Una Vegamar con mejora presentación, muy mejorada...

Dentro guarda una sauvignon blanc perfumada con flores blancas junto con un maduro platano, de canarias claro...;)

En boca entra bastante ligero, de hecho hay que mantenerlo fresco para que sea mas agradable, apenas marca ningún registro, si acaso alguna nota verde de hierba.

Un vino con otra uva (no sé si lleva además macabeo) fuera de la linea habitual de verdejo flojitos, aquí se nota unas sensaciones más elegantes, menos dulzonas, más florales, con buena acidez y buen equilibrio y frescura.

Una buena alternativa que se agradece.

Color amarillo pálido, limpio, brillante.
En nariz hay aromas con buena intensidad y cierta tropicalidad: plátano, melón; también flores blancas, azahar.
En boca es ligero, fresco, con algo de más acidez de la deseable y mucho menos dulce que en nariz; poca complejidad y persistencia.

Un vino fácil para salir de los verdejos fáciles

En nariz es fragante, exultante, es un paquete gozokis-chuches, sobre todo de las de plátano. Hay también aromas florales, es meloso, untuoso, recuerda a la papilla de naranja, galletas y plátano maduro.

En boca la entrada es de una fina acidez, algo marcada, aunque alegra el conjunto, le dota de frescura y desaparece el plátano. No se si llegara vivo hasta el verano. ¿?