Mar de Frades 2019
Mar de Frades 2019
FICHA TÉCNICA
Bodega
D.O./Zona
Pais:
España
Tipo de Vino:
Blanco
Crianza:
Con crianza
Graduación (vol):
12,00%
Varietales:
Albariño 100%
Precio aproximado
Precio Aprox:
De 10 a 19,9 €
PUNTUACIÓN
Nota de cata NOTA MEDIA:
8.36
/
92
Nota de cata CALIDAD-PRECIO:
6,8
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ELABORACIÓN
Los racimos sanos, frescos y flamantes, pasan a las cajas desde donde se transportan a bodega, allí se guardan en frío unas horas hasta su llegada a la mesa de selección donde sólo las uvas elegidas, el 58% del total, descienden hasta los maceradores Ganímedes, llenos de CO2, donde se maceran con sus hollejos durante 32 horas, para obtener mostos intensos y florales; otra parte de la uvas, el 21%, se llevan directamente a las prensas, donde, en un ambiente inertizado se obtiene un mosto tropical y salino, que posteriormente es macerado con el método Ganímedes durante 72 horas. Los mostos íntegros y pulcros, fermentan lenta y pausadamente, con sus propias levaduras durante 3 semanas. Pasado un tiempo se retiran las lías gruesas de los vinos, y éstos permanecen durante 6 meses con un periódico battonage hasta su filtrado y embotellado.
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Opiniones de Mar de Frades
OPINIONES
59

Vino límpio, brillante, untuoso y con buena lágrima. De color amarillo pajizo con ribetes acerados y algo verdosos.

En nariz se presenta como un vino muy complejo, se van apreciando los aromas a flores blancas, muchos cítricos, hueso de albaricoque, melocotón y fruta tropical, piña. Toques balsámicos.

En boca destaca por su frescura, magnífica acídez y muy bien integrada. Aparecen esas notas cítricas, lima, lichis... así como la piña y maracuyá. Buena persistencia con un toque amargo y salino.

Es de un vivo e intenso color amarillo pajizo, brillante y con reflejos acerados, abundantes lágrimas densas y fijas.

Aromático, en "equilibrio" entre lo comercial y lo significativo. De nuevo corte varietal, cargado de frutas tanto de hueso, albaricoque y melocotón de viña, como fruta tropical, maracuya y plátano. Marcan y condicionan el conjunto las levaduras más que el terruño y el viñedo. Punto cítrico (pomelo) , sensación melosa, lías y un fondo que recuerda al hinojo.

En boca tiene cuerpo y estructura, punto salino tramado con una rica acidez, ahora viva y refrescante, nivela al alcohol, buena integración. Descansas de la nariz, no es tan exagerado, alcohol fragante y que se deja sentir. Con tacto, punto cítrico, pienso que un poco más de tiempo en la botella lo integrará todo y quedara mejor. Punto serio y meloso, final amargoso que lo mantiene. Retro cargada de la fruta apreciada en nariz pero con un poco más de equilibrio, sin tanta pesadez. Busca la comida... 

Creo que este vino catado a ciegas habría despistado a más de uno. Tiene ese corte moderno de la Albariño con las frutas de hueso y las flores pero también se arrima a la tropical y al hinojo, producto de las levaduras de fermentación llevándote hacia la estereotipada Verdejo (no a la auténtica).

En botella crecerá (el corcho es muy bueno y capaz) bajará el ímpetu en nariz y ganará en complejidad, yo iria por ese camino...

Bonita botella, con sobre relieve en blanco las olas, y las gaviotas azules, en la etiqueta, ahora para saber si la temperatura es la correcta para beberlo, se nos pone un barco en azul, antes era la gaviota, siempre me pareció un punto este sistema, no recuerdo haberlo visto en otra etiqueta a excepción, claro, del verdejo de Ramon Bilbao.

De un bonito color limón, reflejos algo más verdes, brillante.

En nariz, cítricos, flores blancas, toque salino.

En boca, fruta, un toque salino, final elegante, para mi le falta la acidez, que tanto me gusta en algunos albariños, y eso que es añada nueva, no lo veo para mucha guarda, algo que, si es recomendable en los albariños a los que estoy acostumbrado, mucho más afilados.

El maridaje es claro, pescados, arroces, mariscos, guisos suaves, de carne blanca y sin más, con el aperitivo, a la hora del vermut.

De los comerciales es el que más me gusta, fue de los primeros que destaco, sobre todo por el rollo etiqueta avisa temperatura, si bien es verdad que ahora me gustan con más acidez, para dejar en botella, entiendo que este perfil es más apropiado para un uso más general .

Caracteristica y poco habitual botella azul, que mas alla de los gustos de cada uno es una distincion de marca y lo hace distinguible a distancia, lo que creo es un acierto de marketing.

Este vino se presenta con un color pajizo-dorado con reflejos verdes.  Brillante y muy bonito y para mi sorpresa un poco mas subido de tono de lo esperado.

