Vino encerrado en una botella bordelesa y vestido con una original y moderna etiqueta. Buén corcho. Botella abierta con 45 minutos de antelación para su cata.
A la vista le encuentro de color rojo picota con una capa media-alta. Limpio, brillante, con una buena y densa lágrima que se desliza con pereza por la copa. Menisco picota y con incipientes notas teja.
En nariz a copa parada, a vino con elegante madera francesa; removiendo la copa emergen frutas del bosque de calidad y en sazón, con una intensidad media, arándanos, cerezas, maderas conjuntadas. Algo licoroso, balsámico, mineralidad en forma de tizas de encerado. Según transcurre el tiempo se va abriendo y se hace más expresivo en nariz. El vino va a mejor.
En boca es en vino con volumen, carnoso, potente finura, algo duro, taninos domándose. Una elegante acidez que le dará más vida por delante. Maderas bién integradas. En cuentro algo de monte bajo, me lo auspiciaba en la anterior fase,, alguna nota cítrica, buenos e integrados tostados y retornan las frutas de la fase olfativa. A medida que se va calentando, el vino adquiere más elegancia y las notas licorosas de la anterior fase, la olfativa, van desapareciendo y volviéndose más frutal, balsámico y mineral.
Muy agradable paso de boca y es muy largo. Me da una permanencia de 3,15 minutos.
Resumiendo : Un buén vino al que en mi modesto entender, le falta algo de botella, está duro. Con esa buena y elegante acidez, el transcurso de 2 o 3 años le vendrá muy bién. Esta bodega siempre ha elaborado vinos con mucha vida por delante.Lo se por experiencia. El que hoy hemos catado es un ejemplo.

de Bodegas Ochoa.
Cereza no muy intenso, capa media, lágrima fina y abundante, limpio. Complejo en nariz con un inicio licoroso, fruta negra madura, regaliz, cítricos, balsámicos, minerales, especiados y un fondo de madera todo muy conjuntado. Parece se imponen la CS y merlot a la tempranillo. Buena entrada en boca ligeramente secante, cuerpo medio, todo en perfecto equilibrio (alcohol, acidez, fruta, tanino)con un final persistente con abundantes recuerdos de la fase olfativa.
Excelente para comer con él, no es lo habitual en el mercado y menos en su gama de precio. Se agradece el esfuerzo de hacer algo distinto.

Picota con ribete cereza tirando a teja, capa media-alta muy glicérico
Fruta negra licorosa especias dulces, ebanisteria, pimienta negra y mineralidad.
Buena entrada.. Taninos algo secantes Muy fresco.. Frutal, mineral, especiado y con apuntes a pimientoS braseados Con buena acidez y largo con sensación amargosa

Color rojo picota de capa alta con ribete ligeramente evolucionado.
Nariz de buena intensidad. A copa parada lo que más sobresale son las notas de vainilla y balsámicos. En cuanto agitas ligeramente la copa aparecen notas de chocolate, un punto de After Eight, tostados, fruta negra madura, frutos rojos en aguardiente y un punto muy chulo final de grafito y regaliz de palo. Cuanto más se oxigena el vino y sube un poco la temperatura van apareciendo notas de cítricos maduros, desde el limón confitado a la mandarina madura. Tiene un punto de tierra húmeda, de cacao amargo, tostados y un fondo mineral calcáreo con un punto de carbón vegetal y grafito.
En boca tiene una entrada amplia, con una buena acidez, tanino integrado ligeramente secante, lo que da un resultado aterciopelado, con un punto balsámico fresco y una muy buena acidez que redondea el conjunto.

Buen vino navarro este 8A Origen.

Color rojo picota con ribete entre granatoso y anaranjado, capa media-alta y lágrima que tarda en aparecer y cae de forma fina y lenta tiñendo ligeramente la copa

En nariz la primera impresión es licorosidad y madera. Con aireación va apareciendo fruta madura, especiados y tostados.

En boca entra con fuerza, tiene una acidez correcta y el tanino no acaba de estar pulido del todo. Bastante madera aunque bien integrada.

No es el perfil de vinos que me apasiona aunque reconozco que es un vino bien hecho y que puede tener su momento.

En la visual encontramos un vino de capa alta y color rojo picota con menisco ligeramente anaranjado. Lagrima mediana y abundante.

Nariz intensa, de hecho los aromas que desprende ya llaman poderosamente la atención antes de echarnos la copa a la nariz. Hay fruta negra madura, muy licoroso, caja de puros, especiados (pimienta negra sobretodo), piel de naranja seca, toques vegetales leñosos, como de corteza de árbol y al final aparece la mineralidad en forma de mina de lápiz. En definitiva, nariz de lo más interesante, cambiante y compleja pero equilibrada.

En boca es muy franco, se repite prácticamente todo lo que hemos encontrado antes en la fase olfativa: la caja de puros, la piel de naranja, los toques leñosos... Es un vino sabroso, con una punta salina y una buena acidez. Llena la boca, es potente, con el tanino aún presente, lo que le confiere personalidad y una cierta rugosidad o rusticidad bien entendida. El final es amargoso y tiene muy buena persistencia.

