Vinos de Cuenca: Variedades Tradicionales junto a la Syrah.
Salva del Saz nos prepara una cata que pretende mostrar que en la tierra de sus ancestros, Cuenca, también saben hacer vinos, lejos de los tópicos sobre los vinos de La Mancha. A fe que lo consiguió por el nivel general que obtuvieron en cata a ciegas.
El vino ganador, el Finca Sandoval, demostró ser un Syrah con todas las de la ley, con una nariz compleja donde algunos vieron ahumados y brea, y otros, fruta negra, balsámicos y mentolados. En boca resultó carnoso y cálido, aunque también áspero, astringente, lo que llevó a algunos a considerarlo aún un bebé. Lo cierto es que, aun siendo quizá todavía un bebé, obtuvo una puntuación media ponderada de 8,1, que es una puntuación más que respetable para los niveles de puntuación de esta peña (excepto cuando perdemos el oremus). Lo cierto es que este vino destacó claramente frente a los otros tres para la mayoría de catadores, cosa que no siempre ocurre en las catas de la peña.
La variedad de la noche fue, sin duda, la Syrah, pues también fue un vino monovarietal de syrah el que quedó en segundo lugar por encima del 7 de puntuación, el Calzadilla Syrah 2001. Ustedes amigos lectores no lo saben, pero no hace ni diez años, esta variedad era un auténtico exotismo para los miembros de esta peña, que osaban compararla, no con el regaliz, sino con el puromoro que toman los niños…Y ahora resulta que los vinos de La Mancha que nos gustan están hechos con ese "puromoro"…Como ha cambiado el país y la peña… Si yo les contara lo que estos socios perpetraron en 1996 con un syrah australiano enviado ex profeso desde ese país por otro socio de la peña…
En tercer y cuarto lugar, pero también con buenas puntuaciones alrededor del 7 quedaron dos vinos de coupage. El Finca la Estacada que reunía 5 variedades con porcentajes que decidieron, según cuenta el elaborador, en diversas catas a ciegas. Si se me permite meter alguna impresión personal, éste resultó ser un vino demasiado Parker (o Porker como dirían alguno). Desde luego sí resultó demasiado astringente para muchos. En cualquier caso, aunque prometo no hablar de los precios en estas crónicas, sí merece destacarse que éste era con diferencia el más barato y que su relación calidad/precio fue posiblemente la más alta.
Last but not least, el Salia 2002, un coupage de syrah y monastrell que para algunos resultó corto en nariz, como mayor crítica.
La Cata se celebró en el local de Verema.com donde disfrutamos, entre otras cosas, de la mejor luz ambiental para catar vinos, de cuantas sedes suele pisar esta peña para sus celebraciones. Además de los socios habituales de verema, con algunas ausencias, asistió por primera vez Manuel Laparma, invitado por el organizador. Las viandas venían, como suele ser habitual, de Mantequerías Castillo que, como siempre, estuvo a la altura de la calidad…y del colesterol que se espera de este emblemático y venerable establecimiento valenciano.
Antes de pasar a las notas de cata de los vinos catados quisiera hacer una puntualización que me parece necesaria para ésta y otras crónicas. Las notas de cata que ahora siguen, al final de la crónica, son las que aportan los organizadores de las catas, basadas en notas de cata "profesionales". No extrañe que se observen discrepancias entre estas notas y las que se deducen de los comentarios de la crónica basadas en las opiniones de los socios catadores de la peña, necesariamente tamizadas, resumidas y ¿por qué no? Interpretadas por este cronista.
