Guímaro FInca Pombeiras 2012
Guímaro FInca Pombeiras 2012
FICHA TÉCNICA
D.O./Zona
Pais:
España
Tipo de Vino:
Tinto
Graduación (vol):
14,50%
Varietales:
85% Mencía y 15% Caiño, Sousón, Brancellao, Merenzao, Negreda , Garnacha y Mouratón
Precio aproximado
Precio Aprox:
De 30 a 49,9 €
PUNTUACIÓN
Nota de cata NOTA MEDIA:
9.35
/
97
Nota de cata CALIDAD-PRECIO:
8,5
ELABORACIÓN
Fermentado en barricas de 1800 l y 700 l abiertas verticalmente con el 100% raspón. Arranque de fermentación espontánea con levadura autóctona, se remueve la pasta dos veces al día. La fermentación alcohólica dura aproximadamente unos 20 días al cabo de los cuales se delastra y se homogeniza toda la pasta. Arranque de fermentación maloláctica, una vez terminada se deja todo el vino con la madre durante 30 días tras los cuales se procede al trasiego a barricas. Envejece en barricas de 225/500 l de roble francés en las que permanece un mínimo de 10-12 meses tras lo cual se trasiega y se mantiene 2 meses más en depósito. El embotellado se realiza sin clarificación ni filtración, permaneciendo en botella un mínimo de 5 meses antes de salir al mercado.
OTROS VINOS CATADOS DE ESTA BODEGA
Opiniones de Guímaro FInca Pombeiras
OPINIONES
2

Este tiempo de reposo en la botella le ha sentado fenomenal, domando un poco a la bestia, dándole finura, manteniendo nervio y ese disfrute.

La nariz tiene ese torrente de fruta roja, balsámicos, regaliz, pimienta y nuez moscada. Los tostados sirven para darle complejidad, como esa mineralidad más suave, ese raspón y madera más integrados, matorral, flores, notas de tierra húmeda (que se perciben al descorchar la botella) y un toque de café torrefacto. Ha ganado un punto de golosidad, pero manteniendo esa frescura tan característica.

En boca el paso es sedoso, frutal (esa fruta jugosa y sabrosa), floral, con una mineralidad más marcada en esta fase. Tanino muy sedoso, cremoso, con una acidez marca de la casa, pero más suave. Especias picantes, tostados cafeteros, golosinas de fresa ácidas, esa regaliz negra... Todo está integrado, se rechupetea, como esos caramelos de violetas. Matorral, tierra humeda, madera fina, cacao y un postgusto muy largo y frutal, jugoso. Se mastica en boca, es una maravilla.

Está en un momento de consumo cojonudo. Yo no le daría más tiempo, pero es una opinión personal.

Menuuuuuuuuuuuuuuudo pepino.

Un nariz espectacular con fruta roja y del bosque a saco, una mineralidad que parece que estés en mitad de una mina de pizarra, unos balsámicos y herbáceos que te hacen pasera por la viña un día de lluvia, con una frescura increíble. La madera está de fondo, muy de fondo, con unos tostados sutiles. Afloran las especias más picantes, sotobosque y otro cañonazo de fruta, con ese contrapunto de raspón y flores.

En boca ya es para cagarse, porque toda esa frutaza se desliza por la boca con una elegancia y sedosidad tremendas, con una acidez afilada, pero que no molesta. Hay muuuuuuucha mineralidad presente, con los verdores del raspón muy controlados y redondos. Aparecen flores, especias picantes, pero nada molestas y frutaca otra vez. El tanino es rugoso aún, pero nada molesto ni "enciero". Es muy sápido y triste. Triste

Dios, más vinos de este estilo por favor, que son un auténtico canto a la viña, al vino, a la tierra que lo ha visto nacer. Y con un recorrido tremendo, lo que le queda por darnos.

P.D.: Vaya, veo que ha sido mi cata 500 y me alegro que haya sido con este vinazo!!!!!

Cookies en verema.com

Utilizamos cookies propias y de terceros con finalidades analíticas y para mostrarte publicidad relacionada con tus preferencias a partir de tus hábitos de navegación y tu perfil. Puedes configurar o rechazar las cookies haciendo click en “Configuración de cookies”. También puedes aceptar todas las cookies pulsando el botón “Aceptar”. Para más información puedes visitar nuestra Ver política de cookies.

Aceptar