Decorando la casa con tapones de corcho

¿Qué hacer con los tapones de corcho que guardas en casa?

¡Hola gente! Dada mi afición a guardar los tapones de corcho de las botellas de vino que bebo en casa (sola y/o acompañada) he decidido darles una salida y hacer algo de lo que sentirme orgullosa. Soy una mujer madura y polifacética que ha decidido cambiar el aspecto de su casa (que parecía un piso de estudiantes) y convertirlo en un HOGAR. Decorar la casa con motivos vinícolas no formaba parte de mi lista de propósitos de año nuevo pero me parece que no es una mala opción. 

Tapones de corcho. Fotografía de Jean-Luc Benazet

Para ello quisiera poder hacer con mis propias manos algo que me ayude a decorar mi estudio y de paso mejorar la estancia principal -llamémoslo cuarto de estar pese a que es un espacio sumamente pequeño- para convertirlo en un espacio más cálido y acogedor. Es más, estoy totalmente convencida que contribuirá a crear un ambiente amoroso y romanticón para que mi “James Bon” admire una de las tantas facetas ornamentalistas que poseo.

Ese momento en el que llegas a acumular montañas de tapones de vino en tu propia casa

Pensabas que no ocurriría y, sin embargo, ¡zasca! No hay una sino varias montañas de tapones, ¿verdad? ¿Sabes de lo que te estoy hablando? Para los que no lo sufráis en vuestras propias carnes y queráis conseguir tapones de corcho, lo esencial y lo más importante es beber bastante vino para poder acumularlos. Por ejemplo, hay gente que pide tapones a los demás o se los lleva de los restaurantes o incluso de casas ajenas para sumarlos a los que ya tiene en casa. ¡Pero! Siento defraudaros porque ése no es mi caso: ¡todos mis tapones provienen de mis propios descorches!

En un principio empecé a guardar los tapones en una bolsa de basura y ésta en un cajón pero eso ¡ya esa agua pasada! Rectifiqué y decidí que a partir de ahora las bolsas de basura sólo iban a ser bolsas de basura e iban a dejar de ser utilizadas como meras bolsas para guardar tapones y cosas en general como zapatos. Reconozco que les he dado mucho uso, incluso como bolsa de aseo y/o lugar para guardar medias y calcetines.

Taburete hecho a base de tapones de corcho

¡Pero eso lo hacía mi otra yo! Ahora soy una mujer madura, organizada (que decora su casa, cocina de vez en cuando y recoge los botones que se caen de las camisas para llevárselos a mi madre) y cuidadosa que ha cambiado radicalmente para dar una imagen femenina y ordenada cual Isabel Preysler. Bueno, quizá no tanto. A mí me resulta un poco sosilla pero bueno, ya me entendéis. ¡A saber para qué usará ella las bolsas de basura!

Como ya no iba a usar más bolsas de... Decidí comprar un bonito cesto de mimbre (futuro cesto donde "mi James Bon" apilará los troncos de leña para encender la imaginaria chimenea de mi minúsculo comedor mientras yo descanso en el sofá, copa de vino en mano) para guardar ahí los tapones y, ¡oye, en apenas un año lo he llenado hasta arriba! Bueno, lo llené en pocos meses (claro, que tengo muchos amigos que vienen a cenar) así que tengo varias bolsas de basura guardadas llenas de tapones porque ya no me caben en el cesto de mimbre. ¡Ojo, y eso que ya no las uso, es sólo hasta que sepa qué hacer con tanto tapón de corcho!

Ideas para decorar tu casa con tapones de corcho

Estoy haciendo un listado de ideas para decorar la casa con los tapones de las botellas de vino que me he bebido. Ya os adelanto que todo no lo voy a poder hacer todo porque mi casa es minúscula y yo, aparte de cenar con amigos, salir de juerga, dormir y tal, también trabajo. Por lo tanto, no tengo tanto tiempo libre como por ejemplo Isabel Preysler (o al menos, creo que debería tenerlo, ¿no?).

¡Empezamos!

Una alfombra: sin duda, un proyecto ambicioso y os aseguro que me da para cubrir la casa entera como si fuera una moqueta (por todos los rincones de la casa, incluido el baño) Ya os he dicho que tengo el altillo de mi cuarto lleno de bolsas de “b” (sacos de plásticos negros) llenas de tapones.

Alfombra para la ducha hecha con tapones de corcho

Llaveros: el otro extremo, algo sencillo, discreto y útil ya que se usa a diario, no ocupa espacio y es un regalo que siempre es bien recibido.

Un mural para la pared: sencillamente perfecto. Le puede dar a la casa un toque desenfadado, rústico y, cómo no, acogedor. Si me decanto por esto podría: LOVE ME NOW. Tonterías las justas.

Posavasos: más práctico imposible. Algo que usas tanto cuando estás sola como cuando viene amigos y/o el novio de turno. ¿He dicho novio?

Una cortina: me encantaría pero el problema es que mi casa es muy pequeña y me agobiaría.Tendría que arrancar la puerta de mi habitación para hacerle hueco a la cortina y honestamente prefiero que siga habiendo puerta.

Cortina de tapones de corcho

De momento estas son las cosas que se me han ocurrido y creo que me veo capaz de hacer. Acepto ideas y sugerencias. Todo es bienvenido. ¡Gracias!

El próximo día os diré por qué idea me he decidido al final.

¡Van a caer en mis redes, ja ja!