Resumiendo, es un vino de corte moderno, con mucha personalidad y desde mi punto de vista muy "gastronómico". Lo que hubiera dado ayer por tener un buen entrecot, un solomillo o incluso un civet de jabalí para acabarme la botella ;) Desde luego en vista del precio (unos 12 €) no será la última que beberé.

Color rojo algo cereza, ribete granatoso con finos destellos atejados-anaranjados, capa media algo cubierta y fina lágrima ligeramente tintada. Nariz de buena intensidad y bien compleja con una fruta roja y negra bien madura (frutillos del bosque en compota) que le dan un ligero apunte dulzón, toques tostados bien integrados que resultan algo cremosos y desembocan en notas avainilladas, especias dulces (canela), algo de clavo y toques de pimientas en grano, buena complejidad con sus notas balsámicas bien marcadas de raíz de regaliz y regaliz negro, eucalipto algo seco, suaves notas licorosas con apuntes de piel de naranja seca (Cointreau), sensaciones de pimientos rojos braseados (esa Cabernet Sauvignon), finos recuerdos florales (algo de flores secas), café arábica, cacao, hojas de tabaco secas, cuero viejo algo húmedo, mina de lápiz y marcado fondo de terruño con tierra húmeda y mineralidad fresca. Buena entrada en boca aunque algo potente con una suave y dulzona astringencia, notable recorrido de buen cuerpo, bastante equilibrado entre su muy buena acidez y estructura con unos taninos algo rugosos pero agradables que resultan en unas notas amargas muy elegantes, tostados de la barrica bien ensamblados y refrescados por unas ligeras notas licorosas muy refrescantes, fruta madura bien sabrosa, toques dulzones que surgen a medio recorrido, notas especiadas bien marcadas y algo dulzonas (pimienta en grano y algo de canela en polvo), notas balsámicas que se funden con toques de pimientos rojos carnosos, suave sedosidad y algo carnoso, intenso y buena persistencia. Final medio-largo, postgusto de fruta madura y retronasal ahumado y finamente especiado.

Más información en: http://www.elvi.net/2013/09/11/ochoa-serie-8a-origen-2007/

Rojo cereza de capa media tirando a baja con ribete teja. Lágrima fina y abundante.
Al inicio muestra un perfil licoroso, con la fruta en 2º plano, roja y muy madura, ciruelas en confitura, canela, pimienta, café tostado, tierra y fondo de cuero nuevo.
Su ataque de nuevo se presta licoroso, de frutosidad sabrosa casi dulzona, con notas especiadas bien presentes, tostados algo duros al principio, luego se hacen más fundentes con el resto en forma de café y cacao dulce, pimiento rojo y regaliz. Ligeras notas vegetales de matorral leñoso y fondo de grafito. Cuerpo medio con taninos dulces y acidez fresca y esbelta. Final de boca de longitud media y algo licoroso.

No es la primera vez que la bodega Ochoa y Adriana sorprenden en un panorama vitivinícola necesitado de novedades que muevan una situación a veces demasiado satisfecha de sí misma.

Presentación muy atractiva, limpia en color y grafía, con una capsula bicolor, y con información adecuada en ambas etiquetas. Corcho notable.

Capa media-alta para un vino que se ennoblece con un menisco propio de los 7 años transcurridos, marcando notas atejadas en el menisco.

La olfativa es interesante y rica, con predominio de frutas rojas, y un perfil calizo-calcáreo excepcional. Algo de turba y tierra húmeda, que se hace más suave con los toques a regaliz y tostados

El trago es determinante para apreciar y concretar las primeras cualidades: aquéllas frutas, el terreno y los tostados, con una acidez muy conseguida, unos taninos ya pulidos, y una suave amargura que se contrapone al inicial dulzor.ELEGANTÍSIMO.

Vino de largo recorrido en cuanto a maridajes, no debería - en mi opinión - esperar más a una prolongada guarda. Se puede y debe beber YA. Y su precio, por comparación, es uno de sus atractivos añadidos.

Bonito color rojo rubí, de capa media.
En nariz el vino se muestra complejo, destacando al principio mucha fruta roja. Con la oxigenación se empiezan a percibir notas de fruta negra, y ahumados, todo ello con un fondo alcohólico bastante presente.
En boca la entrada del vino se muestra potente, pero poco a poco esa potencia se va domando dejando un buen paso por garganta, percibimos esa fruta roja y negra de la nariz, mineralidad y se hacen evidentes esos taninos aterciopelados en garganta, no molestos pero sí muy presentes. El vino tiene una buena acidez, y un postgusto medio.
Buen vino al que le faltan pulir un poco esos taninos tan presentes, creo que con un poco más de botella el vino mejorará.

Felicitar a la bodega Ochoa y al equipo de Verema por hacer posible esta cata.