Pajizo con destellos dorados. Nariz de buena intensidad, aparecen aromas a fruta de mesa, ligeros recuerdos a peluquería de señoras, un toque de pétalos de rosa y algo de fruta tropical (mango maduro). En boca tiene un ataque intenso, acidez muy marcada, ligero en el paso y recorrido medio.

Llegué a este vino tras ver múltiples referencias en la prensa especializada como un vino diseñado para mujeres y tal, y hasta en Informe Semanal de TVE que el otro día hablaron de él, aunque sin nombrarlo (sólo la bodega), y la verdad es que me hice una prueba curiosa: tomamos una botella con 15 chicas de la Escuela de Turismo donde doy clase (eso sí que es optimizar una botella)y les encantó a todas menos a dos, curiosamente a las dos que más les gustan los tintos de barrica tipo Ribera y Rioja. Destacaban lo frutal y fácil de beber.

Pajizo con reflejos dorados.
En nariz detectamos uva de mesa, flores, un leve punto de peluquería que afea el conjunto, pétalos de rosas y mango maduro.
En boca tiene una entrada potente, una arista alcohólica, fresco y con buen recorrido.

Dorado pálido. Tiene una nariz bastante intensa, bien definida, con el carácter denso y dulce de la moscatel en primer plano combinado con nota también bastante intensas de fruta tropical. En boca tiene buen ataque, cuerpo medio, bastante buena acidez, es amargoso, con abundantes sensaciones florales, largo y bastante equilibrado.