Gota a gota en Verema

Nueva York, entre el tenedor y la copa... (I parte)

Nueva York, una ciudad fascinante, cautivadora y cosmopolita para la mayoría de la gente, incluso para quienes preferimos los paisajes bucólicos y el aire fresco del campo por la mañana, sin dejar las comodidades de la civilización moderna; una buena cama, aire acondicionado, TV con cable y un baño amplio y muy limpio... aaah y deliciosos platillos regadas con un buen vino.  Y aquí está la clave para muchos amantes de la Gran Manzana, donde se pueden encontrar todo tipo de lugares exóticos y no tanto, desde una pizza al horno de leña hasta carne de rinoceronte... es cosa de tener un poco de imaginación y pedirlo, seguramente se te concederá.

La Meca del comercio del vino, tiendas como: Crush y Chambers Street, entretenimiento puro revisando etiquetas, y con los 6 litros permitidos en la aduana la cosa pinta bien. Tan solo el inconveniente de cargar una pesada caja varias cuadras, pero no hay tiempo para que la lleven al hotel, además falta el traslado al aeropuerto, y del aeropuerto a casa... pero vale la pena.
La primera tienda está en la 52th entre Lexington y la 3rd, y la otra, más tradicional,  está ubicada en el 148 de la calle del mismo nombre, a unas cuadras de la reconstruída y bulliciosa zona del WTC.

Ninguna tienda de vino podría tener prestigio sino fuera por lo que tiene dentro de sus cuatro paredes. El vino y la gente que lo promueve y vende. Bodegas, regiones y marcas que difícilmente se consiguen de este lado del Atlántico, sobre todo si tomamos en cuenta que además están todas juntas. En el 148 de Chambers Street. Lo primero que compré fue un Carema de Ferrando 2007, había dos etiquetas, compré el más económico. Un vino que probé por primera vez hace unos años en esta misma ciudad, un vino seductor de 37 dólares. Porque además de una selección abundante y muy cuidada, es una tienda cuyos precios son más que justos. Después metí al carrito dos maravillosos blancos; un Nikolaifhof Wachau 2010 y un Willi Schaefer        Riesling Spätlese 2010 del Mosela. para después aceptar la recomendación de un vendedor muy amable cuyo nombre nunca pregunté, pero que me dijo: Si de algo interesante con burbujas se trata... y me mostró un montón de botellas, decantándome por un Vouvray Brut, de Francois Pinon, por pura curiosidad, ya que nunca lo he probado. Para esa noche en el hotel me llevé un rosado vinificado con tres uvas; gamay, grollean y cabernet franc. Vino que comentaré más adelante.

Camino al hotel tuve una urgente necesidad fisiológica, pero mi educación me impide meterme a un bar así como así. De manera disimulada me acerqué por una Coca Cola light. Cuando me di cuenta que había un Mosela por copeo, estiré el brazo. Heinz Eifel 09, un riesling kabinet que nadie me culparía si lo prefiero a la Coca Cola, misma que acabó en la coladera. Este riesling es un vino abocado, que huele a té verde y cera, sutil en boca con notas cítricas a limón.
Para cenar mi hijo y yo estuvimos de acuerdo en sushi, así que bajamos al vestíbulo y preguntamos al <em>concierge</em> que por lo regular confunden el precio con la calidad, que no siempre es directamente proporcional. Nos señaló dos, y escogimos el más cercano; Megu, un restaurante sobrio, meseros amables sin llegar al apapacho, materia prima de buena calidad, sabroso pero excesivamente caro. Con un riesling cabinet, anónimo, y un shiraz, aún más anónimo tuve suficiente además de algunas tablas de sushi y platillos que cabian en un dedal. Saldo 300 verdes y un sentimiento de haber sido timado. No hubo postre.

En el hotel descorché el rosadito, vinificado como dije antes, con tres uvas. KO 2010, de Sari Puzelat-Bonhomme un Vin de France, genérico sin estirpe, pero muy bien integrado, de color salmón, brillante, cítrico con un ligero cosquilleo y un final de lima con un fondo mineral, algo muy digno para acabar el día y olvidar el atraco recién perpretado.

Continuará...


 

  1. #2

    EuSaenz

    Ojo, el gran productor del Mosela del que hablas es Willi Schaefer, no Shofer. Esos Vouvray de Pinon son una delicia.

    Saludos,
    Eugenio.

  2. #3

    BenjaminBerjon

    en respuesta a EuSaenz
    Ver mensaje de EuSaenz

    EuSaenz:

    Gracias por la corrección, me faltó una a y una e y me sobró una "o"... espero que no afecte el aroma y el sabor :-)

    Saludos

  3. #4

    Olaf

    Que ricos los Vouvray de Pinon. Espumosos ya solo me quedan 3 botellitas... voy a tener que volver a pasarme por el Loira pronto.
    Saludos

    Olaf

  4. #5

    BenjaminBerjon

    en respuesta a Olaf
    Ver mensaje de Olaf

    Olaf:

    Dichoso tú que estás cerca, yo no lo he visto más que en NYC. Así que lo guardaré hasta una buena ocasión.

    Saludos

Cookies en verema.com

Utilizamos cookies propias y de terceros con finalidades analíticas y para mostrarte publicidad relacionada con tus preferencias a partir de tus hábitos de navegación y tu perfil. Puedes configurar o rechazar las cookies haciendo click en “Configuración de cookies”. También puedes aceptar todas las cookies pulsando el botón “Aceptar”. Para más información puedes visitar nuestra Ver política de cookies.

Aceptar