-Fase visual: Rojo cobrizo, ribete teja, capa baja, lágrima medio ligera, ligeros sedimentos, aún con cierto brillo.

-Fase olfativa: Algo cerrado al inicio, conviene decantarlo, una vez oxigenamos el vino en la copa agitandolo percibimos aromas terciarios y especiados, setas, champiñón, terroso como algo mineral, trufa negra, tostados, café.

-Fase gustativa: Entrada ligera, seco, acidez viva, alcohol bien integrado, cuerpo más bien ligero, mineral, sabores terciarios, torrefactos, especiados, final vegetal y posgusto medio largo.

  Parece mentira que despues de mas de 50 años todavia tenga vida este vino, es que hasta en el color no parece que tenga esa edad, aunque algo cansado si que se leve.

Los aromas son licorosos y con mucha mas presencia de la crianza que de la fruta, con notas de cueros, tierra humeda.

 En boca la acidez mantiene la estructura del vino, con notas de la crianza y un tanino marcado, caracter mineral. Supongo que la añada tiene algo que ver en que todavia tenga vida este viejuno. No se puntuar un vino de estas caracteristicas.

Rojo rubí, ribetes rojizos, capa media-alta. Limpio.

Nariz intensa y compleja, abierta desde un primer momento aunque son vinos que agradecen el aire sobremanera. De registros diáfanos, frutas rojas licorosas, especias orientales, maderas finas, toques balsámicos, caja de puros, tabaco de pipa, ahumados, café en grano, piel curtida, tierra mojada. Un vino en plena forma y con un gran desarrollo en copa.

En boca vuelve a confirmar el gran estado de esta botella, es un vino vivo, con una gran acidez y un paso redondo, mostrando clase y elegancia, largo en final dejando sensaciones especiadas y minerales con un leve toque ahumado. Tanino perfectamente integrado, aunque con esa fuerza vital de los 64. Buena persistencia.

Tras la botella algo caída que disfrutamos hace unos meses en Segovia, nos volvemos a citar con este vino y ahora sí que podemos decir que hace honor a su nombre y a su fama, pues al fin y al cabo se trata de la referencia más exclusiva de Franco Españolas. Otro más a la lista de los portentosos 64.

Sensación de transportanos a un vino con un toque de elegancia, serio. Madera muy acusada, destacan para mi los matices de via de tren, es decir, piedra, mineral y hierro, con un toque humedecido. De lo más interesante de la cata en tintos

Rojo rubí, ribete rojizo, capa alta.
Nariz con buena intensidad, muy cerrada en el inicio y mostrando una suciedad excesiva que afortunadamente se va con el trabajo en copa. Notas de una fruta muy confitada y casi licorosa, un marcado fondo especiado y mineral, toques animales, carne de caza y humedades, piel curtida y tabaco además de granos de café.
En boca no está a la altura de la nariz pero aun así deja entrever la enorme clase que atesora, simplemente no fue la mejor botella. Aun así el vino está ahí, tiene acidez, mucha presencia, gran longitud y estructura para seguir envejeciendo. Final de gran longitud y tanino todavía algo recio.
En la cata histórica de Rioja que hicimos en Segovia y cuyas notas estamos ahora publicando, tan solo 2 botellas de 20 salieron malas y un par de ellas que, estando bien, no eran la mejor botella posible. Una de ellas es este Excelso, un vino que tiene una pinta extraordinaria y que esperamos poder probar otra vez para corroborarlo. No puntuamos.

El diseño de la etiqueta, la botella con lacre amplio, el propio nombre… Franco Españolas ponía bien a las clara que este vino era su buque insignia.

Muy reducido inicialmente, con notas sobremaduras y humedad, fue abriendo y desplegando sus virtudes, con muchos terciarios de inicio, especias (pimienta, vainilla), finas maderas, apareciendo finalmente toques de fruta roja bien madura.

En boca se muestra muy amplio, con una fina trama que combina peso y acidez en un equilibrio total, con fruta muy madura y quizá un punto dulce de más en comparación con otras botellas probadas anteriormente.

No es la mejor botella probada, pero este vino es siempre grande y luce a gran nivel. No en vano, como decía, es lo mejor de Franco Españolas, y eso en esos años, es muchísimo.

Enlace al post con la cata completa:
https://www.verema.com/foros/foro-vino/temas/1183237-cata-historica-rioja-parte-i

Abierto 1 hora antes.

Vista. Color rojo amarronado en el centro de la copa, con bordes ocres, cobrizos, marronaceos y anaranjados, destellos ambarinos, marfiles. Limpio, claro, luminoso. Capa baja, sin precipitados, Radiante!!. Una maravilla. Aparentando 20 años menos de una extraordinaria cinquentena.

Nariz: Sin excesivos signos de reducción, aparece, en primer término, una ráfaga de fruta roja, acidulada, sobre una fina y agradable base de licor. Se aprecian un suave especiado, maderas nobles (cedro..), pajar, sotobosque, cueros finos, tabaco ..

En boca es tremendo, sensual desde el primer momento, con una intensidad inicial media, despliega, al poco rato, un sinfín de aromas: la fruta roja (guindaa, cereza ácida), licores, duelas envinadas, marquetería, heno, tabaco de pipa, especiado dulces .. notas de vainilla. Con un paso por boca terso, equilibrado, casi de puntillas... acidez de libro, todo ello acompañado de un elegante cremosidad; Sin fátiga alguna, dándolo todo, con aguante, llenando las papilas para un final larguísimo, casi interminable.

Y casi todo para mí (mi pareja estaba resfriada y ni pillaba ni una)... Una delicia que roza lo excepcional.

Va a ser un gran año, éste del 50º.. pero muy grande. Y, desde luego, el inicio dificílmente se hubiera esperado mejor.

33 euros.

De color rubí marronoso brillante de medio cuerpo, limpio, borde atejado. En nariz es un ejemplo de factura clásica y de total armonía, de buena intensidad, fino y elegante. Aromas complejos de larga crianza, vainilla, salvia, cremosos, mueble viejo, ebanistería, especias ahumadas, hojarasca... No se acaba. Necesita un rato para ir sacando apuntes de fruta roja en compota y algún acento vegetal de gran calidad. No para de ganar en potencia al ir respirando, sin un ápice de cansancio. Redondo, redondo... En boca sorprende por su elegancia y amplitud, vigoroso, lleno de taninos de gran firmeza pero con sensaciones de absoluta integración. Tiene un apunte de dulcedumbre sobre el que se asienta una acidez chispeante, muy en la línea de los grandes vinos del 64, con una textura de medio cuerpo que aporta frescor y ligereza. Intenso, ligeramente nervioso, concentrado, sabroso, muy puro. Un tinto que expresa lo mejor de Bodegas Franco-Españolas en una añada sensacional. Merece su nombre.

Más información del vino: http://vinosclasicos.blogspot.com.es/2013/04/excelso-1964-gran-reserva.html

Teja ambarino, ribetes arcillosos, de capa baja.

de nariz poco intensa, pimentoso, mueble viejo, algún balsámico, nogal húmedo...

ataque leve, poco peso, un ligero amargor le hace sabroso, post. largo, agradable.

que todos cumplamos años así!!!