Con esas pequeñas cosas que tiene el Riesling. Fruta amarilla, acidez, toque herbáceo y un punto balsámico, algo de gasolina y finaliza con un redondel de dulzor sin dulzor.

(PVP: 15-20 EUR)

Todo un infanticidio, aunque ya apunta maneras con ciertos toques de hidrocarburos aún está en la fase más lineal, con fruta bien definida, destacando las ciruelas amarillas, toques cítricos, algo de flores silvestres y algún recuerdo a manzana Fuji. Resulta goloso y los apuntes minerales apenas son perceptibles. En boca tiene buen ataque, resulta untuoso aunque la acidez es como una katana, cortante y fría que le da notable profundidad y una excelente definición, largo y con bastante fruta.

Ligeramente pálido, podría parecer sencillo pero hay que olvidarse de eso. Intenso en nariz, con algo que huele a suelo, cítrico, vibrante, pende de un hilo y no se cae, parece frágil pero no lo es. Tiene un toque herbáceo que no desagrada. En boca estalla poco a poco y se mantiene por su buena longitud. Buena estructura. Elegante y cristalino. Francamente delicioso.

Amarillo dorado limpio y brillante.
Nariz de cierta intensidad, algo cerrada en el inicio y que agradece sobremanera el aire. Notas de flores secas, hierbas recién cortadas, frutas blancas frescas, piel de cítricos, limón y pomelo y un fondo mineral que sin duda es el santo y seña de este vino. Es un auténtico zumo de piedras.
En boca se muestra serio y apretado, muy joven, con una marcada acidez pero perfectamente integrada, fresco y ligero pero no exento de cuerpo. Final largo y amplio que nos deja notas eminentemente cítricas y minerales. Con persistencia. Le vendrá bien un tiempo más de botella.

Un extraordinario vino más del “master” Dönnhoff. Situado entre su riesling trocken y el Felsenberg es un auténtico homenaje a lo que es la mineralidad en un vino. Serio, algo apretado y austero, pero ante todo una obra más del mejor elaborador de vinos blancos del mundo. Unos 18 euros, un regalo para su nivel.

Tan perfumados.Basalto. Una sensación de tierra meticulosa, desgajandoese en la boca con notas ácidas, pequeñas frutas y algo de albaricoque