Entrevista a Delfí Sanahuja

Delfí Sanahuja, un enólogo enraizado en Perelada

Delfí Sanahuja nació en Valls (Tarragona) y lleva más de 25 años en Perelada. Estudió en la Universidad Rovira i Virgili, comenzó haciendo prácticas en Bodegas Torres y posteriormente entró como estudiante en prácticas en Castillo Perelada donde finalmente se quedó. En la actualidad lleva más de 25 vendimias, ha sido la persona responsable de mantener a Perelada por el camino del éxito aportando innovación y dinamismo a la firma. Perelada es una de las bodegas con más peso dentro de la D.O. Empordà y esto ha sido de gran ayuda al resurgumiento que la zona ha experimentado en los últimos años.

Delfí Sanahuja, enólogo de Perelada

La voz de la experiencia en la D.O. Empordà

Llevas ya más de 25 años trabajando en Perelada; esta experiencia te da una visión muy diferente a los nuevos enólogos “nómadas” que van buscando parcelas por distintos lugares para sus elaboraciones. ¿Cuál es la mejor baza que tiene no ser “nómada”?

Para mí es muy importante conocer al máximo una determinada zona productora. Sin duda,
la experiencia que se adquiere durante años, vendimia tras vendimia, aporta un
conocimiento exhaustivo, único, del potencial y posibilidades que tiene cada parcela
vitivinícola para así lograr vinos de muy alto nivel y con una personalidad muy definida.
Pero hay que destacar que también es importante conocer otras zonas productoras y es
que de ese conocimiento nace una visión más amplia de la viticultura en España y las
posibilidades que puede llegar a ofrecer cada variedad en cada parcela, cada variedad en cada terroir.

Perelada es una empresa que no sólo tiene bodega en la D.O. Empordà ya que
también elabora en otras partes de España como Málaga, Rioja, Priorat o Navarra,
¿qué variedad uva es la que más te ha fascinado por el hecho de no haberla trabajado en Cataluña?

En la Denominación de Origen Empordà hay veinte variedades de uva autorizada, un hecho
que te permite lograr un conocimiento bastante amplio de las variedades más conocidas a
nivel español. Estar presentes en otras denominaciones e IGP y trabajar con otras
variedades y terruños es una suerte de la que yo puedo aprender. Desde la singularidad e
identidad que nos ofrece cada zona productora, nuestro conocimiento se multiplica. Hay
casos como el de la bodega de La Melonera en Ronda donde se trabajan uvas autóctonas
recuperadas, en concreto cuatro variedades francamente muy interesantes, algunas de
ellas que solo se encuentran en esta bodega, como son la Romé, Blasco, Melonera y Tintilla
de Rota.
Centrándonos en el Empordà, en Perelada unas de las variedades que plantamos y que
llevamos años elaborando, y nos está dando muy buenos resultados es la Monastrell, y que creo que en pocos años se extenderá a más zonas.

Finca La Garriga

Hasta hace pocos años los vinos de Empordà pasaban desapercibidos por la gran
mayoría del público, no obstante, hoy en día es una región que está en auge. Como buen conocedor de la zona, ¿qué particularidades resaltarías de la D.O. Empordà?

El Empordà es una zona con un gran potencial, si bien considero que aún no hemos sabido
darle el valor que tiene. Una de sus riquezas es, sin duda, la gran heterogeneidad de
terreno que ofrece (arcillas, arenas, pizarras y granito) y que permite hacer coupages no
sólo de variedades de uva, sino también coupages de distintos tipos de terrenos, aportando
matices y complejidades muy interesantes.
Otra de nuestras singularidades de nuestra zona productora es la Tramontana, ese fuerte
viento seco del norte que protege de las enfermedades criptogámicas al viñedo y estresa
mucho las cepas, y que se traduce en uvas y bayas más pequeñas, elementos importantes
para elaborar vinos intensos, equilibrados y con una personalidad muy definida.

Eres un enamorado de L’Empordà pero, ¿qué tienes que decirnos sobre Priorat?

