Serradelo es otra de las formas que tenemos los gallegos para referirnos a la variedad Brancellao, de la cual hay bastantes estudios que afirman que era la variedad tinta que reinaba por toda Galicia antes de que la filoxera hiciese de las suyas. Esta cuvée de la que os hablo hoy sale de las manos de Fernando González de Bodegas Algueira, en las pendientes verticales de la sub-zona de Amandi. Aunque no soy muy amigo de las comparaciones con otras variedades más reputadas (porque cada variedad es su propio mundo), entiendo perfectamente que muchos la hayan bautizado como la Pinot Noir del Norte de España. De color pálida (debido a una maceración suave, porque, de otra forma, la Brancellao en su día daba vinos oscuros y con bastante cuerpo, un estilo que ya no se busca), sedosa, fina, fragante (cerezas, frambuesas, naranja sanguínea, hinojo, helecho, laurel), de peso etéreo a la par que vertical, capaz de mostrar en copa el perfil de esos suelos de componente pizarroso sobre los que crecen las vides. Algueira trabaja esta Brancellao en barricas durante unos 14 meses y, a pesar de tener ya 10 años este vino, todavía le queda mucha vida por delante ya que no ha desarrollado casi ningún terciario, el color sigue bastante vivo y, su columna vertebral, todavía es muy linear. Sin duda alguna, esta es una cuvée para tener en toda cava personal que se precie.

Un vino pálido de frutalidad incisiva , ácida y tremenda mineralidad. Un vino inconfundible que te atrapa. Ligero en boca , pero largo y equilibrado.

La verdad es que es un vino que se bebe bastante bien, tiene algunas de las cualidades del brancellao, suavidad y elegancia en boca, ademas de buena complejidad y bastante delicadeza, pero en conjunto hay mucha diferencia con otro brancella, que creo que todos conocemos.

No obstante hay que reconocer que es un vino sobresaliente, y que se encuentra en un buen estado de "forma", aunque mejorarà algo (creo que poco), con unos añitos en botella.

Buen vino, con una regular RCP. Me hasido entre correcta y buena, soy caritativo y le otorgo la "mejor".

vuelvo a disfrutar otra botella de este muy notalbe vino.

Las sensaciones, lógicamente, dado el poco tiempo transcurrido, siguen siendo muy semejantes a las indicadas en la valoración anerior, sólo indicar que parece ser que por ese tiempo que llevan las botellas reposando, ahora el vino en boca se encuentra más equilibrado y redondeado y sobre todo, goza de un paso de boca más redondeado y con más calidad.

En general, un poco mejor que la botella anterior.

Color cereza rosado claro.

Aromas de mediana/buena intensidad a frutos rojos con buena madurez, flores, hierbas silvestres, toques especiados, vegetales y leves minerales. Bastante bien en nariz.

En boca es más "flojito", el paso de boca con bastante equilibrio y muy redondeado, falta carácterr y un algo de potencia, el retronsal bien con algunos arómas de la nariz, y el final es normal y con alguna persistencia.

Sin duda se bebe muy bien y es agradable, pero le falta "fuelle".