Cata Mondet en el I Salón de Vinos Franceses Madrid
El lunes 5 de noviembre, en el Hotel Westin Palace de Madrid, tuvo lugar el I Salón de Vinos Franceses. Un evento íntimo y selecto en el que más de una veintena de bodegas francesas acercaron al público de Verema sus referencias más exquisitas y representativas.
El Salón de Vinos Franceses se inauguró con una cata comentada de Champagne Mondet, dirigida por su propietaria Line Mondet, una casa clásica y de elevado prestigio que compartió con los asistentes cuatro champagnes difíciles de olvidar.
Line Mondet, Propietaria de la Bodega (a la izda.) y Florence Mondet
Los inicios de un gran champagne
Champagne Mondet realizó la primera vendimia en el año 1926, que por entonces, tan sólo contaba con una hectárea de viñedo. Fué Jules Mondet, tatarabuelo de Line, quien la realizó. Desde entonces, han sido cinco las generaciones que han dado continuidad al negocio familiar y durante todos estos años Mondet ha seguido elaborando los champagnes de forma tradicional basándose en conseguir una materia prima de alta calidad.
La casa Mondet está ubicada en el corazón de La Champagne, para ser más concretos, se encuentra situada entre Cormoyeux y Romery. Una zona preciosa, con una larguísima tradición vinícola, y apenas a 3km de distancia de la cuna de donde nació Dom Perignon. En la actualidad tiene 11 has, de las cuales, una pequeña parte se encuentra en Passy Grigny. Por decirlo de alguna forma, los champagnes Mondet son unos vinos que nacen en una tierra llena de historia, tradición y rodeados de pura esencia vitivinícola francesa.
Line fue la encargada de presentar los vinos durante la cata. Ella se incorporó a la empresa en 1999 y, a día de hoy, es una de las pocas mujeres que dirigen una bodega en la región de Champagne. Con su llegada, los champagnes sufrieron un nuevo impulso que hizo que la marca Mondet ganase fuerza tanto en Francia como en el extranjero.
Mondet es sinónimo de garantía, y la calidad que brindan sus champagnes son fruto del esfuerzo de una empresa pequeña y familiar en la que trabajan Line, su marido, su cuñado y su hermana Laurent. De forma que, gracias a el minucioso trabajo que realizan todos ellos, en poco tiempo han conseguido, además de fidelizar a la clientela francesa, aumentar la calidad de los champagnes año tras año.
Cata de Champagne Mondet
Mondet un poco más de cerca
Mondet sólo cultiva tres tipos de variedades de uva: chardonnay, meunier, y pinot noir. Todas ellas plantadas sobre suelos arcillo calcáreos y cuya superficie está cubierta por piedras que actúan como reguladores térmicos de temperatura. Las tres variedades que se emplean para la vinificación de los champagnes proceden de cepas que tienen edades comprendidas entre los 30 y los 60 años, siendo las más añejas las que se utilizan en exclusiva para la vinificación del Millésime.
Los viñedos, situados entre laderas y hermosos valles, componen una bella imagen que junto a las piedras y la cubierta vegetal, casa a la perfección con la sencillez de los métodos de elaboración de los vinos. Los champagnes Mondet son el resultado de un trabajo humano, manual y en armonía con la naturaleza ya que la filosofía que mueve a esta empresa es conseguir que el trabajo familiar esté en consonancia con una viticultura sostenible y razonable.
El marido de Line es el jefe de la bodega y ambos son los encargados de hacer los ensamblajes para la elaboración del Millésime y del resto de champagnes. Este momento es crítico y por ello le dedican todo su esfuerzo y lo hacen con el máximo cuidado. Para ello, una vez al año catan juntos todos los vinos, estudian con detalle las propiedades de cada uno de ellos e intentan anticipar cómo se comportará el vino con el paso del tiempo. Tras este decisivo momento, tomarán una decisión que ya no tiene vuelta atrás: la composición final de cada unos de los champagnes.
