Han transcurrido 11 meses desde la última botella bebida de este vino. ¿Qué me he encontrado?. El corcho, recomiendo el sacacorchos de láminas, con uno de espiral se ha roto. Permanece elástico y con la cara que está en contacto con el vino muy tintada.

    A la vista, han aumentado las reflejos rubís atejados. Mantiene su abundante y lenta lágrima, pero ahora no mancha la copa. Ha evolucionado más de lo que yo pensaba y con 4/5 partes de la botalla consumida aparece una ligera precipitación.

    En nariz mantiene sus valores y virtudes. Abundantes frutas rojas y negras (estas últimas muy maduras). Madera de su crianza perfectamente ensamblada y sin destacar. Notas de madurez, leves cacaos y tabaco.

    En boca sigue muy elegante, carnoso, equilibrado, fino, muy sedoso, con volumen, con los taninos domados, con abundantes frutas, tanto rojas como negras maduras y con la madera de su crianza perféctamente integrada. Mantiene una fina acidez que te invita a beber y beber y que le podrá dar 2-3 años más de vida, pero recomiendo beberlo ahora. Me queda una botella y esperaré 1,5-2 años para beberla. Gratísimo, elegante y sedoso paso de boca. Es un vino muy largo. Me sigue dando una permanencia de 4,15 minutos

28 meses han transcurrido desde la última botella disfrutada de este gran vino.  ¿Qué me he encontrado?. No comento su presentación por haberlo hecho anteriormente. Si tengo que decir que el corcho, de gran calidad, permanece en perfecto estado, señalando en el mismo la añada y nombre de la bodega. La cara que está en contacto con el vino, muy tintada.

     A la vista mantiene su color rojo picota de capa alta y han aparecido notas rubí. Muy buena, densa, gruesa y lenta lágrima en su discurrir por el cáliz de la copa al que muy débilmente tinta.

     En su fase olfativa mantiene sus ricas y frescas frutas rojas y negras, más débiles, en sazón. Madera de su crianza en segundo plano, manteniendo una fresca y elegante acidez que invita a beber y que le dará más años de vida. También afloran notas balsámicas y de pimienta negra. Los taninos domados.

      En boca es donde mejor le encuentro. Se mantiene fresco, elegante, sedoso, aterciopelado, sin pesadez, con volumen, carnosidad, frutal y mineral. La madera de su crianza, han sido 24 meses, sin sobresalir. Elegante, fresco y frutal paso de boca. Es un vino muy largo. Me da una permanencia, muy agradable, de 4 minutos. ¡Un disfrute de vino!

Han transcurrido 2 años desde la anterior botella bebida y esto continua muy, muy bien.  El corcho de gran calidad permanece inalterable y tintada la cara que está en contacto con el vino.

      A la vista un color rojo picota de capa alta, limpio y brillante, muy buena lágrima que se desliza gruesa y lenta por el cáliz de la copa al que, todavía, tinta.  Ribete granate y sin atisbos de colores teja.

      En nariz abundantes, buenas, finas y frescas frutas rojas y leves negras en sazón. Madera de su crianza en segundo término. Taninos domándose. Necesita un jarreo, pues está ligeramente cerrado. Con notas balsámicas y ligera pimienta negra.

      En boca está muy elegante, con mucho volumen. equilibrado, potente, corpulento, mineral, seco y con carnosidad. La madera de su crianza , que han sido 22 meses en contacto con el roble, a penas se percibe. Permanece en segundo plano. Manda su abundante y gustosa fruta. Taninos domándose. Con una elegante y gustosa acidez que le va a otorgar muchos años de vida y que ahora te invita a beber y beber. Muy grato, voluminos y potente paso de boca. Es un vino muy largo. Me da una permanencia de 4,00 minutos.

Vino encerrado en una botella bordelesa y vestido con una original y moderna etiqueta en su diseño y muy propia de la casa.
Muy buen corcho en el que aparece al añada del vino.
A la vista se manifiesta con un color rojo picota de capa alta. Limpio y brillante. Muy buena y densa lágrima que tiene un lento deslizar por el caliz de la copa a la que tinta. Menisco rubí y granatoso. Sin atisbos de notas teja.
En nariz le encuentro muy cerrado. Necesita una buena aireación y en el transcurso de la comida comienza a manifestar y expresar lo que encierra. Buenas, frescas e intensas frutas rojas y negras del bosque en sazón. Madera de su crianza en segundo plano. Comandando la fruta. Notas balsámicas.
En boca es un vino con abundante fruta, muy equilibrado, muy elegante y corpulento. Madera de su crianza en segundo término. Notas balsámicas. Un vino con volumen, con carnosidad y mineralidad. Excelente y muy grato paso de boca. Te llena muy gratamente la misma. Con los taninos domándose. Mantiene una presente y elegantísima acidez que invita a beber y a llorar por acabarse la botella. Tendrá muchos y prósperos años de vida. Es un vino muy largo. Me da una permanencia de 4,00 minutos.
Un vino que recomiendo abrir un par de horas antes para tomarla y esperar 3 o 4 años para disfrutar de un mejor consumo.

Picota muy cubierto con reflejos oscuros y borde del mismo color. Limpio y brillante.
Nariz compleja, bastante necesitada de aire. De momento los aromas que destacan son eminentemente primaros. Fruta negra, regaliz, guindas al licor, laurel, balsámicos, chocolate con leche, sangre, humedad, barrica y piedras.
Boca musculosa con un alcohol y una madera aún por integrar. Notable acidez. El paso, decididamente contundente, no se hace pesado pues posee frescura. Moras, ciruelas, vainillas, bombón, Pastilla Juanola, hierro y mineralidad.
Final muy largo.
Un vino de corte moderno con buenas hechuras pero todavía muy joven. Estos Batuta suelen dar lo mejor de sí mismos al cabo de los ocho o diez años. Yo esperaría.