Arrayán Rosado 2010
Arrayán Rosado 2010
FICHA TÉCNICA
D.O./Zona
Pais:
España
Tipo de Vino:
Rosado
Graduación (vol):
13,50%
Varietales:
Merlot, Syrah, Cabernet Sauvignon y Petit Verdot.
Precio aproximado
Precio Aprox:
De 5 a 9,9 €
PUNTUACIÓN
Nota de cata NOTA MEDIA:
7.98
/
90
Nota de cata CALIDAD-PRECIO:
7,8
Opiniones de Arrayán Rosado
OPINIONES
63

Me ha sorprendido su complejidad, la verdad es que almenos yo estoy menos acostumbrado a los rosaditos.
Presentación muy moderna pero sin pasarse, todo estudiado y muy armónico.

Visual: Rojo pálido con reflejos rosas y anaranjados. Muy limpio y brillante. Fluye muy bien en la copa y es muy atractivo en este aspecto.

Olfativa: fresas y frambuesas en primera impresión. Algo de melocoton y albaricoque. gominolas y notas lacteas en la evolución. Tiene algo fresco como hierba buena en el fondo, en conjunto muy fresco y facil de llevarse a la nariz.

Gustativa: Entrada suave pero con caracter. Goloso dulce y con mucha fruta roja madura. Como he dicho antes algo de balsámico en el final. Retronasal, permitidme la licencia, parece una piruleta. Deja una sensacion final amplia que llena la boca y muy agradable. Genial para esta estación de verano.

Gran vino rosado que no desmerece a ningun otro tipo además muy buena RCP.

Rojo frambuesa con reflejos anaranjados.
Intensidad correcta, con notas frutales, frambuesas, golosinas, con notas de naranja sanguina.
Ataque demasiado acido que no te deja ver otros matices, con posterior marcado caracter frutal, fresa acida, con buena perssitencia y final con taninos presentes.

Color rojo fresa brillante y muy limpio. Muy bonito ribete levemente anaranjado. Lágrima muy fina.
Nariz: Fruta roja fresca, chicle de fresa ácida, grosella, frambuesa. Notas florales bastante destacadas y herbáceas. Bastante complejidad para un rosado. Pasado unos minutos empieza a aparecer el alcohol.
En boca fresco, goloso, con bastante cuerpo para ser un rosado, bastante intenso, muy buen final con ese sutil toque amargoso. Puede disfrutarse a pequeños sorbos y también ser un vino de trago largo.
Buen diseño y presentación, moderna y atractiva. RCP muy buena.

Excelente vino, los rosados en principio no son mis vinos preferidos pero este rosado me ha gustado.

Color frambuesa, lágrima media,

En nariz destacan los frutos rojos, regaliz rojo

En boca marcada acidez, frambuesa, goloso, amplio y expresivo.

Color frambuesa palo. Nariz donde aparecen cítricos que dan paso a fruta roja acida.
En boca se muestra equilibrado. Buena acidez y nuevamente mucha fruta. Destaca su amargosidad final.
Presenta una amplia gama para su maridaje (desde salmón o steak tartare de atún, pasando por pastas, arroces e incluso cocido madrileño).
Me ha sorprendido gratamente este rosado toledano.

El diseño de la etiqueta con el dibujo a carboncillo de una cara con trazos duros cuyas mejillas están cubierta por un racimo de uvas y un hoja de parra respectivamente, tiene clara vocación rompedora que distingue a esta marca en un lineal con lo cual indudablemente consiguen el efecto de singularidad deseado pero que, reconozco, no es mi estilo. Estas tonalidades grises apagan el vibrante color del vino que tapa.

El corcho es de buena silicona y desde aquí quiero romper una lanza en favor de este tipo de corchos para los vinos jóvenes, sean del color que sean, porque hacen su labor a la perfección y por igual precio, un corcho tradicional sería de peor calidad.

Visualmente es de gran belleza. Su color frambuesa es intenso en la base de la copa y va aclarándose hasta llegar al anaranjado de la piel de cebolla cercano al ribete, para luego hacerse totalmente trasparente.

Es tan limpio y brillante que aunque el color no coincidiera, inmediatamente me hizo recordar las guindas de las tartas. Una lágrima fina barniza el cristal con sutileza como pinceladas de almíbar.

Fruta roja muy fresca es su primer saludo aromático, la frambuesa como protagonista; la golosina las envuelve. Con el transcurrir de la cata, tímidas pero claras notas florales acarician la fruta: violetas, lavanda… Sigue destapándose y muestra la fruta tropical, esencia de mango y lichis, y ya casi al final, cuando creí que ya no encontraría nada más, aparecen notas de azahar.

