Color cereza rubi claro de capa media-baja.

Aromas de buena intensidad a flores, hierbas de campo, frutos rojos con buena madurez, toques de pasteleria y atisbos de cuadra.

En boca es fresco y frutal, el paso de boca equilibrado y con regular caracter, los taninos suaves, el retronasal bastante bien con muchos de los aromas de la nariz y el final largo y con buena persistencia.

Es un vino que ya se encuentra al final de su plenitud y creo que le queda algo de vida, pero no creo que muchos años. Tengo otra botella y la descorcharé en no mucho tiempo.

....olvidar una botella en tu vida !!!!

Pedazo vino, saltan las lágrimas!!!!

gran complejidad en nariz, fruta ácida, notas de pizarra, leve toque herbáceo,bosque atlántico, eucalipto,etc......

boca suave,sedosa, de equilidrio acidez- alcohol, tanino fino y sedoso.....

En fin muy buen acompañante para la merluza del cantabrico al horno.....

Vino decantado con una hora de antelación.

Presenta un bonito color rojo picota, capa media, ribete con ligeros tonos violáceos y lágrima bastante densa.

La nariz es de película, con una buena intensidad y unos aromas perfectamente equilibrados, todo está ahí. Lo primero que llama la atención es que es un vino en el que predominan los balsámicos, la fruta del bosque, flores y ciertas notas vegetales que nos hacen recordar la tierra de la que viene. También hay frutas rojas, especias, madera perfectamente integrada y el fondo de sotobosque con notas de pizarra mojada que ya es "marca de la casa" en Algueira.

En boca es afrutado y fresco, rústico y elegante, tanino vivo pero agradable, paso de boca sedoso, enorme acidez, final floral y balsámico larguísimo con un postgusto de frutas del bosque y flores que dura horas.

Hasta la fecha mi favorito de Algueira era el Merenzao....... ahora tengo mis dudas :-)

Veremos como evoluciona con el tiempo.

Botella comprada en la propia bodega.
Abierta con una hora de antelación.
De color rojo picota de capa media, ribete violaceo y lagrima densa que tiñe la copa.
En nariz se muestra muy fragante y perfumado, muestra mucha fruta de tipo silvestre y gran presencia floral y alguna que otra nota vegetal, tambien aparecen ligeros tostados, vainillas, lacteos y ciertas notas balsamicas muy de fondo.
En boca tiene una entrada fresca, con un tanino vivo pero perfectamente integrado, marcada acidez y un postgusto largo, con esos recuerdos florales y cierta mineralidad al final.
Fernando sigue sorprendiendonos con cada una de sus elaboraciones.
Muy bueno.

Vino color picota madura con ribete rosa-violeta, capa media, limpio, brillante y lágrima densa.
En nariz, con buena intensidad fruta roja excepcional, fresas, frambuesas, cerezas y ciruelas maduras, todo ello en mermelada, acompañada de una fina y elegante madera como el cedro. Bouquet excepcional, puro terciopelo en nariz.
El paso por boca, suave, fresco, afrutado, vivo, amplio, acidez media alta, notas cítricas que lo resaltan, amplio y esplendoroso, elegante y bien definido con un tanino, aterciopelado y redondo.
Retronasal, afrutada, exhuberante y sabrosa.
Posgusto, larguísimo y muy bueno.

Picota claro con reflejos azulados y ribete rosa. Capa media tirando a baja. Muy brillante y algo sucio, al terminar la botella observamos todo el poso que queda. Lágrima densa.
Muy perfumado y expresivo desde el principio: hay piruleta de fresa, rosas, regaliz, algún balsámico, ahumados y mucha mineralidad.
En boca lo notamos goloso y según se va aireando, va ganando en complejidad. Tanino poderoso, alcohol y madera casi imperceptibles y muchísima acidez. Volvemos a destacar las frutas rojas como la frambuesa, las flores el regaliz y las abundantes notas minerales.
Postgusto largo y primario.
Un vino delicioso, de unas variedades que aún no había probado. Cuesta unos 25€ que volveré a pagar encantado

Vista: de color cereza con ribete granate, capa media, limpio, brillante, con lágrima que casi no arrastra color.
Nariz: Buena intensidad, franco, con una gran carga frutal, delicado, con cierta sensación golosa, notas ahumadas, maderas aromáticas, ligeramente balsámico y con tenue toque de setas de otoño.
Boca: Es un vino muy personal, con sensaciones ácido-dulces, diferente, con cuerpo y estructura media, más bien ligera, taninos presentes y ligeramente verdes, con una acidez que quiere imponerse al resto de percepciones y un final corto y en el que la ácidez vuelve a ser protagonista.
Es sin duda, en mi opinión, un vino muy personal, sobre todo en boca donde resulta singular, diferente y de una frescura importante.

perdón por la errata.

Algueira Fincas 2009 se presenta con tonalidad cereza de capa media-baja, con viveza, frescura, ribete cardenalicio y toque borgoñón.
En nariz es fruta roja, cerezas, especiados, balsámicos, intensidad, regaliz y violetas.
En boca de nuevo la fruta roja, es largo, regaliz, especiados, acidez (que no verdor), un toque final de calidez y en conjunto un buen ejemplo de vino atlántico. No está al nivel de por ejemplo el Algueira Merenzao, pero es un buen vino.