Un paseo por el pasado, el presente y el futuro de Bodegas Protos
Interesante cata la que nos ofreció la Bodega Protos en el restaurante Casa Vicent junto a la ASEV FASCV a la que desplazó la plana mayor de la histórica bodega de Peñafiel. Fernando Villalba, Director de Márketing y Comunicación, acompañado por Marilena Bonilla, directora del equipo técnico y enóloga de la bodega y Carlos Villar, director general de la bodega. Este despliegue de personalidades presagiaba que iba a merecer la pena acercarse y escuchar a la que es la bodega de Ribera por antonomasia, tal vez ese vino que todo el mundo tiene en la cabeza cuando habla de Ribera del Duero sea un Protos.
La primera parte de la cata fue un repaso por los vinos de la bodega, empezando por los blancos de la D.O. Rueda.
Protos Verdejo 2015: Marcado por la variedad, cosa que se agradece. Verdejo al uso bien hecho, sin nada más ni nada menos que ser lo que parece ser. Criado sobre lías durante 3 meses y procedente de cepas de unos 15 años.
Protos Verdejo Fermentado en Barrica 2014: Ahora sí hacen pasar el vino por barrica, unos 6 meses en roble francés y un año de crianza en botella antes de salir al mercado. Se obtiene a partir de cepas de unos 25 años y, al que le guste el vino blanco con barrica marcada, sin duda este vino le entusiasmará. Para los que tenemos problemas con el acuse de la madera en los vinos deberemos esperar algún añito más a que se integre la barrica y dé un resultado más fresco, con menos vainilla y notas marcadas por la crianza. Tan solo hay 4.000 botellas de este vino, así que si quieren guardar, compren ya.
Protos Crianza 2012: Pasamos a la sección de tintos de la bodega y nos trasladamos a la Ribera del Duero. Saltamos el archiconocido Roble y nos metidos de lleno en este vino con una crianza de 14 meses en barrica de roble francés y americano. Un vino de intensidad media, bastante equilibrado, no muy complejo, no muy potente, vamos, un vino que gusta a todo el mundo, hasta a aquellos que echan pestes de los Ribera, a ciegas claro...
Protos Reserva 2011: Damos un salto de calidad en cuanto a materia prima, hablamos de cepas de unos 50 años de edad y un enorme trabajo en la mesa de selección para conseguir este vino que tiene una crianza de 18 meses en barrica y un mínimo de 24 meses en botella antes de salir al mercado. Y se nota la calidad, se nota en el equilibrio, en cómo se funde la fruta con las notas de crianza, en cómo el tanino se encuentra domado y dando textura, en esa acidez fresca que equilibra las notas de fruta negra madura y los especiados. Es curiosa esa potencia inicial que, totalmente controlada, acaba dando un vino elegante.
Protos Gran Reserva 2010: Este vino solo se elabora en añadas calificadas como excelentes y procede de cepas con una media de edad de más de 60 años. El perfecto control del viñedo de Protos, que lleva desde 1927 haciendo estudios al respecto, es determinante para el diseño de los vinos en la bodega. Este conocimiento de su materia prima les permite obtener vinos de gran calidad, como es el caso de su Gran Reserva, un vino marcado por la elegancia, por las notas finas tanto en nariz como en boca. Una finura que hace de este vino una excelente apuesta de la bodega por la calidad. En este caso estamos hablando de un vino con 24 meses en barricas en roble francés y americano y un mínimo de 36 meses en botella antes de salir al mercado.
Protos Selección Finca el Grajo 2012: Cambiando la forma de trabajar de la bodega en cuanto a mezclar diferentes viñedos, la selección de Finca el Grajo es un vino de pago donde evidentemente se busca la expresión del terroir. Se elabora solo en añadas calificadas como excelentes y sus uvas pasan por una doble mesa de selección. Maceración con hollejos y fermentación en barrica francesa de 500 litros para pasar posteriormente a hacer la maloláctica en barrica francesa de 225 litros, alargando la crianza unos 18 meses en roble. Como cabe esperar, el vino con mayor personalidad de la cata, un vino donde destacan las notas minerales y un aire moderno, goloso, con mucha fruta y una buena acidez.
Protos 27: Esta es la novedad de la bodega que verá la luz en marzo del año que viene. Este vino se elabora a partir de un estudio meticuloso de las uvas y levaduras autóctonas que la bodega ha ido aislando y recuperando. Según nos comentaron los responsables de la bodega, esta pequeña gira que está realizando el equipo, servirá también para testear cómo configurar los futuros vinos de la bodega, pues además de catar esta sorpresa antes de su salida oficial al mercado, también realizamos la cata de vinos elaborados con las diferentes levaduras de la misma: Sacharomyces cervisiae, Hypopichia, Pichia, Torulaspora y Metschinikowia.
Interesante cata donde pudimos hacer un repaso del presente y pasado de la bodega pero también del futuro de la misma.