Line y su marido Laurent
Cada una de las variedades se vinifica por separado, los mostos flor se guardan en tanques de acero inoxidable donde realizan la primera fermentación alcohólica y se mantendrán en esos mismos tanques durante los seis o siete meses siguientes. Alrededor del mes de abril se realiza el tiraje, se llenan las botellas, se taponan para que realicen la segunda fermentación alcohólica, y se dejan reposar sobre rimas de madera alrededor de tres o cuatro años; siendo entre seis o siete años el tiempo de espera mínimo para el Millésime.
Durante este tiempo, las levaduras que están de la botella mueren poco a poco (autolisis) interaccionando con el vino, el carbónico que se genera durante la segunda fermentación permanecerá contenido en la botella integrándose poco a poco con vino. Estos meses de reposo son fundamentales para afinar la burbuja y para que las propiedades del vino se asienten lo mejor posible.
El removido de las botellas se realiza a mano y tiene una duración aproximada de 12 semanas. Posteriormente, tiene lugar la fase del degüelle, y según el champagne del que se trate, se añadirá o no el licor de expedición. Por último, a las botellas se les quita la chapa (tapón provisional) y se les pone el tapón de corcho definitivo, no obstante, antes de salir a la venta permanecen entre dos y seis meses en la bodega.
Y por fin llegamos a la cata
Champagne Mondet Brut Grande Réserve
Elaborado con 65 % Pinot Meunier, 20 % Pinot Noir, 15 % Chardonnay. Durante su elaboración ha recibido vinos envejecidos durante tres años en la casa. El vino base es una mezcla de las añadas 2010, 2011 y 2012.
- Nota de cata: El Champagne Brut Grande Réserve tiene un color amarillo pálido con reflejos dorados, la burbuja es pequeña y fina. Aromas de flores blancas, lías, frutos secos y regaliz. En boca es redondo, afrutado, dulzón, versátil y con final medio.
Champagne Mondet Brut Nature
Elaborado con 65 % Pinot Meunier, 20 % Pinot Noir, 15 % Chardonnay. El vino base procede de las vendimias de los años 2005, 2009 y 2011.
- Nota de cata: de color oro, brillante y carbónico persistente. El Champagne Mondet Brut Nature es floral con notas cítricas, posee aromas a frutos secos que se encuentran envueltos de una fragancia de hierba recién cortada. En boca el vino tiene un ataque vivo, es recto, persistente y con un final muy refrescante.
Champagne Mondet Brut Rosé
Elaborado con 25 % Pinot Meunier, 25 % Pinot Noir, 50 % Chardonnay. El vino base procede de las vendimias de los años 2013 y de 2012. El color que tiene este champagne procede de la adición de vino tinto que fue prensado en una pequeña prensa de madera, fermentado y envejecido en barricas de roble francés durante un año.
- Nota de cata: color rosa salmón con reflejos cobrizos. Nariz afrutada con aromas de rosella y frambuesa. Salen notas cítricas con toque d especias dulces. El Champagne Mondet Brut Rosé tiene un ataque muy frutal, que recuerda a frutas rojas, es fresco, buena estructura, amplio y elegantes. Las burbujas son muy finas y en boca resultan ser cremosa.
Champagne Mondet Millésime 2010
Elaborado con 20 % Pinot noir, 20 % Pinot Meunier, 60 % Chardonnay. Proviene de una viña de 60 años y ofrece un gran equilibro entre la acidez y los azúcares. Este champagne no ha sufrido fermentación maloláctica precisamente para preservar la frescura.
- Nota de cata: amarillo muy pálido y de burbuja muy fina. Es muy floral, recuerda a la violeta y los aromas de las flores secas. Presenta una mayor intensidad respecto a los anteriores. El Champagne Mondet Millésime 2010 es especiado, tiene aromas a levaduras, canela y notas cítricas. Su boca es redonda, flexible, con mucha madurez a la vez se muestra fresco.
Seguro que disfrutaste de la cata tanto como nosotros, Champagne Mondet nos dejó a todos un agradable sabor de boca además de hacernos pasar un inolvidable momento. Gracias a la familia Beaupuits por estar en el I Salón de Vinos Franceses de Verema. ¡Esperamos veros el año que viene!
