Quique Dacosta, el Restaurante en el Mediterráneo
Algo que tenemos pendiente de realizar un año de estos es una visita al Celler de Can Roca. Todos los años nos lo proponemos para ir con los amigos del grupo de cata, pero a última hora, por una razón o por otra se nos tuerce el proyecto.
Este año nos ha pasado lo mismo. Queríamos programar la visita al considerado mejor restaurante del mundo (una vez cerrado El Bulli) y tampoco pudo ser. Sin embargo, nos hemos desquitado en esta oportunidad. El pasado mes de mayo, Federico, Aurelio, Rafael y un servidor fuimos a hacer una visita al mejor restaurante de la Comunidad Valenciana (en nuestra humilde opinión), el restaurante de Quique Dacosta, en Denia.
Quique Dacosta Restaurante abrió en 1981 con el nombre de el Poblet.
Mismo nombre de la urbanización que se ubica. Nada hubiera presagiado por entonces que ese lugar de comida castellana, se convertiría en uno de los referentes de la gastronomía mundial veinte años después. Quique Dacosta recaló aquí, en septiembre del 1989. Pasó por todas las partidas antes de quedarse con la dirección de la cocina. Diez años después era propietario del restaurante.
Con 2** Michelin. Premio Nacional de Gastronomía como mejor jefe de cocina en 2005 y Premio Nacional de Gastronomía 2009, a la mejor Publicación. 2 veces mejor cocinero del año por Lo Mejor de la Gastronomía. Mejor Pastelero del año 2008 Juanfra Valiente. Mejor Maitre del año 2009. Didier Fertilati, entre otras muchas menciones que ostenta Quique Dacosta, Restaurante.
Nosotros nos decidimos por degustar el Menú “Universo Local”. Os lo contamos a continuación, con los vinos con los que maridamos los platos.
Empezamos con snacks.
Sticks de Queso ahumado y frito.
Panceta adobada.
Consomé de Barricas de Ron Barceló Imperial.
Cortezas de Roble
Cañaílla.
Grosella de Mar al momento.
Mini endivias a la naranja sanguina.
Raïm de Pastor.
Estrella de mar entomatada.
Erizo de mar.
Algas al ajillo.
Estos primeros snacks nos lo sirvieron en el pequeño jardín exterior que dispone el restaurante. Hizo calor, pero estuvimos disfrutando de la velada a la sombra. Los snacks los tomamos con un cava Recaredo. Nos fascina cómo Quique Dacosta saca partido de cualquier elemento gastronómico; el queso frito estaba muy rico y la panceta era presentada en forma de pequeños bollos. Lo que más me gustó a mí fueron las cortezas de roble, con un sabor con recuerdos de hojarasca y monte bajo, con una presentación espectacular. El mar fue protagonista en este primer acto, con la estrella de mar, la cañaílla, los erizos, las algas y en algunos snacks observamos un toque oriental.
Seguimos con las tapas
María
Rompepiedra
Nido de golondrina
Tarta de manzana Campari
Papada Pimentón
Piquillos
Cocochas de jamón al pil-pil
Fascinantes las presentaciones y la puesta en escena de todos los platos. Irreprochable. En unas tapas nos sorprendieron sus texturas, como la María y la Tarta de manzana Campari: explosión líquida en el primer caso, cremosidad en el segundo. A destacar en esta propuesta de tapas, el rompepiedra: un servicio de pescado sobre una hoja verde que sorprendentemente su sabor era idéntico al wasabi japonés. Los piquillos nos sorprendieron, los comimos pensando que eran tales, pero confitados. Luego nos indicaron que no eran exactamente piquillos.... no decimos más para no desvelar la sorpresa, si os acercáis por Quique Dacosta.
Continuamos con los platos más contundentes
El agua de los tomates secos, 2011
Cubalibre de Foie Gras con escarcha de limón y rúcula, 2001
Bruma, 2003
Gamba Roja de Denia Hervida. Té de bledas.
Salmonete con incrustaciones de sus interiores al eucalipto, 2011
Arroz Sénia Cenizas. 2008
Todo un lujo poder recorrer los platos de Quique Dacosta de los últimos años y algunos nuevos. Nos gustaron los tomates secos; reconocimos el tipismo alicantino en este plato: no es difícil encontrar tomates secos en algunos platos alicantinos. El jugo del tomate lo encontramos en la cobertura helada del plato. El cubalibre es un clásico de la casa, muy apreciado. La Bruma nos recordó a otro plato que comimos en esta casa hace unos años: el bosque animado. Decenas de pequeños vegetales y verduritas rodeadas por una bruma artificial (ved foto). La Gamba Roja a la altura de siempre. El salmonete, siendo un gran plato, me dijo algo menos. El arroz lo encontramos soberbio. Implecable presentación.
Postres
Campo de cítricos, 2005
Leche, 2009.
Inenarrables. Nos quedamos con el campo de cítricos. Un plato muy original en su presentación y acabado y muy rico. Nos ofrecieron a continuación La Caja Mágica y el Árbol, para tomar unos dulces estupendos con el café.
Cerramos esta breve crónica con los excelentes vinos que nos acompañaron en este viaje por el universo de Quique Dacosta, recomendando su visita encarecidamente, pues no en balde nos encontramos ante uno de los cocineros que darán mucho más que hablar en los próximos años.
Maridaje del Menú
Ulysses Collin Blanc de Blancs.Olivier Collin
A.O.C Champagne
Fontanasanta Nosiola 2010. Foradori
I.G.T Vigneti delle Dolomit
Malus Mama 2009.
Sidra de Naturalmente dulce de Astiagarraga
Les Insarts 2006. Chateau Beauregard
A.O.C Pouilly Fuisse
Nun Vinya Les Taus 2010 Magnum. Cal Raspellet Viticultors
D.O Penedés
Finca El Terrerazo 2010. Bodegas y Viñedos Mustiguillo
Vino de Pago El Terrerazo
Casta Diva Cosecha Miel 2010. Bodegas Gutierrez de la Vega.
D.O Alicante
Moscatel Soleado. Gutierrez Colosia.
D.O. Jerez Sherry Xèréz
2012, Alberto Bermejo
Grupo de cata Mediterráneo
Alicante
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Viendo la foto del sumiller con la botella de Champagne creo que es el Ullysse Collin Blanc de Noirs “Les Maillons” y no el Blanc de Blancs, cuya etiqueta tiene fondo blanco. Es un Champagne brutal, de hecho algo tengo en casa. Tengo ganas de ir a este restaurante, tiene una pinta genial.
Saludos,
Eugenio. -
Ufff.... ¡qué precisión!
En esta oportunidad no podemos recordarlo, ni lo sabemos con certeza. Si puedo asegurarte que el sumiller nos envió la relación de vinos, para no comenter errores e hice un copia-pega....
De cualquier forma, estaba espectacular...
:-)
Es el mejor restaurante de la zona, sin lugar a dudas. Me sorprendió gratamente.