disfruto la última botella que me quedaba de éste sobresaliente vino.

Aunque han pasado varios años, los aromas siguen muy semejantes a los indicados en la anterior valoración, sigue la intensidad, complejidad y toues de elegancia.

La boca sigue en consonacncia a lo descrito en la ficha de cata anterior, sólo indicar que el vino todavia le quedan unos añitos de vida, ya siguen vivos los taninos y tiene buena acidez.

Lástima que no tenga otra botella para poder comprobarlo dentro de dos o tres añitos.

Color cereza-rubí con borde granate.

Aromas de buena intensidad donde destacan las frutas de varios tipos con buena madurez y expresividad, balsámicos, minerales, vainilla, flores, toques vegetales y de monte bajo.

En boca es frutal y atractivo, el paso de boca con buen equilibrio y bastante redondeado para ser un 2009, falta un pelin de estructura y cuerpo, aunque tiene caracter y personalidad, taninos vivos y pulidos, muy bien el retronasal con lo más representativo de la nariz y el final es largo y con buena persistencia sobre todo especiada y frutal.

Muy buen vino, que me ha quedado la duda de si seguirá mejorando en botella o ya ha llegado a su cenit.

Botella abierta con una hora de antelación.
De color rojo picota de capa media-alta, ribete rubí y lagrima densa que tiñe la copa.
En se muestra muy expresivo, con una mezcla de frutillos silvestres y notas florales y vegetales, también aparecen lácteos, maderas finas, ligeros ahumados, especias dulces y un fondo muy mineral.
En boca tiene una entrada fresca, con un carácter muy rústico, taninos que aún se dejan notar y una magnifica acidez, postgusto muy largo, especiado, vegetal y con esa gran mineralidad, seña de identidad de los vinos de Fernando.
Pues un vinazo en toda regla y en un momento magnifico para su disfrute.

Algueira empieza a hacer pruebas con el roble Gallego, consiguiendo esta gran Mencia.

Color rojo picota, ribete granate, capa media-alta, lágrima densa.

En nariz mucha fruta, rojas y negras, sotobosque, notas vegetales ( este vino se hace con raspón ), regaliz, lácteos, ligeros toques de vainilla sobre un fondo muy mineral como todos los Algueira.

En boca mucha fruta, taninos ligeramente astringentes, grandísima acidez. Vino muy fresco con final medio-largo con un intenso recuerdo mineral.

Otra gran Mencia de Algueira. Le falta un tiempo para pulir esos taninos.

precio 20 euros.

La primera vez que lo probé, fue una muestra de barrica en bodega que me encantó. Ya se veía entonces, a pesar de la evolución que le faltaba, que el roble gallego no iba a tapar la fruta. Al de unos meses lo probé recien embotellado y ya me pareció muy disfrutable. Además, la sensación inicial se mantenía.

Unos meses más tarde me encuentro un vino amplio, bien equilibrado, bastante redondo, aunque con los taninos aún marcados y por acabar de pulir del todo. Muy frutal (frutos negros, moras,...). Es la sensación de beber un vino joven con la estructura y mayor complejidad que sólo la madera le puede dar. Sensación mineral muy marcada.Regaliz.
En nariz presenta entre la fruta (roja y negra) ligeros verdores que se reproducen también en boca.
Mejora por momentos. Muy bueno, no tengo la menor duda, pero seguro que le queda margen de mejora. Habrá que ir guardando botellas.