En boca es un vino goloso, cremoso y voluminoso desde el primer contacto. La cereza y la frambuesa en primer plano, el mango en la retaguardia.

Ostenta una notable estructura para un rosado, un buen recorrido y un post-gusto ligeramente ácido. Su aterciopelada untuosidad es comparable a la de un buen albariño.

Veinticuatro horas después, la golosina es menos perceptible en nariz pero la intensidad frutal no ha disminuido ni un ápice, acaparando la atención la fruta tropical y la blanca.
Su franco sabor frutal, su marcado cuerpo y su rica mantequilla siguen aportando delicia al paladar.

Un gran rosado, plenamente recomendable y con un precio razonable; los hay buenos más baratos pero se merece los 6€

Cereza, color bastante subido para un rosado, parecido a algunos pinots noir de borgoña.
Aroma inicial de fresa madura, toques tropicales(mango) de buena intensidad, luego salen notas cítricas y herbáceas.....luego algunas más complejas(manzanilla), sugus de piña(de los azules), notas especiadas...cítricos(mandarina verde, limón maduro)
Buena complejidad aromática.
Buen peso en boca, buena acidez, goloso, fresa ácida.....buen postgusto.
Muy recomendable.

A la vista se presenta con un color frambuesa, con destellos unas veces ligeramente violáceos y otra vez algo anaranjados, limpio, brillante, no consiguiendo una lagrima valorable a pesar de varios intentos.

En la nariz aprecio un buena intensidad para no ser un vino tinto, con fruta y flores nada mas “asomar” la nariz, mas tarde predominan las sensaciones de “chuches” de fresa, violetas tímidamente van apareciendo y algo de balsámicos y hasta esporádicos de mineralidad.

Al paso por boca, tiene cuerpo, con buena acidez, fruta y alcohol muy bien compensados. Fase final larga y agradable con la fruta muy presente.

Botella con etiqueta con el anagrama-dibujo típico de la bodega y con información suficiente. Corcho de los de moda, que estéticamente no me agrada, pero que entiendo que al no tratarse de un vino de guarda, es un simple detalle estético o manía.

Según he leído vale 7 euros en tienda, lo que me parece buena relación calidad precio.

En cojunto, me ha gustado este vino rosado (soy muy poco usuario de rosados) pero este no es un tal al uso y por tanto recomendable.

Presenta un precioso y brillante color rojo frambuesa con una lágrima fina y lenta que se desliza por la copa.

En nariz resulta un vino pletórico en aromas de frutos rojos (frambuesas, grosellas) y con notas ácidas sobre una base floral (violetas). Un conjunto armónico que ofrece una completa paleta de finos aromas varietales envueltos en notas aromáticas (manzanilla, lavanda, romero) que aporta la vegetación autóctona que rodea el viñedo.
Si seguimos olfateando aparecen aromas golosos, con un recuerdo a la niñez, como si tuviéramos delante una piruleta de fresa, al compás de algún recuerdo cítrico (pomelo) y tropical (piña).

En boca presenta nervio y resulta fresco, sabroso, jugoso y juguetón. Además es untuoso, goloso y posee una equilibrada acidez que le aporta estructura y fineza. Con final largo y persistente que te deja en boca un toque láctico como de yogurt de fresa y con un toque algo amargo que invita a seguir bebiendo.

Vino que posee el atractivo y las flores de la Syrah (40%), la golosidad de la Merlot (40%), el cuerpo de la Cabernet Sauvignon (15%) y la acidez de la Petit Verdot (5%). Todas estas características dan lugar a un vino estructurado, con todas sus variedades en perfecto equilibrio y conjunción, y que por su intensidad nos permitirá ponerle la guinda a una dulce noche de verano.

Color rosa fresa de intensidad media. Limpio y brillante. Bastante lágrima.
En nariz fresas, cerezas, flores y algo de cítricos... sobre un fondo de caramelo.
Ummmm.... Amplio y carnoso de entrada, con un toque dulzón atractivo. Cuerpo medio y buena acidez. Sedoso y fructoso en el paso.
Tiene un deje final a caramelo y fruta (otra vez cerezas y fresas) muy agradable.
Si se mantiene bien fresco está muy rico, y resulta muy apropiado para los calores del final de agosto.

Cookies en verema.com

Utilizamos cookies propias y de terceros con finalidades analíticas y para mostrarte publicidad relacionada con tus preferencias a partir de tus hábitos de navegación y tu perfil. Puedes configurar o rechazar las cookies haciendo click en “Configuración de cookies”. También puedes aceptar todas las cookies pulsando el botón “Aceptar”. Para más información puedes visitar nuestra Ver política de cookies.

Aceptar