Color amarillo dorado con burbuja pequeña abundante de lenta ascensión.
La nariz es de buena intensidad, elegante, compleja, fruta blanca, recuerdos a frutos secos, toques florales, hinojo, queso fresco, cítricos dulces, recuerdos a vainilla y marcada mineralidad.
En boca tiene una entrada elegante, aterciopelada, excelente acidez que da forma al conjunto, redondo, muy cremoso, mineral y elegante, con un final muy largo en el que vuelven las sensaciones a fruta, flores y mineralidad.
Elegancia en esta gran añada para disfrutar.

Dorado pálido brillante, burbuja media y abundante.
Buena intensidad en nariz, con una gran complejidad y un maravilloso desarrollo en la copa. Elegante y definido, nos da notas florales, frutas blancas de hueso, piel cítrica, vainillas, anisados, lácteos, todo ello sobre un preciso y precioso fondo mineral y especiado que otorga finura y encanto.
En boca es una delicia adictiva por su redondez, profundidad y expresión de terruño. Perfecta acidez, paso limpio y redondo, cremoso, profundo y delicado. Final de frutas maduras con trazas de frutos secos amargos, volviendo el deje mineral en posgusto. Persistente y con un carbónico muy bien integrado.
Comenzamos con las cosas serias de verdad en la cata de Delamotte-Salon del Encuentro Verema, añada maravillosa en Champagne y uvas de Le Mesnil, Avize, Oger y Cramant. Fuerza, delicadeza, finura y grandeza en un vino que no hará más que ir mejorando. Cuesta unos 55 euros, pero merece totalmente la pena. Muy bueno.

Amarillo dorado muy brillante, fina burbuja interior sin formar corona. Maduros aromas de cítricos en compota, fruta blanca, notas cremosas con recuerdos de quesos azules, frutos secos tostados, sensaciones ahumadas con ciertos toques de salazón, levaduras algo húmedas y toques de terruño de fondo. Fresca y agradable entrada, fruta cítrica bien madura, excelente acidez, cremoso, sensaciones de tostados y levaduras frescas, suaves especiados (especias blancas) y agradable persistencia. Final largo, postgusto de cítricos maduros y retronasal ahumado.

Más info en: http://www.elvi.net/2012/12/26/delamotte-blanc-de-blancs-brut-2002/

Degustado en cata horizontal de Champagne Millesimés 2002, junto a Laurent Perrier, André Clouet, Veuve Clicquot Vintage y Moet Chandon Grand Vintage.

Sin duda muy superior a la añada precedente embotellada por Delamotte (1999), año de parámetros cualitativos más modestos, (aunque a pesar de ello consiga hacerle sombra a algunos productos de añadas excelentes) que presentaba una austeridad organoléptica pronunciada.

Este 2002 es insolente en la exhibición de su grandeza; es muy joven y se le augura lo mejor para el futuro, pero es que ya es excepcional.

Color amarillo pálido, con matices verdosos; espuma abundante pero delicada; pureza, franqueza en aromas.
No posee el encanto de la madurez oxidativa pero ofrece complejidad aromática basada en cítricos, pera, vainilla, notas florales, mantequillas...todo equilibrado y con esa elegancia que prodiga la Maison pero que no siempre se encuentra en sus vinos.

Textura untuosa sin ser pesado, muy sápido, de gran concentración y finura a la vez. Acidez precisa; largo y estimulante. Un gran vino.

El precio en España suele rondar los 60 euros; para una añada como esta sería adecuado. No obstante se consigue en alguna web francesa por 40 euros; y eso sí que merece la pena. Emociona ;-)