Sacada de nevera a unos 6-8ºC y atemperada a unos 10-12ºC.
Servida en copa amplia Lehmann.
Visual
Amarillo con tonos tendentes al topacio claro, limpia, brillante y de fina lágrima, muy abundante, de lenta caída.
Buena visual para una manzanilla con casi 2 años y medio desde su saca. (9)
Nariz
Intensidad media-alta que va a más con la aireación.
Notas de fruta muy madura como pera de agua en licor, cítricos (mandarinas, pomelos) muy pasados, salinidad, yodados, frutos secos y notas como lácteas-cremosas que no recordaba en una manzanilla de Navazos de la bodega Rainera Pérez Marín, pero que sí predominan en las 3-4 botellas que he probado de esta saca, herbáceos, balsámicos, flores marchitas, aldehídos y bota vieja sanluqueña.
Muy buena nariz aunque no la mejor en manzanillas del Equipo Navazos. Me gustó mucho más la nº 71. (9,1)
Boca
Ataque frutalmente maduro pero fresquísima y salina a la vez, de gran sapidez, con estupendos yodados y toques que recuerdan a mariscos, frutos secos tostados, herbáceos, cremosa, llena la boca, muy gastronómica en el paso por boca, de buen cuerpo y estructura.
El final es de muy buena longitud y sapidez, con un retrogusto y retronasal salino y yodado excelente. (9,35)
Muy buena manzanilla, de las Top aunque, para mi gusto, bastante por detrás de la saca anterior (nº 71).
RCP muy buena en cualquier caso pues sigue siendo un vinazo.
La Bota de Manzanilla Nº 93 "Equipo Navazos" - Hijos de Rainera Pérez Marín, DO Sanlúcar de Barrameda
La Bota de Manzanilla Nº 93 "Equipo Navazos" - Hijos de Rainera Pérez Marín, DO Sanlúcar de Barrameda
La Bota de Manzanilla Nº 93 "Equipo Navazos" - Hijos de Rainera Pérez Marín, DO Sanlúcar de Barrameda
finiquito la última manzanilla que me quedaba de esta "edición".
Tengo que comentar que en esta ocasión, el vino se encontraba en un momento de decaida, no tenia casi nada de complejidad y al mismo tiempo le faltaba bastante calidad.
En fin una decepción con esta botella.
ahora si que es mi última botella de esta sobresaliente manzanilla.
Todo lo comentado en las valoraciones asnteriores, siguen siendo válidas con esta botella-
Tiene una nariz muy buena, aunque hay que reconocer que la boca es bastante superior, hay mucha variedad gustativa y sobre todo tiene un muy buen beber y muchos toques sápidos.
mi última botella.
Una verdadera pena de verdad, es una de las manzanillas que más me ha gustado de todas las que he disfrutado en mi "larga" vida, tiene casi todos los atributos necesrios para ser, lo que es, una gran manzanilla, que se bebe fenomenalmente y que deja unas satisfacciones entrañables.
Vale todo lo comentado más abajo, ya que las sensaciones son idénticas a las expresadas en las valoraciones anteriores, es un vino fantásticvo y muy sobresaliente. Para mi, con unos langostinos frescos y de mediano tamaño, ha sido a conjunción más grande de este vinazo.
disfruto mi tercera botella de este sobresaliente vinazo.
Todo lo comentado en las valoraciones anteriores, siguen siendo válidas en esta prueba.
Una manzanilla suave, pero al mismo tiempo con personalidad y "saber estar".
la manzanilla ha mejorado en boca. Ahora ademas de la complejidad que tenia, se ha tornado elegante y plena de finura, se bebe fenomenal y tiene un montón de atractivos, sobre todo el boca.
Las sensasciones de la nariz, son muy semejantes a las indicadas en la valoración anterior, pero en la boca insisto que hay una mejoría bastante considerable.
Rica, rica, lástima que sólo me queda una botella.
Color amarillo dorado clarito con toques brillantes.
Aromas de buena/muy buena intensidad donde destacan las flores, los toques oxidativos, frutos secos, minerales, leves notas punzante que no molestan, bastante bien la nariz.
En boca es una maravilla, el paso totolmente "coherente" y peno de complejidad, carácter y calidad, largo y elegante recorrido, muy bien el retronasal con muchos de los aromas de la buena nariz, el final es muy largo, atractivo y digno de ser un VINAZO.!!!
Dorado intenso. Limpio y con buen brillo.
Buena intensidad aromática que deja una sensación no excesivamente amplia ni compleja, pero sí muy nítida, directa y juvenil. Una manzanilla con lo mejor de los dos mundos. A saber: limones, frutos secos, toques almendrados, especias punzantes, botica y mineralidad.
Boca fresca, clara, pedregosa, vertical y con un indiscutible carácter sanluqueño. Este tipo de manzanillas las prefiero así: elegantes, sutiles y que no atosiguen.
Final largo.
Muy buena saca. De las más disfrutables de las últimas ediciones. Veremos lo que da de sí.
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