Bueno, yo soy de Valls (Tarragona), cerca del Priorato, y no hace falta decir mucho de una
zona que posiblemente sea la Denominación de Origen de más calidad y prestigio.
Constantemente están saliendo vinos de altísimo nivel.
Una zona admirable por lo que han hecho estos últimos treinta años, recuperar un territorio
que estaba muy olvidado. Y es que desde los pioneros a los que cada día innovan y
trabajan en el mundo del vino del Priorato, han ayudado a poner este territorio en el mapa
internacional.

 

Delfí Sanahuja 

 

Sobre Finca Garbet y la situación de la D.O. Cava

Cataluña es la región principal (y pionera) en la elaboración del cava, no obstante, la D.O. Cava se encuentra repartida por distintos puntos de España, ¿en tu opinión este hecho le beneficia o le perjudica a la calidad del vino espumoso?

Es muy difícil de contestar, y es que la normativa permite elaborar Cava en distintas
regiones. Desde mi punto de vista, lo más importante es que en cada zona productora de la
D.O.Cava se elaboren productos de muy alta calidad, de prestigio y de personalidad, y que
entre todos posicionemos el Cava en el máximo eslabón posible, dándole valor y percepción de marca.

Finca Garbet es uno de los vinos más emblemáticos de la bodega, ¿qué es lo que lo hace tan especial?

Sobre todo, la Finca, Garbet, un paisaje único que exige hacer un vino único.
Hablamos de viticultura heroica, terreno muy pobre de pizarra, mucha iluminación debido
que está enfrente del Mar Mediterráneo, la fuerte Tramontana que sopla muy a menudo, la
densidad de plantación, …. todos estos factores-algunos son los elementos básicos de la
vida (Tierra, Fuego, Agua y viento)- están muy representados en esta Finca tan
espectacular. Es una Finca que no se puede expresar en palabras, hay que ir a visitarla para entenderla.

Me consta que le tienes un especial cariño a la Syrah, ¿cuál es el secreto para
conseguir un vino excelente como Finca Garbet?

Es una variedad que la plantamos en Finca Garbet el año 1.997 y nos ha dado grandes
alegrías; se adapta muy bien en frente del mar, y en este terreno tan pobre de pizarra,
aporta densidad, fruta, frescor, profundidad y mucha complejidad tanto aromática como
gustativa.
También hay que decir que es una variedad difícil de cultivar y que hay que conocerla muy
bien y estar muy encima, especialmente, en la parte final de maduración. Pero en
circunstancias extremas es cuando afloran los vinos más especiales.

 

Finca Espolla

Delfí desde un plano más personal

Durante tu formación tuviste buenos mentores, con el paso de los años te habrás
convertido en uno de ellos para otros, sin embargo, imagino que seguirás teniendo tus referencias ¿quiénes son esos enólogos a los que admiras?

Uno de mis maestros ha sido Josep Lluis Pérez (Mas Martinet), con el que he trabajado
muchos años, de él aprendí que es muy importante la investigación para seguir creciendo
profesionalmente y, sobre todo, ser muy curioso, preguntarte continuamente el porqué de las cosas e intentar dar una respuesta desde un punto de vista técnico. Pero en España hay
grandísimos enólogos, saben elaborar y, lo más importante, saben interpretar el terroir.

¿Los vinos tienen alma o es el alma del enólogo la que se percibe al beber un vino?

Yo creo que es una combinación de distintos factores: planta, clima, suelo y factor humano.
Creo que detrás de un gran vino hay un equipo de personas con un gran esfuerzo y sobre
todo sensibilidad.
Es importante mostrar en los vinos de muy alta gama, el territorio, la finca o la parcela
dentro de la copa de vino, fácil de decir, difícil de mostrar.
El enólogo tiene que interpretar y conducir lo que expresa ese “terroir” concreto.

¿Cómo se prevé la cosecha este año?

Es pronto decirlo, porque aun pueden pasar muchas cosas. Hasta que no tengamos la uva
dentro la bodega mejor no hacer muchas previsiones, pero, por ahora, el viñedo está muy
sano, equilibrado de uv. Si maduran bien las uvas y no hay incidencias climatológicas, creo
que será una cosecha entre muy buena y excelente y con una producción media-alta, buen
equilibrio calidad- cantidad.

 

Verema le desea mucha suerte a Delfí y a todo el equipo de Perelada. Gracias por pasar un rato con nosotros ¡y hasta la próxima!