado, pero también son dulzones y la gran mayoría aún poseen ese sabor a vino. Digamos que tienen un poco eso, combinación de ambos registros de sabores. Vermuts con ese punto amargo tenemos al Martini o al Cinzano, pero si quieres ir más allá, te recomiendo que pruebes un Dolin o un Punt e Mes.
Con un nivel similar puedes probar otros vinos aromatizados, como el Lillet Blanc. En él hay un toque más amargo presente en la mayoría de los Vermut, pero sigue siendo sutil y equilibrado con el dulzor.
Una vez dominado el Vermut conseguirás un pequeño salto hacia el mundo de los licores amargos.
Paso 3: Inténtalo con el Aperol: el dilema con el Campari en los Spritz
Muchos bartenders usan Aperol como el licor que enciende los patrones de los sabores amargos, de hecho, siempre que pidas un Spritz en un local como toca, te preguntarán: “¿Aperol o Campari?”.
Entre sus ingredientes encontramos naranja y ruibarbo, y estas notas frutales son las que equilibran muy bien la amargura del licor. El Aperol tiene un sabor similar al de Campari, pero es mucho menos amargo, y es también más bajo en alcohol. Independientemente, si después del Vermut aún te estás acostumbrando a los amargos, un cóctel o una copita de Aperol te vendrá bien para ir haciéndote a la idea. Si decides probar el Spritz, la dulzura y la burbuja del Prosecco, te ayudarán a equilibrar el ligero amargo del Aperol.
Si te has vuelto adicto al Aperol, entonces prueba el cóctel “Intro to Aperol”, el recurso presentado por Audrey Saunders con el objetivo de atraer a aquellos que son principiantes con los sabores amargos. Saunders empieza con Aperol, añade ginebra y zumo de limón, y finaliza con un sirope y una pizca de bítter. Un mix interesante de herbáceos, cítricos y amargos.
Paso 4: Averna, Ramazzoti y Meletti
Si decides continuar tus aventuras, el siguiente paso sería probar algunos licores también italianos que son de manera moderada más fuertes que el Aperol, pero sin llegar a ser excesivamente amargos. Estos son:
- Amaro Averna es suave y dulce, con un fondo de almendra y cacao, cítricos jugosos, y notas de regaliz. Es perfecto para aquellos a los que les gustan bebidas muy dulces, pero con un toque amargo.
- Ramazzotti es menos dulce que el Averna, con un poco menos de notas cítricas. Tiene un sabor agridulce, a cola sin gas, y de hecho, si lo mezclas con alguna soda verás que probablemente sepa como una especie de Coca-Cola.
- Amaro Meletti es el más agrio de los tres. Tiene sabor a azafrán, violeta y anís, lo que lo hace sobre todo herbáceo y algo dulce.
Si después de todo esto consigues hacerte mínimamente a los licores y cócteles amargos, hay buenas noticias, tienes un mundo entero de licores y cócteles amargos por explorar.
Fuente utilizadas: seriouseats.com, drinkupny.com.
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¡Enhorabuena por este artículo! Voy a tener muy en cuenta estos pasos a seguir a la hora de empezar adaptando mis gustos hacia las bebidas amargas. Como bien dices, todo está en empezar y ponerse.
Un saludo!
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en respuesta a Elmesias Ver mensaje de Elmesias Jajaja un poquito de todo, ¿no? A mi me encanta lo amargo y mira que ese me cuesta...
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en respuesta a Santi Albert Ver mensaje de Santi Albert Entonces es que no te gusta lo amargo, jejeje
Aprovecho para felicitarte las fiestas y desearte suerte en la lotería y salud ante todo! -
en respuesta a Elmesias Ver mensaje de Elmesias Gracias crack! Igualmente! Veo que me vas a saturar el facebook de fotos de vinazos y comilonas jajaja ¡A disfrutar!