Visual, de color cereza, muy intenso, con ribete violáceo. De capa alta. Lágrima intensa y glicérica, lenta, ancha. Inicialmente no tintada. Bastante limpio y brillante.

En nariz, a copa parada, nos encontramos unas buenas dosis frutales, con mucha fruta roja y negra, maduras. Inicialmente no aprecio muestras de sobremaduración, sino de fruta en su punto de sazón. Encuentro muchas notas lácteas ahora mismo, en forma de yogur de frutas del bosque. Notas de regaliz. Fondo de vainilla y cacao, especias, sándalo. Violetas y frlores rojas. Ligeramente licoroso, con notas de cerezas. Destaca por la frutosidad. La agitación de la copa, mantiene el abanico de aromas que he encontrado antes de agitar. Los terciarios se mantienen a raya y están muy respetuosos con la fruta roja y negra, madura y fresca a la vez. Ligeras notas de plátano maduro y yogur. Con cierto carácter calizo, de tiza.

En boca, tiene intensidad media. Se muestra fluido y fresco de entrada, con una acidez bastante buena, lo cual es de agradecer teniendo en cuenta la zona de donde proviene. Se aprecia fruta roja fresca, aunque algo adelgazada por ligeros verdores que no se apreciaban en nariz. Astringencia importante en estos momentos. Apuntes de té verde. Los taninos está bastante presentes, con un cierto carácter amargoso (sin excesos), pero necesitan pulirse aún en botella. Es sabroso, con un toque mineral también en boca, ligeramente salino. Longitud media. Deja recuerdos de especias, de fruta roja, chocolate en polvo y vainilla.

A revisar en unos meses, cuando los taninos se hayan afinado y perdido su carácter astringente.

Rojo granate de capa alta con buena extraccción de color y corona teñida

Buena nariz con un cierto verdor inicial y fruta roja, unos aportes minerales que no esperaba encontrar, complejo este vino y además especiado sobre un fondo de hierva de monte, hay tengo alguna duda esperare un poco haber, su evolución.

Paso por boca agradable, persistente y elegante, me gusta, vuelven las notas verdes, acompañadas con una ligera aspereza, muy agradable que acompaña a unos taninos sinceros, con una nota dulce, su acidez es perfecta, con un recorrido largo y un excelente recuerdo.

Rojo picota, ribete cereza y de capa media.
Los aromas son embriagadores, balsámicos, regaliz, algo de madera y, todo ello, muy intenso.
En boca destaca su vitalidad, buena potencia de entrada, acidez correcta, astringencia ajustada, taninos bien integrados. Notas agradables a Fruta madura y a madera, unido a un postgusto medio.

Es de intensidad media-alta, con aromas a frutas maduras, bayas frescas y pimienta blanca.
Me quedo enganchado en la nariz, es muy rico, maduro (sospechaba que estaría por hacer) conforme lo mueves gana en intensidad y complejidad, sale la mora, grosella, arándanos en un fresco ambiente balsámico y de cedro. Madera muy prudente y de calidad.

En la boca su entrada es suave, taninos redondos que se afinaran más pero esta para gozarlo desde ya. Carnoso y de agradable paso de boca, parece más un vino Atlántico que Mediterráneo, es fresco con una acidez justa que le da vida. La madera en la boca se mantiene muy prudente abrazando el vino en plena armonía. Estructura tánica, aunque entra suave, muy expresivo y amplio. Al final salen notas minerales y arcilla, bosque bajo, tostados y especias.
La copa se queda ligeramente teñida de un cereza picota de capa media-alta.

Me ha agradado mucho, lo seguiré de cerca en su evolución, pienso que es un buen inicio para adentrarse en el resto de los vinos de la bodega. Felicidades por el perfecto mestizaje de la Bobal con el resto de variedades, están ensambladas y armónicas, como buenas amigas.

Diseño atractivo de la botella, invita a descorcharla y consumirlo. Bonita y novedosa presentación.
Color rojo picota muy vivo.
En la fase olfativa, inicialmente me recuerda a frutillas del bosque. Conforme pasa el tiempo noto aromas a carne que evolucionan a tonos más especiados y minerales.
En boca, el ataque inicial es un tanto astringente y presenta buena acidez. No excesivo postgusto. Seguramente unos meses de botlla le sentaran bien.

Picota oscuro con destellos violáceos. Capa media-alta y lágrima densa.
En nariz, abre con aromas lácteos y de fruta negra, carne, café, ceniza y especias (vainilla y pimienta). Más tarde se desarrollan los aromas de tierra mojada, hierbas mediterráneas y balsámicos. Se detecta una punta alcohólica cuando sube un poco la temperatura.
En boca es bastante astringente, con buena acidez y graso.

Rojo picota oscuro, capa media-alta. Lagrima densa.
Aroma de media intensidad. Por orden cronológico de aparición de aromas:
Regaliz roja, especias dulces, jinjoles,lacteos, cafe, toffe, cecina, humo...Variada nariz.
En boca, taninos algo verdes, bien de acidez...
Con el tiempo y con comida, los taninos se van suavizando, apareciendo un buen peso de fruta negra, toques de brea y humo.
Buen vino, que debe mejorar con el tiempo que integre esos taninos.

Ya la presentación, me gusta. Moderno, atractivo, jóven de diseño.
En vista es precioso, con una picota de capa alta y un menisco violáceo-amoratado que quita el sentío. Lágrima fina y densa que tinta la copa. Muestra buenas hechuras.
En el segundo tercio, la nariz, es dónde se muestra complejo, yo diría laberíntico, ya que nos va dando pistas de la complejidad que tiene: notas de frutos del bosque, minerales -tiza-, regaliz, fondo tostado y salino, apuntes anisados, de flores azules (esa violeta del syrah), laurel, tomillo, lácteos, pelo de animal y notas ahumadas.
Es un vino de concentración, para hacer trabajar la nariz y la memoria olfativa. Hoy lo recataré estando convencido de que dará más aromas.
En boca se muestra astringente -esa sensación de piel de castaña-, con taninos potentes, con un final amargoso, pero mostrando buena estructura y acidez.
Es un vino que tiene que hacerse aún, pero que promete y EMHO, mucho.

Buen cambio de imagen. Corcho correcto para el vino que es. En la visual se muestra vivo y con una capa menor a la que esperaba inicialmente, cosa que me agrada. Picota de ribete cardenalicio vivo.
En nariz se muestra terciario de primeras, con un toque de salchichón nada más abrir. Café torrefacto, vainilla y toque láctico. A los 20 minutos asoma algo de fruta negra madura.
En boca aún está por pulir, creo que está recien embotellado y se le nota mucho. Taninos secantes, posgusto largo con recuerdos de nata. Algo de montebajo, toque balsámico. Tiene acidez para aguantar una temporada en botella, que le vendrá muy bien.

Bonita presentación y original botella.
Color picosa granatoso con ribete violáceo, capa media-alta.
La nariz es de buena intensidad, frutillos rojos tirantes, frutas negras, maderas finas, toques especiados, tierra húmeda, ceniza y lácteos.
En boca tiene buena entrada, resulta fresco, buena acidez pero falto de estructura y ensamblaje, taninos marcados y cierta sensación de verdor, fruta y crianza bien combinados, cuerpo medio y final bastante largo. En retrogusto vuelve la fruta y las notas de la crianza. Parece unánime la sensación de falta de botella que nos ha transmitido este prometedor vino, bastante reconocido en otras añadas.