Agradecimiento y Devoción este sentimiento es el que genera un rincón de Málaga llamado DOM VINOS

Hace unos días, como por casualidad, fuimos a parar a un rinconcito entrañable, donde te hacen sentir como en casa, y en el que Antonio te trata con un mimo tan especial, que hace de la estancia una verdadera delicia.

Fue nuestra vuelta al mundo del vino después de una etapa difícil y complicada, lo cual hace todavía más especial el cariño y sensibilidad que allí nos encontramos. Tenemos que reconocer que tanto los vinos que probamos como su maridaje estaban elegidos con mucho acierto, y realmente se notaba como se potenciaba el uno con lo otro. Que me perdone Antonio mi mala memoria, pero a pesar de ello, quiero hacer un esfuerzo en recordar los vinos que tomamos y las exquisiteces que los acompañaban:

Empezamos con una manzanilla pasada de Pastrana para picar con unas aceitunas aliñadas y aceite para mojar pan, no me acuerdo de dónde, pero que estaba exquisito.

Después tomamos Gewurztraminer dulce de Gramona (Vi de Gel) con erizo relleno de crema de caviar y paté.

Un cava Pago de Tharsys con un bombón de foie con almendras y cebolla caramelizada.

Urban blanco con una ensalada de ahumados (atún, salmón y bacalao), mezcla de sabores realmente explosiva.

Un tinto Creación CONRAD Soleón 2006, de Ronda, elegantísimo, con carrillera que se deshacía en la boca.

Un postrecito, mezcla de chocolates, suave, bueniiisimo, para los muy chocolateros.
Y por último, un vino generoso de licor Sauci S'Naranja, del Condado de Huelva, con un queso de cabra y mermelada de rosas, para chuparse los dedos.

En fín una noche memorable gracias a ANTONIO FERNANDEZ, un tipo cariñoso que sabe transmitir su pasión por el mundo del vino y la gastronomía.