La nariz es muy exuberante, fruta tropical a tope y posteriormente citricos, fruta blanca y algun toque salino. En boca me gusta mucho mas. Manteniendo ese toque de maracuya, platano, citricos y salinidad es a la vez muy fresco y con una acidez marcada. Levemente untuoso pero siempre muy fresco. Un excelente acompañante de mariscos o cualquier otro "fruto" del mar.

Botella tradicional de la bodega en color y forma muy Atlantica, de etiqueta principal muy combinada con la misma,  la etiqueta trasera con información esencial y suficiente para los conocedores de este vino tan original. Tapon largo y compacto, bien presentado y de calidad.

VISTA.

      Color amarillo pálido alimonado típico de la bodega y de la uva, con un tono cristalino, delicado y sutil.  Lágrima fina, abundante y transparente sin apenas burbujas. Un albariño delicado y sutil cuando lo meneas aparece unos reflejos verdosos como de manzana, con unos toques marinos y minerales muy especiales. 

OLFATIVA.

 En nariz encontramos un vino aromático, elegante y fresco que transmite todas las cualidades de la uva albariño, aromas de fruta blanca con notas cítricas y algo salitres, fruta de hueso, albaricoque, toques tropicales como a mango, albaricoque y lichis,  Sin duda es un vino de aromas sutiles y elegante complejidad. Buena presencia de aromas florales como a jazmín y violetas, es un sinfín de aromas, y el más que tradicional a hinojo de los grandes vinos albariños.

BOCA.

En el paladar destaca su toque ágil, atrevido y contundente a fruta madura, fresco con un toque salino, de final largo y persistente.  Elegante, sutil y sofisticado con un paso de acidez no contenida que le da una persistencia media, recorrido medio-largo  con un toque untuoso de marcado carácter atlántico.

 

 

 

  Amarillo pajizo de algo mas de intensidad para lo joven que es, ribete dorado.

  Nariz muy tropical, a copa parada los aromas a piel de platano son muy notorios, incluso lichi. Con la aireación aparecen frutas mas serias, ligeros recuerdos de melocotón y manzana, aromas citricos. Los balsámicos aportan frescura al conjunto junto a los herbaceos, toque floral y salino.

    En boca es mas serio, no encontramos tanta fruta tropical y lo mejor sin duda es la marcada acidez casi punzante y que le permitirá al vino que en un par de años sea mucho mas disfrutable. Notas cítricas de pomelo, la fruta recuerda a lamanzanaverde acida, con herbaceos como el hinojo y cierta salinidad. Final ligeramente amargo que junto a la acidez hacen salivar.

Color amarillo pajizo/dorado con ribete verdoso, limpio y brillante.
En nariz encontramos mucha fruta de inicio, plátano, piña y lichi; a medida que va pasando el tiempo y con aireación, aparecen notas vegetales, hinojo, leves balsámicos, encontramos también sutiles aromas de flores blancas, final salino y mineral. Las notas tropicales que dominaban al principio se van equilibrando con las más frescas que aparecen en un segundo plano inicial.
En boca una tremenda acidez que nos encanta, vino atlántico, entrada muy fresca, muy persistente, textura muy agradable, perfecto equilibrio entre fluidez y untuosidad, agradable amargor final.

Botella y etiqueta originales y atractivas, en consonancia con su contenido.

Vino fresco, sedoso y salino, con aromas frutales y florales. Color amarilla pálido con reflejos verdosos. Perfecto maridaje para el marisco.

Sigue demostrando a mí entender el porqué de su popularidad entre los vinos blancos de España.

Amarillo pajizo no demasiado pálido con tonos dorados, limpio y muy brillante.
Nariz intensa y aromática. Cítricos, manzana verde, hierba fresca, menta, eucalipto y un fondo dulzón.
Ataque intenso, salinidad y frescura a raudales. Suave y persistente.

Amarillo dorado, con reflejos dorados y ligeramente verdosos. Acerado. Muy limpio y brillante. De buena lágrima, glicérica y de lento discurrir.

Nariz muy franca, de buena intensidad aromática, rica en aromas frutales y de crianza sobre lías. Destacan los aromas de cítricos, de lichi, de limón y cáscara de pomelo amarillo, con ciertos toques de fruta blanca, de pera nashi, junto con tropicales de piña y fruta de la pasión. Notas de flores blancas (jazmín) y levaduras de panadería frescas, con recuerdos de hierba tierna, de junco de ribera recién cortado, espárrago verde y raíz de hinojo, con ligeros apuntes balsámicos de eucalipto. Fresco, elegante y serio. Albariño de gran pureza aromática, sin adornos ni accesorios.

Boca de gran frescura, en la que destaca una acidez muy marcada en la actualidad, pero perfectamente integrada en el vino, vertebrándolo en su recorrido por boca y dándole una gran viveza y expresión. La boca reproduce con precisión los aromas en nariz: notas tropicales de piña, manzana verde y cítricos (vuelve ese pomelo amarillo), con cierto perfil herbáceo y anisado de hinojo. Ligeramente amargo y muy salino, de mineralidad marcada. Seco. Vuelve a ser un vino serio, lineal en su recorrido y franco en aromas. Buena longitud. Apetece seguir bebiendo. Con mucha capacidad de guarda por su acidez bien integrada.

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