El castro de valtuille mencía 2008-bizkai vinos 2011.

Que el enólogo Raúl Pérez es uno de los niños mimados de Parker es un hecho demostrable. Aún sin dar la razón a la crítica Alice Feiring, famosa por querer salvar al mundo del vino de la parkerización, es evidente que no siempre Parker tiene razón. En todo caso de lo que no hay duda es que Raúl es uno de los enólogos más brillantes en la España vinícola de los últimos años. Y lo es seguramente por su conciencia borgoñona, aquella de los inviernos gélidos y los veranos cálidos. Lo que esconde Raúl Pérez tras el cristal de la botella de El Castro de Valtuille Mencía Joven 2008, es una mentira piadosa. En realidad, el término calificativo joven no es exacto. Sí hay mencía juvenil pero también mencía más adulta, criada en madera.
Con catorce grados, el vino de la Bodega Castro Ventosa, me dió las siguientes notas de cata personales :
Color violeta oscuro, con forja intensa. Nariz impregnada de recuerdos a fruta negra y drupa olivácea, que manifiesta cierta sensación de piel animal, cuero no muy gastado. Boca ligera, muy al estilo de su creador, con taninos pulidos casi inexistentes en textura y un recorrido amable, muy femenino. Acaricia la lengua. Persistencia media. Retronasal que emite recuerdos florales y frutales, aunque tan ligeros como un vals.
Fácil de beber, aunque no del gusto de todo el mundo. Complejidad dentro de su naturaleza frágil. Vino de emulsión.
Recomendable para noches de catas ciegas.